2. Tengo ambre

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Tengo ambre en demasía
cual gordo ansía la grasa,
ambre exagerada, amigo,
que hasta la “h" me he comido.

Me comería el mundo si no tuviera tanta mierda,
por tanto, comeré versos dietéticos para no engordar la vena.

Me comería los cultivos si no fueran transgénicos,
y no tengo transfobia,
mis fobias están en estado anémico.

¡Tengo ambre!,
dame un taco
que en su interior contenga alcohol,
drogas y tabaco.

¡Tengo ambre!,
dame consuelo,
y yo te daré anhelos
con ojeras por desvelos.

Tengo ambre en demasía
cual niño de África,
ambre exagerada, amigo,
que hasta la “h" me he comido.

Tanta que a mí mismo me como
aunque no tenga sabor,
si me como me vomito
pues mi sazón es de lo peor.

Quiero algo que me llene
pero todo es tan ligero,
y yo ocupo chatarra
para poder sentirme lleno.

¡Tengo ambre!,
dame un taco
que en su interior contenga alcohol,
drogas y tabaco.

¡Tengo ambre!,
dame consuelo,
y yo te daré anhelos
con ojeras por desvelos.

No he comido nada sano
y en mi alma crece la anemia,
todo el mundo se comió a sí mismo
cuando empezó la pandemia.

¡Tengo ambre!,
pero nada me apetece,
y el hueco no está en mi estómago
sino en mi alma que se desvanece.

¡Tango ambre ambiciosa!,
pero mi cartera está vacía,
cual gordo ansía la grasa
tengo ambre en demasía.

Ambre exagerada, amigo,
que hasta la “h” me he comido.

Antipoesía dietética Donde viven las historias. Descúbrelo ahora