RESILIENCIA

Capítulo 38

Cuando nos quedamos solos ví a Aií.
-Quiero irme.-Le dije.-Aií.

-Tu lo mataste, lo único qué me prometiste que jamás harías, tu lo hiciste.- Me miraba con algo distinto, de esas miradas qué no le había visto dedicarme jamás, ¿Decepción?¿Quizá?, Su mirada no se veía como el lugar tranquilo y de paz que siempre me acogía, sus ojos estaban recorriendo mi cuerpo y librando una batalla.-Dijiste que no querías vengar la pérdida de tus piernas y al final te dejaste consumir por el odio y el rencor.

- Aií por favor, yo solo quiero irme.- Rogué.

- Sabes mi esposo no haría esto.- Me señaló.- Mi esposo tiene muchos defectos, es miedoso, grita cuando algo no le gusta, nunca lava un plato, no tiende la cama, se queja del clima, esconde papeles, miente cuando se siente presionado.- Empezó a levantar la vos mientras caminaba de un lado a otro sujetándose la cabeza.- Pero yo..yo lo amó, amó esos defectos por qué tiene Miles de virtudes.- Se dió la vuelta y me empujó haciendo que me acostará de nuevo en la camilla.- Pero mi esposo no es un puto asesino.-Grito.- Yo no me case con un asesino, yo no me case con Kim theerapanyakul el hijo criado en la mafia, yo me case con un buen chico.

¿Kim?,Me había llamado Kim, ese nombre jamás me había molestado hasta que salió de su boca, hasta que su boca señaló a mi nombre de pila como un puto asesino, jamás me había dolido tanto como hasta ahora.

- ¿Qué puedo decirte?.-Hable.-No puedo decir que lo siento, por qué no lo lamento, yo necesitaba ésto, lamento mucho decepcionarte y si esta parte de mi te desagrada, pero yo lo necesitaba.-Llore.- Si tu lograras olvidarlo y perdonarme.

-¿Perdonarte?.-Me miró mal.- Esto no es un error Kim, lo que hiciste está a millas de ser un error.- Se sentó y soltó aire que al parecer estaba reteniendo.- Tú mataste un ser humano, felicidades te convertiste en lo qué más odias, en un asesino.

-Ya pará, no le hables así.- ..........