RESILIENCIA

Capítulo 10 Y Parte 3

❤️ Aquí habrá una mezcla de sucesos y tendrá uno que otro Pov, hasta ahora han visto todo como Kim lo ve, pero creó que es hora que vean las cosas con otro enfoqué más.

Saben acabó de enterarme que mi hermana lee esté libro con otro perfil jaja.

Así que confiesa, ¿Quién eres? 🤣🤣

❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️

Pov...Aií.

Wik estaba sentado a mi lado, no parecía incomodo a pesar de que su familia a veces se sentraba en hablar de el, Wik tenía bien sujeta mi mano y su otra mano jugarreteba con el anillo de matrimonio haciéndola girar.

El era tan lindo e inocente como cuando lo conocí, era sumamente difícil no caer en sus encantos, era un joven tan bueno y lindo que no podía evitar no amarlo.

Sujete un poco de su cabello largo y lo acaricie, me gustaba su peinado de cabello largo, era lo suyo le quedaba hermoso.

La primera vez que lo vi con el cabello largo llevábamos saliendo casi medio año ya que antes de eso se veía muy diferente.

-Mi amor. - susurre.

-Dime. - Susurro de regreso.

-vamos a dormir estoy cansado. - El asintió, nos despedimos y fuimos a la habitación.

-Voy a ducharme. - Asentí ante eso y me recosté en la cama mientras revisaba el celular, tenia una foto de los dos en mi fondo de pantalla, y varias de nosotros en mi Instagram, parecía que desde que me case con el me encantaba presumirlo.

Aún recordaba cuando lo conocí, luego nuestra boda, cada momento estaba grabado en mi memoria, cuando el Wik actual apenas y dejaba que lo besara como se debía, parecía ser una pieza de cerámica que si seguía manipulando rompería por completo.  

Años atrás....

Había llegado a dar clases como todo un ejemplo del mejor egresado de una de las carreras y cuando empecé a dar clases mis ojos vieron a aquel jovencito, un joven de cabello negro y ojos rasgados que a diferencia de todos los canadienses resaltaba entre el común de mi país natal.

Yo tenia raíces Thai, mamá Canadiense, padre Thai por lo cual tampoco era el común Canadiense rubio  de ojos azules, de hecho era bastante como el común de los Tailandeses sin nada en especial, tenia los ojos más grandes por mi madre y los lentes que hacían que se vieran aun más grandes.

-¿Señor Wik?.-Lo llame al culminar mi clase.

-Dígame.-Contesto cortante.

-Hizo el trabajo en grupo solo.-Señale la hoja. 

-No trabajo en grupo.-Contesto tajante y parecía querer correr de mi, más que hablar conmigo.

-Señor Wik, esas actitudes no lo van a llevar a ningún lado, por más inteligente que sea, necesito que trabaje en grupo, esto no es Asia, ¿Entiende?.-Sabia que por costumbre existían cosas que los Asiáticos hacíamos mejor solos por el hecho de tener más disciplina.

-No tiene nada que ver mi origen con el hecho que desee hacer solo mis cosas.-Estaba por empezar a caminar.

-¿Entonces?.

-Es solo por qué no me agrada las personas profesor.-Me acerque y el dio como cuatro pasos para atrás.-Y eso lo incluye.

-¿De donde es?. - Cuestione. - Un niño tan malcriado cómo tú no es exactamente asiático.

-No soy mal educado, discúlpeme si mi actitud no lo complace. - Bufo. - Soy de Tailandia. - Adjunto. - Ya me puedo ir.

-Adelante, ve, pero el siguiente trabajo lo haras en grupo o te reprobare. - La amenaza no pareció agradarle mucho pero no dijo nada más y se fue.

Verlo era mi razón de dar clases, pero nada cambió el seguía manteniéndose lejos de todos y siendo un borde.

Lo encontré dormido en el sillon del pasillo cerca de mi oficina de maestro un día por alguna extraña razón.

Me acerque y cuando coloque mi mano es su cabeza, apenas llegue a acariciarlo antes de que su reacción fuera levantarse de golpe y en un segundo ya  estaba de pie se veía espantado.

-¿Estas bien?. - Cuestione por su acción, cuando quice acercarme dio un paso atrás igual de asustado, el era raro, parecía una cría de algún animalito asustado.

-Estoy bien. - Me susurro.

Solo guarde silencio pero me moría de ganas por saber quien era el hombre que había cautivado mi corazón e ideas.