Embarazada del Rubio ||Naruto Uzumaki||

||C A P I T U L O 3 4||

|EMBARAZADA DEL RUBIO|
|NARUTO UZUMAKI|
|CAPÍTULO 34|
|¡UN PADRINO PARA KUSHIKO!
PARTE DOS|
"HAY COSAS QUE SIEMPRE SERÁN ETERNAS. TÚ ME ENSEÑASTE Y AHORA ERES UNA SILUETA DESVANECIENDOSE. NOS VOLVEMOS ADULTOS, CUIDANDO COSAS IMPORTANTES."

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Narra ________.

¡Por Kamisama, estoy muy nerviosa!

Eran exactamente las 11:30 de la mañana, en cualquier momento Naruto llegaría con Sasuke y quiero que todo este perfecto para dar una buena primera impresión. Ya prepare la habitación de invitados y deje todo limpio.

Me alivia saber que mi abuela no se mudaría con nosotros hasta dentro de tres días, quería dejar la otra casa bien pulcra para alquilarla y así ganar unos yenes más. Caminaba por toda la casa verificando que todo estuviera en órden, tenía a mi hija recostada en mi pecho con una cangurera de apoyo.

Kushi-chan se encontraba bien bonita y arregladita, portaba un lindo vestido rojo con estampado de fresas al final y de mangas cortas (jesusito), en su cabecita tenía un broche blanco agarrando sus pocos cabellos y unas medias blancas con mandalas. Se veía tan tierna vestida así.

Esta era una de las pocas ocasiones en las que Kushi-chan se encontraba despierta, me miraba con sus hermosos ojos azules detallando cada movimiento que hacía, tenía un chupete en su boca por lo que estaba calmada. Su mirada azulina era tan brillante y llena de inocencia con toques de curiosidad que me enternecia profundamente. Le di un pequeño besito en su suave frentecita y le regale la sonrisa más amorosa que pude, decidí sentarme en el sofá para descansar un poco mientras esperaba la llegada de Naruto y Sasuke. Saque a mi hija de la cangurera y me la quite, senté a Kushi-chan en mi regazo y tome una muñequita de lana para que jugará con ella.

Podía sentir mi corazón latir con mucha fuerza, jamás interactúe mucho con Sasuke, la realidad es que solo hemos conversado tres veces en todos estos años. La primera conversación sucedió semanas después de los exámenes chunnin y solo fue para recomendarle un puesto donde vendían los mejores tomates, ahí me di cuenta que le gustan mucho los tomates. La segunda sucedió un día antes de que desertara, hablamos de Naruto, ahora entiendo que esa conversación definió su desicion de irse de la aldea. Y la última fue después de la guerra, más que conversación fue un intercambio de palabras.

Sin importar cuanto tiempo pase; Sasuke Uchiha siempre me intimidara. De niña no me gustaba acercarme a el, tanto por su reputación como por su carácter, sentía que algo estaba mal con él y sea lo que sea no debía meterme sino quería salir lastimada.

— ¡________-chan ya llegamos! — me tense ante el repentino grito, los pasos de ellos dos se acercaron rápidamente a la sala.

¡Oh, ya llegaron!

Me levante del sofa con Kushiko para recibirlos mejor, pero mi cuerpo se paralizó al tener a Sasuke frente a mi, sentí como su mirada sería y fría me analizaba hasta que se enfocó en mi hija, trague saliva nerviosa. Naruto se posicionó a mi lado, Kushiko estiró sus manitas hacía él que la recibió gustoso y con una enorme sonrisa, le quite antes su chupete.

— Te presentó a Kushiko Uzumaki, mi hija. — declaró hacía Sasuke que no había cambiado su expresión ni un segundo.

Solo espero que todo salga bien, que Sasuke logre formar una buena relación con nosotros.