ENAMORADA DEL VECINO

CAPÍTULO DIECISIETE

No me podía creer que Blake me había dicho lo que había dicho, directo en mi cara. Probablemente, lo había dicho y ni estaba pensando en ello, mientras que yo no podía sacar sus palabras de mi cabeza. Era peor que torturarme. La persona a quien yo quería me había dicho en la cara, que no me quería y que nunca lo iba a hacer.

El verano acababa de empezar. Lo bueno de eso era que yo y Luke estábamos bien e íbamos a pasar todo el verano juntos. Lo malo era que si iba a ver a Luke obviamente algún día iba a tener que ver a Blake.

Todavía lo amaba, pero lo odiaba. Él nunca quería estar conmigo. Sabía que lo quería y ahora parecía una tonta completamente. Probablemente, nunca iba a hablar conmigo o ser amable conmigo nunca más, para que no me ilusione ni me haga la idea de que podríamos terminar juntos. Tenía que actuar como antes para que no me emocionara ni nada, solo porque estaba siendo amable conmigo. Pero hay una diferencia entre ser amable, ser normal y ser malo. No quería que fuera malo, en absoluto. Solo quería que fuera como era, tal vez un poco más amable a la hora de hablar.

En realidad todavía tenía una oportunidad. No había vuelto con Mia. Él mismo me había dicho que era una coña que sus amigos le habían hecho hacer. O sea, para ser realistas, estaba soltero. Solo esperaba que no iba a echar de menos a Mia ni tenía todavía sentimientos hacia ella. Ni que iban a volver. Como era verano no iban a verse, yo solo esperaba que eso iba a ayudar la situación. Tenían todo el verano para olvidarse y encontrar un nuevo amor, aunque el de Blake vivía a su lado.

Aunque no odiaba en ese momento, todavía tenía una oportunidad. El verano era largo y seguramente iba a cambiar de pensamiento en un momento u otro. No había manera de estar enfadada con él durante mucho tiempo. No podía estar enfadada con la persona que amaba, y menos si iba a verlo todo el verano.

Vi a Luke esa mañana, y como cada verano, me invitó a ir de vacaciones con su familia. Todos los años él y su familia iban a un hotel durante una semana y siempre me invitaban. A sus padres no les molestaba para nada porque les caía bien y así se aseguraban de que Luke no se aburría. Sus padres siempre hacían actividades que él encuentra aburridas y se aburre. Mientras tanto, Blake no sale de su habitación, al menos que sea de noche para salir de fiesta o comer. Cuando yo voy, que ya llevo casi siete años yendo con ellos, siempre nos lo pasamos bien. Nunca estamos con sus padres y siempre encontramos una manera para divertirnos los dos.

El verano eran nuestras vacaciones preferidas. Más que nada porque nos podemos ver todos los días y siempre íbamos de vacaciones juntos. Era como una semana sin padres, pasándonos los bien, y haciendo lo que queramos. Todos los años tendríamos un plan para escaparnos del hotel a medianoche, o ir a la piscina a las dos de la mañana y hacer otras cosas que nos encantaban. El riesgo siempre lo hacía todo más divertido, además nunca nos pillaban. Sus padres siempre estaban convencidos y siguen estando convencidos de que somos unos ángeles, nunca sospecharían tal cosa.

Mientras hablaba con Luke decidí contarle lo que había pasado con Blake, a mediodía y la tarde. Sabía que estaba cansado de oírme hablar de su hermano. También sabía que probablemente no quería escuchar nada de él después de la discusión que habíamos tenido. Aunque me había perdonado, sabía que no quería escucharlo. No podía quejarme después de que ya me dijera de dejarlo estar. Pero igualmente lo hice.

Le dije lo que había pasado en el comedor y lo que había pasado en mi casa. Lo que había dicho y hecho.

Definitivamente, estaba cansado de escucharme hablar de su hermano. Ya estaba harto. Sin embargo, las cosas no resultaron como las esperaba. No fueron tan malos como la última vez, pero no fueron muy buenos.

Le conté todo eso porque solo estábamos hablando. Nunca puedo quedarme callada y se lo expliqué solo para hablar de algo. Porque es mi mejor amigo y me encanta contarle cosas. Solo quería decirlo como algo que me había pasado, no para hacer una gran escena al respecto o darme una lección, de nuevo.

"¿Pero porque lo sigues intentando? Sé que lo quieres y es majo contigo, por una vez. Pero tú ya sabes como es. ¿No ves que lo único que te está haciendo es daño? Cada vez que me dices lo que te ha dicho o hecho terminas llorando. Nunca acabas contenta, nunca. Bueno, estás feliz, pero no te dura, nunca terminas contenta y lo sabes."

Tenía razón. Lo único que me estaba haciendo era daño, pero yo no podía parar. La gente cambia y yo estaba esperando a que Blake hiciera lo mismo. Se disculparía en algún momento por una razón u otra. Íbamos a tener que vernos y tendríamos que hablar.

Además, yo ya sabía que algún momento volvería, todos los chicos siempre vuelven.

"Ya te había dicho que lo dejases en paz y cada vez las cosas van a peor. Ya te lo dije y no me escuchas, no te lo quiero volver a decir. Va a haber un momento en el que de verdad te va a hacer daño y puede que yo no esté allí para ayudarte."

Todo el rato decía lo mismo una y otra vez. Lo había escuchado ya tantas veces que no se me quedaba en la cabeza.

"Ahora haz lo que quieras, pero te puedo asegurar que las cosas no van a terminar bien."

Yo ya sabía que no iba a terminar bien, pero ya no estaban bien. Eso no iba a parar.