✇ 𝙲𝚊𝚙í𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟷.

8.3K 512 60
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


15 de septiembre a las 7:00 de la tarde. Nos encontrábamos todos reunidos en la sala de mí casa. ¿La razón? Mí cumpleaños.

La verdad era que tenía muy pocas ganas de celebrarlo, como siempre. Esta fecha no traía ningún recuerdo bueno para mí. ¿Y cómo tenerlo? Siempre estaba solo durante mis cumpleaños. Primero sin mí madre. Luego, sin mi padre. También le perdí a él. Y luego a Rin, a mí sensei y a Kushina. 

Pero este año parecía ser diferente. Todos insistieron y se esmeraron bastante en hacer esta especie de "fiesta". Y aunque yo no tuviera ánimos de estar aquí,  no iba a ser el encargado de arruinarles el trabajo, y lo que con tanto esfuerzo habían hecho para mí. No les iba a despreciar de esa forma. No iba conmigo. 

Mientras todos platicaban entre ellos, aparentemente de forma alegre, yo me dedicaba a permanecer en absoluto silencio desde mi rincón de la sala en donde estaba sentado. Con mí mirada perdida en algún punto del piso, me encontraba totalmente sumido en mis pensamientos.

Había pasado poco más de un año desde la cuarta guerra ninja, pero yo podía sentirlo en mí alma como si hubiese sido ayer.

Aún podía recordar a detalle el momento en el que mí gran amigo, aquel que creí muerto durante mucho tiempo, finalmente moría de verdad frente a mis ojos, todo por haberme salvado... otra vez.

Era algo que no podía perdonarme. Él decía odiarme, pero siempre había estado ahí para sacrificarse en mí lugar. La primera vez no pude hacer nada para ayudarle, y la segunda... Tampoco.

La historia volvía a repetirse. Solo me había quedado allí parado, viendo como su cuerpo se destruía, sin poder hacer algo para evitarlo... Otra vez...

Lo había encontrado después de tanto tiempo. Después de haberme sentido miserable por haberle fallado. Por no haber podido salvarle cómo hubiera querido. Después de haber sufrido durante años pensando que estaba muerto, al fin le tenia conmigo, ¿y para qué? Sí de nuevo volví a perderlo, esta vez de verdad. Esta vez para siempre.

Pero supongo que él debe estar feliz, ¿no? Es decir, murió, pero está con Rin ahora, era lo que él quería después de todo; estar con ella.

Supongo que su tan añorado deseo se había hecho realidad de un modo u otro, y debía de ser mejor para él, ¿no? No era un sueño o una ilusión, era algo real. Sería la verdadera Rin la que estaría con él, la que le haría compañía. 

Me habría encantado ser yo esa persona que estuviera a su lado. Por quién se emocionará al ver, pero no todos tenemos tanta suerte. Y no era a mí a quién él quería. Eso siempre lo supe.

Suspiré mirando el techo. No debería sentirme triste. Si después de todo él está feliz yo no tendría porqué sentirme mal, ¿no? Pero era algo que no podía evitar. O tal vez está solo siendo egoísta. 

— ¡RIVAL!

Una voz me saco de mis pensamiento. Gire mí cabeza hacia la derecha y vi a Gai acercarse hacia mí con su típica sonrisa de siempre. ¿Qué a este hombre nada lo deprime?

— ¿Vas a quedarte aquí en un rincón todo el tiempo?

— Neh.. ¿Por qué no? De todas formas, no tengo nada mejor que hacer.

— Puedes acercarte a hablar con los demás — sugirió — Después de todo es tu cumpleaños, vinieron aquí por ti.

— Lo sé, lo sé. No quiero ser grosero, Guy. Es solo... No Que no tengo muchos ánimos para hablar con los demás...

Guy se quedó callado unos segundos, observándome fijamente antes de hablar.

— ¿Qué pasa Kakashi? ¿Te sientes mal?

— ¿Mal? ¿A qué te refieres?

— No lo sé — contesto dudoso — Pareces... Desanimado.

— Nah, estoy igual que siempre, Guy. Solo... Estoy un poco cansado es todo — mentí viendo hacia un lado.

— Kakashi... A mí no puedes engañarme — habló mirándome fijamente  — ¿Qué tienes? ¿Estás así por Obito, no es verdad?

Abrí mis ojos sorprendido, y parpadeé deprisa, observándole.

— ¿Cómo es que tú...?

— Pfff, por favor, Kakashi. Te conozco muy bien — respondió en tono obvio — Vi tu mirada durante la guerra cuando se rompió su máscara y su cara quedó al descubierto. Vi como le veías. En tus ojos había sorpresa, tristeza, un poco de enojo, y algo más...

— ¿Algo cómo qué? — preguntó bajando mi tono de voz.

Maito sonrió ampliamente.

— Tú sabes muy bien esa respuesta. Así como sabes que es por Obito que estás así.

— Mmh... No... Es porque estoy cansado — insistí con mí mentira — Es por eso...

— Mmh... Bueno, si tú lo dices — respondió  no muy seguro, viéndole con sospecha entrecerrando sus ojos. 

Aún así no me hizo más preguntas al respecto. Tal vez porque sabía que no lograría nada. O tal vez porque no quería yo continuara pensando en él.

Guy y yo seguimos hablando durante un par de horas, no quiso irse y decidió quedarse en el rincón junto conmigo haciéndome compañía.

Y se lo agradezco, me ayudo a distraerme un poco.


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝙱𝚒𝚛𝚝𝚑𝚍𝚊𝚢 𝚆𝚒𝚜𝚑. •𝙾𝚋𝚒𝙺𝚊𝚔𝚊•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora