capítulo 34 › Ciúineas

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Ciúineas: Palabra de origen irlandés para referirse a la tranquilidad.
Daniel

Junio

Siento que cada semana esto se pone peor, me siento abrumado, angustiado, nostálgico al enfrentarme a mi mismo y ver cosas que antes no lograba enfocar. Hablé del ataque de ansiedad que me llevó a cortarme por primera vez, de la culpabilidad que sentí, de lo bien que lo pasé y de como se volvió en mi método insano para evitar los ataques de ansiedad. El otro día estaba pensando en tí cuando la psicóloga me explicó porque solemos recorrer a esos métodos, la única forma que encontramos de liberar nuestro dolor emocional es sintiendo el físico y recordé las charlas que me dabas cuando no comprendía algo sobre el mundo de la medicina. Te gustaba tanto.

Comencé a ir regularmente al gimnasio, antes lo hacía pero solo cuando podía y eventualmente cuando todo se volvió un desastre dejé de hacerlo, Adam y Jin me acompañan y cuando Jack puede se nos une. He descubierto miedos que no supe que tenía como el miedo de poder dañar una persona, como el saber que odio contar mis problemas porque no quiero que me sientan lástima, no quiero que me vean con ojos de tristeza ni melancolía. Cada día extraño a Harie pero he podido irme acostumbrando a su pérdida y he sabido aceptar que fue su decisión y he de respetarla.

Me han recetado unas pastillas también que no estoy seguro de si deba tomar o no. Me explicaron que al principio no es bueno pero después comienzan a hacer efecto y no estoy tan seguro de querer tomarlas. Creo que estoy un poco asustado, todo el proceso sigue asustandome con cada paso que doy. Es como estar expectante porque no sabes en cada sesión que cosa nueva vas a descubrir hoy ni sobre que vas a platicar. Nunca estoy seguro de hasta que punto podré soportar para volver a romperme frente a la psicóloga.

Pude darle una respuesta a mi interrogante sobre tí y creo que ya no necesito que me lo aclares aunque fuese muchísimo mejor que me lo dijeras tú. Me dí cuenta de que fuiste valiente al hacerlo, me dejaste para que pudiera sanar, de no haberlo echo ni estuviese así ahora.

A pesar de todo admitiré que te extraño bastante y a veces marco tu número sabiendo que ya lo cambiaste. Tampoco he hecho el mínimo esfuerzo por conseguir tu nuevo número. Creo que estamos mejor así, no puedo retroceder en mi proceso ahora.

Todas las mañanas me levanto y hago mi rutina antes de ir a la universidad que nuevamente retomé las clases, he vuelto a reírme con mis alumnos y a dedicarme a lo que tanto me gusta.

—Las emociones forman parte del ser humano, sin ellas solo seriamos una masa de hueso y carne. No te empeñes en querer detenerlas porque como todo ser humano debemos sentir.

Todavía me cuesta un poco pero lo intento.

—No huyas de tí, de tus emociones, de tu estado de ánimo, abrazate y aceptate en cada versión tuya, sé tu luz y tu oscuridad en medio del caos. Es parte de tu naturaleza humana el sentir, así que no lo ocultes, no trates de negarlo, acéptalo como algo que te pertenece, como parte de tu identidad. Tus emociones no son tu enemigo.

En mi última sesión, a la hora de irnos, Jin me dijo que estaba orgulloso de cada paso que estoy dando y se sintió bien que alguien reconozca el esfuerzo y que te lo hagan saber.

En mi última sesión, a la hora de irnos, Jin me dijo que estaba orgulloso de cada paso que estoy dando y se sintió bien que alguien reconozca el esfuerzo y que te lo hagan saber

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