–¿Y tú? ¿Tan madrugador? –preguntó Christian en tono burlón.–¿Te importa acaso?
–¿No puedes contestar más amigable? –dijo alzando una ceja.
–¡No! –lo miré a los ojos y recordé mi sueño... Digo pesadilla.
Inmediatamente me sonrojé y desvíe la mirada.
Las puertas del ascensor se cerraron y empezamos a bajar en un incómodo silencio. Podía verlo a través del reflejo del espejo que tenía el ascensor, me estaba mirando. Maldita sea. ¿Es que esto no puede bajar más rápido?
Bajamos tres pisos hasta que la puerta se abrió y apareció Nikki.
–¿Javier? ¿Qué haces aqui? –Preguntó sorprendida –iba justamente a buscarte.
¿Tan raro es que me levante temprano? ¿Por qué todos se asombran?
–Simplemente desperté antes, también iba a ir a buscarte –dije tiernamente a lo que Christian me miró sorprendido.
–¿A ella si puedes contestarle como una persona normal y a mí no? –dijo algo molesto.
–Ella es especial –contesté.
–¿Especial? ¿Por qué ella es especial? –preguntó alzando una ceja.
–Solo es especial y punto.
–¿Y yo no soy especial? –dijo con tristeza.
–De-dejate de preguntar tonterias –dije algo sonrojado y desviando nuevamente la mirada.
Me fijé en Nikki y estaba embobada mirándonos.
–Ehh... ¿Nikki? ¿Estás bien?– pregunté algo preocupado, ella se despegó y se sonrojó.
–Ss-sí estoy perfectamente –no dejaba de sonreír.
–Ams... bueno.
Nikki entró y continuamos bajando los tres en completo silencio, de vez en cuando miraba a Christian pero él ya no me observaba.
El ascensor llegó hasta el primer piso y todos salimos de él, caminamos hasta la salida del edificio pero Christian iba en dirección contraria a la de nosotros.
Se despidió de mí alborotandome el cabello.
Caminamos unos minutos hasta que Nikki comenzó a hablar, rompiendo el silencio.
–¿Por qué le dijiste a Christian que yo era especial? –preguntó curiosa.
–Solo quería ver que decía.
–¿No sería porque querías ponerlo celoso?
–¿Qué? ¿P-por qué dices eso? Es absurdo.
–Claro que no.
–¿Por qué crees que no lo es? ¿Qué razón tendría para querer ponerlo celoso?
–Bu-bueno no lo sé– dijo sonrojándose otra vez, ¿Por qué se ruborizaba tanto?
–¿Es idea mía o te sonrojas cada vez que hablamos o estamos con Christian?
–Po-por supuesto que no, son ideas tuyas –se sonrojó aún más.
Tal vez le gustaba Christian, ese pensamiento me provocaba una leve molestia sin fundamento. No debería sentir nada, eel es solo mi vecino; un tipo que aveces me ayuda con mis problemas. Pero no puedo imaginarmelo con Nikki, es algo inaceptable.
–¡¡JAVIER!! –oí que gritaron.
–¿Eh?– dije distraído.
–Hey, ¿Qué te pasó? Te quedaste como perdido ¿En qué pensabas?
ESTÁS LEYENDO
Save Me (yaoi/Gay)
RomanceLa vida de Javier Collin era bastante tormentosa con sus problemas en casa y en el colegio, sus malas calificaciónes estaban jugandole una mala pasada, aumentado los conflictos con su padre. Pero todo cambiará cuando una noche, apunto de acabar con...