📜 Capítulo 65. Buscando la amistad

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— Albus, ¿Disfrutaste de las vacaciones? —

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— Albus, ¿Disfrutaste de las vacaciones? —

Draco Malfoy, un hombre de elegancia extraordinaria y mirada altiva pero humildad en su corazón, era el padre de Scorpius Malfoy, el mejor amigo de Albus Potter.

— señor Malfoy, es bueno verlo otra vez —estrechó la mano del mago con gusto— han sido increíbles vacaciones, además de un descanso de tantas tareas en Hogwarts, desearía que fuera así siempre —dijo Albus con holgazanería.

El  señor Draco Malfoy sabía bien cuánto afecto había entre ambos y la gran amistad que tenían, aunque en un pasado él y el padre de Albus tuvieron sus diferencias, Draco Malfoy procuraba que eso no arruinará la amistad de su hijo. Puesto que Potter era el único que había visto a Scorpius como alguien inofensivo y no con un pasado en su familia.

— seguiremos haciendo tareas por mucho tiempo, así que acostumbrate de una buena vez —regañó Scorpius con clara burla.

Albus ayudó a su amigo con las maletas mientras ambos se empujaban y Scorpius finalmente se despidió de su padre con un abrazo momentáneo.

— buen inicio de clases, Hyperion —recitó su padre antes de verlo partir con Albus.

Tal vez la soledad y su enorme hogar era lo que le deparaba al señor Malfoy, pero le reconfortaba saber que su hijo no estaría igual y que seguramente cuando volviera podrían pasar más tiempo juntos.

— busquemos a Ariana, Scorpius, seguramente estará por aquí —nuevamente la energía del joven Potter era insaciable, pero tanto él como Scorpius querían saber qué tan bien le había ido a Ariana.

Ambos emprendieron su rumbo en busca de la joven, aunque las maletas pesaban, terriblemente el profesor Longbottom venía inmerso en los papeles que la profesora Mcgonagall le habría dado para conocer lo poco que se sabía de Ariana, tan solo Scorpius fue capaz de detener en seco cuando lo vio, pero Potter corrió aún más y no se dio cuenta que el profesor Longbottom estaba frente a él hasta que chocó torpemente.

Potter se separó de inmediato apenado— disculpe profesor, Longbottom —ciertamente Longbottom habría impartido una reputación de respeto por sus años como profesor y también como veterano de la última guerra, pero eso no quitaba su buen corazón.

— ya saben que no pueden correr por los pasillos —miró a ambos— además, ¿por qué llevan tanta prisa? —

A lo que Albus sin problema y con la esperanza de que le dijera algo respondió— nuestra nueva amiga ha venido a Hogwarts y quisiéramos mostrarle el lugar antes de ir al gran comedor —

— ¿se puede saber qué amiga? que yo sepa los de primer año están por llegar, pero ese es mi deber, no el suyo —

Potter rió y negó de inmediato con la cabeza— no me refiero a un alumno de primer año —

— Ariana es nuestra amiga —reveló Scorpius al ver que daba tanto rodeo con aquello, de pronto la cara de sorpresa apareció en el señor Longbottom.

Extrañado, el señor Longbottom preguntó mientras abría la carpeta y sacaba la foto que recién había conseguido tomarle a Ariana y la enseñó a ambos— ¿esta Ariana? —ambos se acercaron a la foto e impresionados afirmaron.

— es ella, ¿está aquí? —el señor Longbottom volvió a meter la imagen a la carpeta e impresionado asintió.

— es una alumna especial, chicos, quizás no… —

Y antes siquiera de que el profesor Longbottom quisiera advertir a los chicos como todo un adulto responsable haría en el caso de jóvenes como ellos, el pequeño Potter se adelantó diciendo— sabemos quién es, la conocemos, profesor y elegimos no creer en las historias que nos han contado de ella —

Longbottom estupefacto por el control de Potter y convicción, de pronto se dio cuenta que tal vez estaba siendo tan paranoico como cualquier otro mago o bruja al hablar de Grindelwald— sí profesor —apoyo Scorpius a su amigo— agradecemos su preocupación por nosotros, pero no nos hará cambiar de opinión —

Mirar a Malfoy y Potter tan convencidos de su posición e intenciones, hizo crear en Longbottom un prospecto muy parecido a dos cabezas huecas y necios que había conocido hace mucho, Ron Weasley y Harry Potter, tal vez habrían heredado algo de esa amistad que sabía meterse en problemas o tal vez solo eran dos estudiantes en busca de un tercer miembro para la creación de un trío mágico perfecto de busca pleitos, como los fueron Hermione, Harry Ron en sus tiempos.

Longbottom termino suspirando y negando con su cabeza al parecer cayendo al hecho de que no los podría hacer cambiar de opinión— en ese caso, creo que me serán de ayuda —aunque en su mente creía que el año no sería suficiente para este grupo de amigos, solo esperaba que las cosas no se desacomodaran demasiado— si pretenden seguir con esa amistad, le encargaré que cuiden sus pasos y con quienes se mezclan, muchos en Hogwarts estarán alertas con la presencia de la señorita Grindelwald entre estas paredes, esperemos que el sombrero seleccionador encaje a Ariana en Slytherin, aunque eso aumentaría el desprecio que las personas sentirían por ella, pero procuren estar alertas, cuiden sus espaldas, traten de no tener tantos problemas —

— ¿quiere que nos encarguemos de apoyar a Ariana, profesor? —preguntó Albus esperanzado.

A lo que el profesor no demoró en considerar y asentir— pero si ella realmente resulta ser como todos dicen… —

— no se preocupe, profesor —aseguró Potter tocando el hombro del profesor, tan enorgullecido por tan especial tarea que Longbottom le había dado— no se arrepentirá, protegeremos a Ariana —y sonriente se despidió del profesor corriendo por los pasillos, ahora más seguro que nunca de su amistad— ¡vamos Scorpius! —

Scorpius a veces dudaba en seguirle los pasos, pero sabía que con él siempre era una aventura nueva y antes siquiera de poder seguir a Potter, Longbottom lo detuvo— joven Malfoy —Scorpius volvió su mirada al profesor atento— por favor, sean cautelosos, sé que Albus a veces puede ser muy cabeza dura —eso hizo sonreír a Malfoy porque lo sabía— tengan cuidado los dos, recuerden que ustedes más que cualquier estudiante tienen una reputación que proteger —esto mencionando a sus padres y sabiendo que la fama de ellos dos juntos los hacían ser cuestionados frente a todos, tanto como a Ariana.

Scorpius asintió ante el consejo del profesor y corrió por el pasillo también persiguiendo a Albus.

Scorpius asintió ante el consejo del profesor y corrió por el pasillo también persiguiendo a Albus

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Ariana Grindelwald Y El Legado MalditoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora