RESILIENCIA

Capítulo 42.

-Iughh...-Escuche y me separé de Vegas, para ver un niñito y una niñita viéndonos con asco.

-¿Iugh, Qué?.-Pregunto Vegas y se agachó a abrazarlos.-Besar a su padre es lo mejor del mundo.

-No les digas eso, Vegas.-Me reí.

-Vamos a cenar.-Al parecer la casa no era tan grande , pero tampoco era pequeña, la cena fue deliciosa.

-Estuvo riquísimo.- Vegas sonrió.

-Gracias, soy el mejor chef.- Asentí con mi cabeza.

-Pa, pa, iremos al acuario mañana, tu lo prometiste.- Me dijo el niño.

-Supongo que sí.- El niño se emocionó y empezó a saltar en la silla.

-Quieto vas a tirar mi comida.- Ordeno Autoritaria la pequeña niña qué probablemente tenía su edad y el freno.

-quejosa.-Le contestó.

-Ey, ey esas no son formas de tratar a una niña, discúlpate.-Le dije.

Ellos parecían ser la clase de hijos bien queridos, por lo sonrientes que estaban, siempre pensé que los padres eran malos y que yo sería pésimo, la falta de un padre amoroso me había dado esos miedos.

-Perdon Kiry.- Habló y se lanzó a mis brazos y yo lo abracé.

-Yo también quiero un abrazo.- pequeña niña se lanzó a  mis brazos también.

-Vegas.-Le dije ofreciéndole mi mano, el la tomó y se unió al abrazo.

-Son un sueño definitivamente.-Escuche una carcajada d Vegas.

-Esto es la vida real, ésto es aún mejor qué un sueño.-Sonrei , tenía razón era mejor qué un sueño, mucho mejor.

Me quedé lavando platos y Vegas fue a acostar a los niños, cuando termine y subí a la una habitación estaba Vegas en una sola con los dos.-Papá cuéntanos el cuento.

Vegas empezó un relató y a la final dijo dulces sueños cargando a la niña y entrando a ponerla en su cama.

-Vamos a dormir también.-Me abrazó.-Mañana tengo trabajo, qué pereza.-Hablo cuando su cuerpo topo la cama.

-Podemos no dormir.- Me senté a su lado.- Tengo miedo de dormirme y qué ésto desaparezca.

-Vamos Kim, mi amor,pequeño, ésto es nuestro, no sé por qué piensas eso.-Me besó.

-Duerme conmigo, házme el amor, bésame, acaríciame, no me sueltes muéstrame qué en verdad es real.-Vegas me abrazó.

-Claro qué si mi amor, estaré aquí para sostenerte siempre.-Acaricio con sus manos mis brazos.

Sus besos empezaron a desnudarme como si de una pieza frágil se tratara, ame mucho cada caricia, las palabras bonitas, pero fue inevitable que el sueño me invadiera al terminar.

-Espero que esté sueño no termine.-Suspire.

-No terminará jamás, mi amor,  hoy y siempre , en las buenas y en las malas.

😍
Espero les haya gustado....

Solo recuerden que mañana ya no es 14 jaja así qué descubran qué pasará...