EL ROSTRO DE LA AMBICIÓN

CAPÍTULO 5

- ¿Qué sucede, Katty? Son las 7 de la mañana. - bostece.

- Vamos a desayunar, he tocado a la puerta de Mauricio, pero no me responde.

- Katty, tengo sueño, mas tarde desayunaremos.

- Vamos, Isa, por favor, hoy tenemos mucho que recorrer y que mejor que empezar el día ahora.

- Esta bien, dame 20 minutos. - sin esperar respuesta cerré la puerta dejándola ahí parada, lo que más odiaba era levantarme y ver su rostro con esas horrendas gafas.

Camine hasta el baño aun dormida y me metí en el ducha, el agua fría corrió por mi cuerpo haciéndome despertar completamente, salí del baño y fui hasta el tocador, seque mi cabello y lo ondee, busque unos shorts en combinación con una blusa ajustada, chaqueta jean y sandalias bajas, a los 20 minutos salí ya estaba con Katty.

- ¿Hice algún escándalo ayer?

- Un poco, no te pases la próxima vez, no sabes lo molesto que es soportar a una borracha ¿qué dirían tus papás si lo supieran? – sonrío con superioridad.

- Isa. – su rostro se desencajó.

- Descuida, es el segundo secreto que te guardo, no diré nada. – le guiñe el ojo.

- Gracias, ¿qué quieres desayunar? - pregunto mientras nos sentábamos.

- El desayuno de la casa está bien.

- Muy bien. - Katty hizo señas al camarero y este se acerco, dio los pedidos respectivos y cuando se alejó me sonrió, le correspondí de manera sutil.

- Todos los chicos de aquí te miran.

- Si, ya lo note. - revise mi iPhone sin prestarle atención.

- ¿Te lo compraste?

- Si, ayer mientras tú estabas con Mauricio.

- Dame tu numero - saco su Samsung Galaxy del bolso.

- Te timbro, vale.

- Ahora podremos estar en contacto frecuentemente.

- Si, claro.

- Buenos días, señoritas. - saludo Mauricio, vestía unos vaqueros negros y una camisa del mismo color, llevaba sus gafas lo que le daba un aspecto más galante.

- Mauricio - suspiro Katty - siéntate a mi lado.

- Por supuesto, ¿cómo amaneciste, Isa?

- Muy bien, gracias ¿y tú?

- Muy bien ¿listas para ir a recorrer Bogotá?

- Por supuesto, apenas he podido dormir.

El camarero se acerco dejando los desayunos, Mauricio se decidió por un jugo de naranja y empezamos una plática animada, Katty lo miraba con adoración y este ni cuenta se daba, terminamos de comer después de 45 minutos y nos dirigimos a recepción para salir del hotel.

- ¿Dónde iremos? - pregunto Katty aferrándose de mi brazo.

- He escuchado que los parques son una verdadera maravilla, ¿vamos a uno? - mire a Mauricio.

- Propongo uno de la zona norte, allí está ubicado el parque El Lago, conocido también como el parque de Los Novios, está a 22 minutos.

- Me parece perfecto.

- Iré a ver el coche.

Después de 5 minutos ya estábamos en la carretera, esta vez preferí ir en el asiento trasero para confundir mas a Mauricio que no perdía oportunidad para mirarme por el retrovisor, llegamos al parque de los novios y era increíble, 23 hectáreas de verdes campos, donde se veían senderos peatonales, entramos y empezamos el recorrido, habían animales de todo tipo como patos domésticos, pavos reales y gansos, no era raro ver un lago en el sitio, pues llevaba su nombre, este era grande y servía para los paseos de botes, una fuente era uno de los principales atractivos, Katty aprovecho para sacar fotos de nosotros, estuvimos alrededor de 3 horas explorando todos los atractivos.