Parte 6

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Lleve ropa que según mi percepción le quedaría de un local cercano, cuando llegué de nuevo a la oficina lo encontré sentado con la toalla de secar manos en su cabeza, viendo a la nada, se había quitado la ropa destruida y estaba solo en ropa interior, aproveche su distracción para mirarlo, era delgado, tenía cicatrices en ma espalda, eso me llamaba mucho la atención, ¿Que le había pasado?.

-Hola - Hable al fin sacándolo de sus ensoñaciones y dandole la bolsa con ropa.

-Gracias. - Saco la ropa y se la puso sin queja.

- ¿Qué te parece?, ¿Ya mejor? .-Asintió.

-Mucho mejor. - Por primera vez me gane una sonrisa sincera de su parte. -Te queda bien.

-Gracias. - Susurró volviendo a acostarse está vez sin las cobijas, las saque del cajon doblandolas y poniendolas aun lado, menos a la mojada.

-Si aun las quieres.

Negó. -No, hace calor.

Me rei por que yo le había dicho eso en un principio.

-Me contaras que paso.

-Pues se enteraron de que me gustan los chicos. - Hablo con miedo.

-¿Y eso que tiene de malo?. - Sonreí.

-Pues lo de siempre, homofobia. - Sonrió, me sente a su lado.

-A mi tambien me gustan los hombres. - Decidí contarle y me miro abriendo grande sus ojos.

-Yo ni siquiera adivinaria eso. - Se burlo pero aun así no se reía.

-¿Tienes novio?. - Indago.

-No y tú. - Me acoste a su lado sin toparlo.

-No, ya estoy muy cansado de las relaciones amorosas. -Me miro incomodo, lleve mi mano a su cabeza y lo acarie, recibí la negativa de su cuerpo de no acariciar.

-¿Te pasa algo?, Siempre te apartas.

-No, es solo que me incómoda.-Aclaro.

- Estas en todo tu derecho, no te topare. - Peometi.

-Gracias.-Había conseguido el récord de hacerlo sonreír varias veces en un día y eso era mucho viniendo de el. - Pero no me molesta si me avisas antes. - Sujeto mi mano y la puso en su cabeza, acaricie y desendi a su mejilla haciendo circulitos en ella, el cerro los ojos dejandose acariciar.

-¿Puedo acostarme a tu lado?. - El asintió antes de dejarme recostarme, estaba un poco lejos de el y pense en algo más. - Puedo abrazarte. - Nego.

-No me gusta que me abracen por la espalda. - Entendí y me mantuve lejos de el.

Tenía un camino largo por recorrer si quería tenerlo....

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