OTRA VEZ

Capítulo XIV. No me importa

•Tin•

Y todo se arregló pero..
¿Por qué había esa tensión?

Podíamos tocarla si es que nos lo proponíamos pero ninguno decía nada, me quito los zapatos, después de sacar lo que teníamos que decir en el auto, entramos a casa pero ahora la habitación nos quedaba muy pequeña.

Can está poniendose la pijama, acaba de salir del baño y creo que lo mejor será que también haga lo mismo. A lo mejor una ducha era la solución para no querer salir corriendo. Me siento tan frustrado, y es que no le dije todo lo que pienso, aún siento que debería ser honesto porque no quiero volver a tener más peleas con él.

El agua está algo fría, aunque la prefiero mil veces a tener que salir de aquí con un nudo en la garganta. Porque no era mentira lo que le dije hace un rato, así me siento, pequeño, sabiendo que tengo que ponerme a su por igual y me frustra no poder conseguirlo.

Pero tampoco voy a dejar que por mis problemas las cosas con Can se vayan a la mierda, me e esforzado mucho por lograrlo, y no quiero tirarlo a la borda.

-- Tin... -- la puerta es tocada -- ¿Estás bien?

-- Si... -- froté mis ojos por el agua -- ¿Necesitas algo?

-- No es que... Llevas media hora ahí dentro..

Abrí los ojos y me miré mis manos ya algo arrugadas, ni siquiera me di cuenta del tiempo así que cierro la regadera para salir de una vez.

-- Ya voy.

Le dije mientras buscaba una toalla y comencé a secarme con ella, frotando mi cabello, salí de ahí envuelto en una y me recibió el frío aire del clima, Can estaba en la cama, al verme dejó su teléfono y me miró con atención.

-- ¿Estás bien?

-- Hum..

-- ¿Seguro?

-- Si..

Dije al dar media vuelta y saqué del cajón mi ropa interior, dejando la toalla sobre el pequeño sillón, me la coloqué entre brincos discretos y no pude evitar ver a los ojos al chico que tenía la vista en otro lado.

-- Can.. -- le dije ya sincero. -- ¿De verdad no te importa lo que soy?

-- ¿Qué eres? -- carraspeo un poco antes de verme.

-- El segundo tras de Tull...

Él sonrió, estiró sus brazos y la pijama podía quedarse en los cajones, porque fui hacia Can como un pequeño niño que se sentía solo y me dejé abrazar por un largo rato.

-- Tu vas a ser mejor que Tull. Ya lo eres desde siempre.. -- acarcia mi cabello

-- ¿No te importa que...

-- No. -- me calla -- no me importa, no me importa si eres una oruga, o un caballo, o te sale otra pierna, yo te amo a ti, no lo que tienes Tin... No soy ningún interesado o algo así.. de ser así me hubiera ido por Tull..

-- Oye.. -- hice una mueca

-- Es broma... -- se ríe -- yo te quiero a ti. No me importa otra cosa.. ¿Si?, Yo estaré aquí aunque no tengamos nada..

Bajé la vista -- a mi papá ni siquiera me dio la oportunidad de estar al lado de Tull..

-- Pero el te ha dicho que puedes ir.. tu eres el orgulloso que no quiere.

-- ¿Para qué? ¿Para que algo salga mal y papá me eche la culpa? No gracias. Bastante tengo con que diga que soy un niño y no sé nada. ¿Acaso no sabe cuántos años tengo?