—Bueno, te calmas—exclamé, cerrando la puerta detrás de mí para que Bruno no escuchara nada—.Ahora dime ¿Según tú, a quien estaba besando?
—Kenneth, pasé todo el día buscándote; vine aquí cuatro veces y nada. Escuche unos gemidos y me enfurecí— decía mientras su cuerpo comenzaba a temblar—. Me quede esperando, hasta que te vi en la esquina con esa vieja fofa que acaba de salir.
¿Lo entendí bien?, mi cuerpo dejó de sentirse tenso; Nely, pensaba que estaba con alguien en la habitación. Solo debía jugar bien mis cartas, y podría continuar tal vez con mi trabajo, si todo salía bien—No—me excusé—, Ven. Entra.
Abrí la puerta de mi cuarto, y Bruno estaba ahí intentando levantarse para escuchar la conversación que mantenía con la rubia, cuando lo vi se lanzó a la cama disimulando algún movimiento en falso. Negué en desaprobación pues tiene la manía de inmiscuirse donde nadie lo llamaba.
—¿Qué quieres, Kenneth?—Me siguió está ultima, y al encontrarse a mi amigo, cruzó sus dedos incomoda.
—Espera—ordené, y luego me dirigí a Bruno esperando que comprendiera la situación—. Bruno, ella es Nely ¡Mi jefa!, quiero que me digas ¿Quién estuvo en esta habitación todo el día? Y quiero que le expliques quien es la señorita que estaba aquí contigo.
Bruno frunció su ceño, con dificultad se levantó y echó agua en un vaso antes de hablar.—Yo estuve aquí, con mi novia «Paty», ¿por qué?
Giré mi cabeza para que Nely, entendiera que no era nada lo que estaba creyendo, y así fue. Mordiendo su labio empezó a marchar más cerca de mi.—¿Ves? Ahora hazme el favor de irte, porque estoy demasiado cansado, tanto de tus celos malditos como de tener que explicarte cada vez que piensas algo de mí.
No me sentí mal al hablarle así, pero si le estaba mintiendo y a dos chicas. De nuevo, pero vamos, Nely podía ser un poco atosigante a veces, que digo a veces, todo el maldito tiempo.
La tomé del antebrazo, y salimos al balcón.
—Osito, perdóname... Me sentí furiosa pensando que tenías a alguien más.
Callé, y no era que no tenía una excusa, sino que sentía que cada mentira que decía, me condenaba un poco más; solo toqué su hombro y le sonreí, esperando que entendiera mi molestia y se marchara.
«Nely, es mejor que te vayas» supliqué.
—Pero, yo pensé...—dijo mientras las yemas de sus dedos recorrieron lentamente desde mi pecho hasta el borde de mi bragueta—Que podíamos recobrar el tiempo perdido de este día.
Mi mano detuvo su intento de ingresar su mano bajo mi ropa, esta vez, estaba en mis cinco sentidos y había pasado el mejor día con Abril, no, no lo arruinaría.
—¡Vete!
Ni siquiera la miré, solo dejé que ella se alejara obviamente dolida. No me importaba, es más esperaba que se fuera de este lugar, lejos de mí.
—Kenneth, ¿por qué no simplemente le dices que te deje en paz?—Me interrumpió Bruno, que al parecer había terminado de escuchar nuestra conversación.
—No, puedo. Necesito el empleo, y necesito el dinero.
—Debes elegir, el dinero o el amor. Lo digo en serio, ahora Paty casi se da cuenta de todo...
Mis ojos se abrieron ante su comentario, y le pedí que me comentara el porqué de él, vamos si sabía que Nely había venido, ella me lo acaba de decir pero por qué iba a enterarse la otra chica.
—Cuando vino, Paty, ella me estaba colocando hielo—comenzó a detallar lo que había transcurrido. Le ayudé a caminar de nuevo hasta la habitación para que continuara ahí adentro, y evitar que alguien más escuché nuestra platica. —, cuando la puerta comenzó a sonar, me asuste porque ya ella me había dicho que te habías ido con Abril, pero nunca pensé que iban a regresar pronto.
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Sueños de Juventud (SDI #1)
ChickLit"Cuando un hombre ama a una mujer, su mente no puede estar en nada más." Kenneth siempre ha sido, desde muy joven, un mujeriego dispuesto a pasarse la vida de cama en cama, mintiendo, mancillando y prometiendo la luna a cambio de tener al mayor nú...