-Mi amor despiertate por favor. - Escuché la voz de Aií, sabía que estaba llorando, tenía su mano en la mía, los parpados me pesaban, no podía despertarme, me dolía la cabeza.
Apreté su mano despacio. - Ya estoy despierto. - Susurre, mi garganta estaba ceca y me dolía.
-Wik. - Su mano me apreto fuertemente y abrí los ojos encontrandome con el parado viéndome.-¿Cómo estas cariño?. - Tenía muchas ojeras, los ojos hinchados.
-Me puedes dar agua. - Suspiré, no podía hablar, el me ayudo a tomar el agua.
-Llamare al Doctor. - Salió apresurado.
El cuerpo me dolia, tenía la sensación extraña de haber dormido mucho y aún así sentirme mal.
El Doctor vino acompañado de Aií. - Hola campeón. - Me dijo el médico. - ¿Cómo estás?.
-Me siento raro, me duele la cabeza. - No podía hablar bien sentía lastimado. - Me duele la garganta.
-Es normal estuviste entubado hace poco, probablemente es por que está lastimada tu garganta. - Asentí. - Te trataremos eso, el dolor de la cabeza disminuira cuando puedas levantarte y empezar a moverte un poco.
-Bien. - Aií me miraba atento. - Qué me paso luego de la explosión. - Pregunté despacio. - Tengo alguna herida importante.-El doctor miro a Aií.
-¿Qué paso?. - Le dije a el. - Dile que me diga, no importa que tan malo sea.
Aií se sento en un sillón del cuarto en el que estaba.
-Adelante doctor. - Le dijo.
-El volante del vehículo y tu posición para proteger a Aií hizo que el volante y algunos vidrios se incrustran en tu espalda en la región cervical y Lumbar, recibiste varios golpes en la cabeza, fueron los golpes más representativos sin embargo no sabemos si son irreversibles sus consecuencias por que has pasado mucho tiempo en cama y has tenido varios paros cardiacos por los daños y inhalación toxica de sustancias, fuiste el más afectado de la explosión. - Eso ya me lo había imaginado. - Varías partes de tu cuerpo se quemaron y tuvimos que ingertar piel, y se rompió tu brazo derecho. - Sabía que estaba herido.
-¿Cuanto tiempo?. - Mire a Aií. - Aií.-Lo llame y el me miró.
-¿Cuánto tiempo qué?. - Me volvió a preguntar.
-Tú estas bien. - Remarque. - Físicamente. - Aclare por que se veía lloroso y apenado. - ¿Cuánto tiempo llevó inconsciente?. - Lo mire el Doctor nos dejo solos.-Aií puedes decirme.-Paros cardiacos, cirugías, tenía un brazo roto. - Señale mo brazo derecho que no poseía ningun yeso o algo. - y lo único que siento es dolor de cabeza, asi que dime.
-Casi nueve meses. - Cerré los ojos, había pasado meses en una cama.
-Nueve meses. - Susurre. - Estuviste sufriendo por mi nueve meses.
-Como no sufrir por mi esposo. - Habló.
-Deberías dormir. - Le dije. - Yo no volvere a caer en coma, necesitas descansar, te ves terrible.
-Lo se. - Sonrió. - Pero no quiero dormir.
-Vamos Aií, ayúdame a levantarme entonces. - El asintió y se acercó a mi y me ayudo a srntarme con el control de la camilla y cuando quise moverme fue que note a que se refería el medico con el haber explicado sobre las consecuencias que los golpes causaron. - ¿No voy a poder volver a levantarme?. - Le pregunté y Aií me miraba y se le iban las lágrimas.-Aií, puedes no llorar, estoy bien. - Lo sujete y lo abrace. - Estoy bien, si ese es el caso no importa, se que estaras para mi y me podras ayudar, estoy bien. - Aií termino de llorar mientras me susurraba que me amaba.
-Te extrañe mucho. - Sonreí.
-Y yo a ti. - Bese sus labios. - No pasa nada.
-No sientes nada. - Su mano apretó mi pierna, sabía que la apretaba por que veía a su mano apretar mi pierna sin embargo yo no sentía eso.
-No. - Susurre. - No siento nada. - Quice mover mis piernas pero aun que me esforcé no lo conseguí.
-Te juro que lo voy a matar. - Susurro Aií.
-No quiero que mates a nadie Aií, solo quedate para mi, no busques venganza en ningún lugar, duerme un rato.
El se acosto en el sillón del cuarto y pronto se quedo dormido, Suspiré y varias lagrimas salieron de mis ojos, llame a una enfermera con el botón. - Digame. - Me dijo al entrar y se sorprendió al verme sentado.
-Podría retirarme ésto. - Señale el suero y ella nego. - Podría darme una silla de ruedas entonces.
-Claro, te traeré una enseguida. - Sonreí. - Me puedes dar un espejo.
Ella asintió y busco uno y me lo paso y salio del cuarto, me mire en el espejo, mi cabello estaba corto, tenía una cicatriz en la frente y luego me fije en mi hombro tenía un ingerto de piel bastante grande allí, me levanté la camiseta que traía viendome varios iguales, la vida había decidido destruirme el torax desde que soy adolescente, si antes tenía cicatrices ahora eran más grandes y horribles, mi brazo izquierdo tenía otro ingerto de piel.
Las cicatrices eran feas pero a la final con ropa no se notaría, me tope mi pierna, sabia que estaba ahí pero no la sentía, quite la manta y aplaste mi ingle sentía un poco ahí, llevé la mano a mi entrepierna y me di cuenta que al menos para encontrar un lado positivo a todo esto todavía sentia mi tacto en esas partes sin embargo no sentía nada en los lados en mis caderas no sentían absolutamente nada. - Pues peor es nada. - Susurre.
Cuando la silla llego la enfermera y otra me ayudaron a bajar a la silla y pude moverme por la habitación, supuse que sería algo a lo que tenía que acostumbrrme, quería llorar, me sentia mal por la gran perdida que esto significaba, pero si tenía que elegir entre vivir y morir, me gustaba estar vivo para amar a mi esposo.
Lucharía por volver a caminar, sabía que si sentía algo por mínimo que fuera sería posible volver a hacerlo, pero si no se podía tendría que continuar.
ESTÁS LEYENDO
RESILIENCIA
FanfictionHabía aprendido a darme por vencido, aprendí cual es mi lugar cuando sus ojos se iluminaron por alguien más, aprendí que si el amor podía doler yo tenía que ser Resiliente. Si sus brazos no me abrazarian, ni sus ojos me iban a mirar como a Él.... Qu...