Ariana Grindelwald Y El Legado Maldito

📜 Capítulo 43. Reimon Khanna

— cuanto lo siento —sus ojos se cristalizaron del miedo al saber que la mujer había sido petrificada, pero no podía llorar ahora, debía ayudar a la señora y protegerla.

Ariana tomó a la profesora Haywood de sus hombros rígidos y la llevó consigo hasta la puerta y con dificultad, se dio cuenta que no sería posible pasar el vagón tan fácil con ella como saco de papa en el suelo. Era mejor si pesará menos o al menos que flotará.

Una idea corrió por la mente de Ariana.

— el encantamiento de levitación —tal vez si hacía levitar a la profesora Haywood, Ariana podría llevarla consigo, pero recordó que el encantamiento solo funcionaba en objetos, lo cuál no sería capaz de llevarlo, pero si al menos algo la llevará consigo, podría ser capaz, entonces Ariana vio las cortinas y otra idea surgió, podría ser capaz de llevarla con la cortina al otro lado, envolverla con ella la haría perfecta para que levitara, corrió un poco lejos de la profesora y tomó la cortina con fuerza para arrancarla de su sostén, pero la fuerza de Ariana era nula y no podría quitarla, pero con un hechizo sí podría ser posible, así que estiró su varita y pronunció— Accio —a una distancia significativa y en el momento en que el hechizo tocó la cortina, está como torbellino vino sobre Ariana, pero con fuerza la pequeña Grindelwald lo atrapó y se apresuró a cubrir a la profesora Haywood.

— ¿Dónde está? —

— con la chica —

Ariana percibió la conversación entre dos personas, ahora que no traía los tapones de oído que Scorpius le había prestado, lo cierto es que la audición de Ariana había sido desarrollada poderosamente o tal vez era una habilidad que había obtenido de nacimiento.

Atrapó a la profesora Haywood en las cortinas completamente y una vez hecho pronunció el encantamiento de levitación— Wingardium Leviosa —pronto el hechizo blanco cubrió por completo a la profesora Haywood y la hizo levitar cuando los pasos de dos hombres atravesaban el vagón de enfrente. Ariana se apresuró a tomar una parte de las cortinas y llevar de la mano a la profesora Haywood con ella al siguiente vagón, dónde aguardaban sus cosas, se apresuró en un momento de valentía para cruzar de un lado a otro con la profesora en frente y cerró la puerta tras de ella con el corazón desbocado.

Ariana estaba asustada por lo que estaba sucediendo, no entendía porque ese hombre había atacado a esta mujer de apariencia noble.

Camino a paso lento y seguro hasta su compartimento para estar con Faigel y esperar a que todo eso terminará, pero cuando intento entrar en el compartimento un hombre de extraña apriecnia aguardaba dentro de él, con un periódico en mano que tapaba su rostro, abierto de par en par y con un titular.

"HOGWARTS¿ESCUELA O PURGATORIO?"

Los rumores de que la ley sobre Ariana había sido modificada había dado mucho de qué hablar en el diario El Profeta con Rita Skeeter como entrevistadora y reportera estelar. Habían rumores de que Ariana Grindelwald estaba planeando atacar a Hogwarts y convertir a todos los estén Acólitos de Grindelwald, por más tonto que sonara, otros creían que Ariana sería encerrada en las novedad malditas de Hogwarts con inquebrantables e insuperables desafíos por medio.

Los intrigantes conceptos o ideologías creaban en las personas muchas dudas y mucho en que pensar y responder o contar a otros.

Pero en esencia y en general, solo eran chismes creados por cada uno de ellos. Y los profesores así como administrativos de Hogwarts se habían pronunciado con un gran silencio, alegando que no se anunciaría nada sobre Ariana Grindelwald y su estadía en Hogwarts, inclusive se le prohibiría a cualquier periodista o escritor entrar en los recintos escolares con el interés en particular de Ariana Grindelwald.

Estrictamente, Hogwarts se mantendría como una escuela normal, sin noticias, sin reportaje, sin oportunidades de encontrar su primicia, tan solo quedaban los rumores.

Sin embargo, reanudando el momento y descongelando la imagen del diario y de Ariana viendo a un hombre en su compartimento con Faigel como compañero, resultaba extraño que no le hubiera atacado o algo parecido, Faigel se mostraba tranquilo y seremos y todo parecía tan quieto como la profesora Haywood flotando.

— ¿Quién es usted? —las manos de Ariana temblaban de ansiedad y miedo, pero aferraba sus manos lo más que podía a proteger el cuerpo de la profesora Haywood y aferrar el agarre a su varita.

El hombre sacudió el periódico y terminó por cerrarlo, cuando su tez morena y perfilada con lentes circulares pareció amigable, de levantó entonces doblando el periódico y guardando el mismo bajo su brazo, prontamente saco el sombrero imaginario de su cabeza y se inclinó levemente presentándose.

— mi nombres el Reimon Khanna y seré tu protegido en esta oportunidad —

— ¿mi protegido? —

— sabrás que Hogwarts es un colegio histórico últimamente, siempre hay una novedad tras sus paredes, pero es un colegio, donde hay estudiantes que ponen todo su empeño en encontrar sus estudios satisfactorios. La pregunta es, señorita Grindelwald, si usted estará a la altura de ello —

Reimon Khanna era un hombre de color de mucho humor, con su cabello rizado, generalmente siendo una persona alegre, llena de resiliencia y tranquilidad, como lo demuestra la frecuencia con la que sonríe, incluso cuando trabajaba incansablemente como parte del ministerio de magia, siendo un auror y durante sus vacaciones en la granja de su familia, pero en especial Khanna era leal y sincero.

— Voy a Hogwarts a realizar mi prueba de admisión… —expresó Ariana con preocupación— y usted está en mi cabina, con mis cosas —Ariana no irradiaba confianza con aquel que estaba frente a ella, anteriormente vio a un mago sacar su varita contra ella, no quería que volviera a suceder.