20 Cosas que Hacer Antes de Morir - Michaeng

14

Ella se había puesto un vestido negro y sus clásicas converse, intenté no verla demasiado pero era imposible, mi corazón saltaba y mi temperatura se había elevado, incluso más cuando su mirada estaba intensamente sobre mí, no lo entendía, yo solo tenía unas Vans, pantalones ajustados negros, una camiseta básica blanca y una chaqueta de cuero.

Ni mis padres ni mi hermano estaban esa noche y no volverían hasta el domingo, así que era perfecto para que no me regañaran. Tomamos el autobús y llegamos luego de caminar unas cuadras, ví la expresión de asombro en su rostro y eso que solo habíamos visto la parte exterior, pero desde ahí se escuchaban los gritos de emoción y la música extremadamente alta.

Entramos, me encontré con Somi y conversamos un rato mientras veía a Mina explorando, mirando y pasando entre la gente en el lugar. Somi se fué a bailar y Mina llegó con una expresión de decepción, se acercó a mi oido para no tener que gritar, en ese momento mi piel se erizó pero trate de concentrarme en lo que decía.

—Ni siquiera he intentado algo, pero no creo que pueda divertirme aquí

—Tal vez tenías otra idea pero la 1 solo dice "Ir a una fiesta como las de las películas" ya viniste a una, nunca especificaste que querías divertirte

—Cierto... ¿Podemos irnos?

—Por supuesto

Nos devolvimos a casa, nos cambiamos de ropa para estar cómodas y tuve una idea.

—Lo siento Chaeyoungie, tal vez querías quedarte

—Definitivamente nop, pero aún podemos divertirnos... Ven

Prendí las luces, la llevé al patio en donde teníamos una piscina, la dejé unos segundos ahí para llevar 6 botellas de cerveza y 2 vasos, eran de la reserva de alcohol que tenía mi padre para cualquier situación pero no se daría cuenta.

Y ahí nos sentamos en el borde de la piscina con los pies dentro del agua. Llené un vaso y se lo entregué.

—¿Crees que será muy asqueroso?

—Solo he bebido pequeños sorbos de cerveza y aunque no me agrade demasiado te aseguro que tal vez no sea tan desagradable como otras bebidas alcohólicas... De cualquier manera, si no quieres hacerlo no te obligues

—Entonces... ¿Está sería la primera vez que te emborraches?... — Asentí y miré su expresión de indecisión — Quiero saber qué se siente

Tomó el vaso y comenzó a beber, no dijo nada pero pude ver su expresión de desagrado, imité su acción y un tiempo después los vasos ya no fueron necesarios, el calor subió, las risas se hicieron presentes por cualquier motivo, las palabras comenzaron a trabarse y no recuerdo cómo pero nos sacamos la ropa quedando en ropa interior y nadamos en la piscina mientras seguíamos riendo.

Todo se movía y parecía gracioso, ella rió aún más cuando tropecé en la escalera, de alguna manera nos cambiamos y cuando amaneció mi cabeza daba vueltas y dolía de sobremanera. Luego de tomar pastillas para el dolor, dijimos que había sido divertido pero prometimos que no volveríamos a hacerlo.

Pov Mina:

Ya habíamos pasado por tanto y ya había pasado bastante tiempo también. No tenía idea de con quién podía hablar sobre mis sentimientos por Chaeyoung, porque con la única que hablaba era ella, no sabía lo que yo sentía pero todas mis reacciones y emociones ya me confundían y me abrumaban.

¿Esto se sentía tener un amigo?

Una mañana de sábado, ella tuvo que salir con su padre y su hermano, obviamente no me iba a entrometer, ya era demasiada la molestia. Tocaron la puerta de la habitación que empecé a compartir con Chaeyoung hace unos pocos meses y ahí estaba la señora Son con su sonrisa amigable, me invitó a tomar desayuno y muy apenada acepté.

—¿Señora Son?

—¿Sí cariño?

—¿Puedo... Puedo preguntarle algo?

—Por supuesto

—No he hablado de esto con Chaeyoung porque... Creo... Creo que ya la he acomplejado bastante

—Jajaja cómo crees eso Mina, mi hija te adora, no se sentiría acomplejada de ninguna manera... Pero cuéntame, me alegra que puedas confiar en mí... Y si te preocupa la conficialidad, no le diré a nadie, lo prometo

No estaba segura a pesar de que aquella mujer me transmitía mucha confianza. ¿Cómo hablar de mis sentimientos si estaría refiriéndome a su hija?

—Qué... Qué significa... El hecho de poder estar extremadamente nerviosa pero de un momento a otro estar en paz, sentir que mi corazón late tan fuerte que creo que saldrá de mi pecho, una extraña pero agradable sensación en el estómago que a veces es incluso violenta y súbita, sonreír sin razón, sonrojarse constantemente, pensar prácticamente todo el tiempo en una persona, querer estar con ella, preocuparse mucho y sobre todo querer su felicidad... Todas esas reacciones provocadas por esa misma persona

—Oh, cariño. ¿Te sientes así?

-—Sí, y es tan abrumador no saber qué significa... Nunca me sentí de esta manera y tengo... Tengo miedo porque cada día parece ser peor

—Bueno, en una palabra, eso es amor. Estás enamorada Mina

¿Qué? ¿Enamorada? ¿De Chaeyoung? No podía, ella era una chica como yo y la consideraba mi mejor amiga. Claro, yo no podía juzgar a las personas que gustaban de otras personas de su mismo sexo, pero era raro que yo estuviera sintiendo algo así, además, de ninguna manera podía decirle a Chaeyoung algo como eso. Sabía que ella era buena y muy cariñosa con todos sus amigos, pero estaba segura, ella no podría sentir algo así por mí, yo no valía la pena en lo absoluto.

—Se puede hacer algo para revertirlo?

—Escucha, puedes intentar alejarte, puedes intentar olvidarlo, buscar a alguien más, pero aunque te esfuerces no resultará. Cuando ya es amor no hay más opción que amar, incluso si no te corresponde y sea doloroso. El amor es mágico y hermoso, no veo el problema de que te sientas así y si es el primer amor, con mayor razón debes sentirlo, es el más significativo

La señora Son siguió diciéndome otras cosas, le agradecí y le ayudé a lavar la loza. Cuando llegó Chaeyoung, yo estaba más nerviosa de lo normal, no me sentía bien, no podía verla a los ojos otra vez. La sola idea de saber que yo no podría ser correspondida, me volvía a deprimir.

¿Debía darle un beso?

Ugh, pero qué estaba pensando.

—Minari, ¿estás bien? Te he notado algo extraña desde que llegué

—Creo... Creo que quiero buscar un trabajo

Era cierto, pero precisamente no era el pensamiento que invadia mi mente en ese momento.

—¿Eh?

—Ya ha sido demasiado tiempo, tengo que irme

—¿Algo te hace sentir incómoda?

—N-no... Bueno sí... El hecho de no ser un aporte y sentir que solo soy una molestia. Sé que todos ustedes son tan amables y buenos pero no puedo evitar pensar que abuso de su buena voluntad

—Minari...

Me dió un gran discurso pero no pude concentrarme, ¿por qué pensé en besarla? Mis ojos recorrieron su rostro y se posaron en sus carnosos y rosados labios, el lunar bajo de ellos solo los hacían parecer más deseables. ¿Por qué definir mis sentimientos se sentía aún más extraño? Era como si hubiera despertado en mí. Me sentía como una idiota.

¿Pero qué se sentiría esa experiencia?