ENAMORADA DEL VECINO

CAPÍTULO QUINCE

Todavía no sabía nada de Luke, estaba enfadado y no le quería decir nada todavía. Eran los últimos días de escuela antes de empezar el verano y tenía que asegurarme de que estuviéramos bien antes de que empezara. Porque si no, iba a ser un largo verano, para los dos. Solo estaba esperando al momento oportuno para hablarle, no iba a hablarle así porque sí. Él necesitaba su tiempo y yo le tenía que dejar eso.

Ni me miró en todo el día. Estábamos en la misma clase toda la mañana, pero no me miró ni una vez. Incluso tuvimos que hacer actividades en pareja y no quería ir conmigo, siempre íbamos juntos. Él prefirió ir con el chico al que nunca hablo que ir con su mejor amiga, y eso me dolió. Ni una sola vez me habló. Siempre estaba lo más lejos que podía de mí. Incluso al mediodía.

Al comedor, vi a Blake y por una vez él también me vio a mí. Eso nunca había pasado antes. Le sonreí, era solo una forma de saludar. Era una cosa normal. Más que nada quería ser amable, él me había ayudado porque él quería, nadie le había obligado, entonces le sonreí, solo para ser maja. Giró la cabeza tal cual le sonreí. También había mirado a través de mí como había hecho Luke esa mañana. Eso me dolió y mucho. Es como cuando saludas a alguien y no te responde, te sientes superignorado. Básicamente, él también me había ignorado.

No estaba bien. Iba a actuar como que estaba bien. Estaba en la cafetería, sola y Blake había pasado de mí. Los había perdido a los dos. Los dos estaban actuando como si no estuviera, como si fuera un fantasma.

De repente, mientras comíamos en el comedor, un grupo de personas empezó a hablar muy fuerte. De toda la gente de la cafetería obviamente tenían que ser los amigos de Blake. Todo el comedor estaba mirando y escuchándolos.

"Mia, Blake todavía te quiere." Uno le dijo a Mia, bastante fuerte para que todos escucháramos.

"Blake todavía quiere a Mia." Uno gritó.

Todos empezaron a aplaudir y animar. Todos sabían quiénes eran Blake y Mia, y obviamente estaban contentos de escuchar eso. Era como High School Musical o algo así, cuando tienes a unas personas montando un espectáculo y toda la escuela mirando y animando, era como en las películas.

Mia empezó a jugar con su pelo y sonreír a todos porque sabía perfectamente que todos la estaban mirando. Le encantaba ser el centro de atención, siempre lo había sido y siempre lo será. Obviamente, lo había echado de menos desde que lo había dejado con Blake. Ella seguía queriendo a Blake y eso era obvio, toda la escuela lo sabía.

En un momento ella comenzó a llorar, como si Blake fuera a proponerle matrimonio o algo así. Estaba superfeliz y emocionada y todos estaban mirando cómo pasaba todo. Ella comenzó a hacer una escena sin razón.

Se formó un círculo alrededor de ellos.

"Mia, todavía te quiero." Le dijo Blake mientras le cogía las manos.

Se besaron, delante de toda la escuela. Todos sus amigos estaban animando, y obviamente todo el comedor.

Después de lo que había pasado con Luke esa era la última cosa que quería que pasara. Me fui. No podía quedarme allí mirando y escuchándolos animarlos. Todos estaban felices por ellos, pero yo no.

Blake me vio marchar y vino hacia mí. Estaba fuera de la escuela, marchándome.

"Te lo explicaré esta tarde, porfa ven a mi casa sobre las 7."

No sabía por qué había venido hacia mí, o porque me quería hablar. Era su vida y él podía hacer lo que quiera, no tenía nada que ver si yo le quería o no, él obviamente no lo sabía. Pero igualmente, quería saber lo que me tenía que decir.

Me fui. Pero esta vez corriendo y llorando. Solo quería irme a casa. No tenía clase aquella tarde y eso ayudó.

Estaba llorando en mi casa, no podía más. Ya tenía suficiente con que Luke estuviera enfadado conmigo, no me hacía falta que Blake hiciera eso. Además, por ninguna razón. Entiendo que no estábamos juntos y que él perfectamente podía hacerlo, pero me afectó. Creía que por fin tenía una oportunidad y la perdí. Había pensado que podíamos estar juntos, pero solo era una imaginación.

Tenía que ir a hablar con Luke, no podía quedarme así. Ya no podía esperar a que él diera el primer paso. Estaba harta de estar así con él y sentirme tan sola, porque realmente lo estaba.

Fui a su casa y fui directo a la habitación de Luke, tuve suerte de que Blake no estaba en casa. Entré en su habitación y empecé a hablar.

"Luke, lo siento, tenías razón." Empecé a llorar. "No te quiero perder, no sé qué haría sin ti. Lo siento por lo que dije de verdad, que no quise decir nada de lo que dije."

"Está bien, yo también lo siento. Lo he estado pensando y no había razón por la que decirte esas cosas."

Estuvimos hablando un rato, y ya estábamos bien. Era como si no hubiera pasado nada. Incluso me había hecho reír un buen rato. Estaba tan aliviada de que ya estábamos bien. No habría podido seguir mucho más como estábamos.

Porfía volvía a estar feliz, de verdad había arreglado las cosas con Luke. No podía vivir con él enfadado. Miré la hora y me fijé que casi eran las 7. Tenía que ir porque Blake iba a llegar y no quería que Luke se enterase.

Aunque no quería ver ni hablar con Blake había una razón por la cual me había dicho de verle. Solo esperaba que tuviera una razón por la que olvidar lo que había visto.

Me senté delante de la puerta de mi casa, para no ser demasiado obvio. Empecé a pensar en las mil razones de por qué había podido pasar lo que había pasado. La única conclusión que llegaba todo el rato era que todavía se querían y se echaban de menos. Solo pensándolo me hizo llorar.

Estaba triste, sentada en el escalón, esperando a que viniese, aunque no sabía ni porque.