only ; 𝘀𝗮𝘁𝘇𝘂

How did we meet?

La luna era tan brillante que me ardían los ojos al verla, no era común que estuviera por estos lugares pero aquí me encontraba, en el momento y lugar más desafortunado de mi vida, sentada en el escalón que da a un edificio, con una botella de soju en mi mano izquierda y en la derecha mi celular, lágrimas inundan mis ojos y empapan mis mejillas, calientes como la lava me queman y hacen que llore aún más de lo que ya lo estoy haciendo, no se como llegue aquí, se supone que hoy sería un buen día pero al parecer las cosas no iban a mí favor.

Romper una relación de un año no es para nada sencillo, me había acostumbrado a ella, a todo lo que tuviera que ver con su estirado y raro mundo, si debía ir a una sesión de fotos falsa con su familia ahí estaba yo para alentarla y decirle que todo iba a salir bien, que lo único que debía hacer era sonreír para que su hermoso rostro se iluminará, la amaba con locura, que feo es cuando sigues en una relación pero no sientes nada por la persona, si no por alguien más, que es inalcanzable.

Amo a otra chica, no se que hice mal en mi vida pasado pero aquí estoy, llorando por haber perdido a dos personas tan importantes en mi vida, Sooyoung no se merecía esto, es la chica más dulce que conozco, la misma que tenía la capacidad para que éste mundo gris tuviera colores vibrantes y un toque emocionante que estoy segura que nadie tiene, pero como siempre y en toda mi vida, lo he echado a perder, porque no había dejado de amar a aquella persona que estuvo conmigo por un largo rato, pensé que la había olvidado.

No es como que la veía todos los días, era alguien frío y distante así que era bastante difícil llegar a ella pero cuando lo hice me di cuenta que el amor que tenía para darme era uno de los más sinceros de todos, lástima que eso pasó justo en medio de mi relacion, el problema es que lo acepte sin importarme ni un poco el bienestar de Sooyoung, o Joy como le gusta que le digan, ella no merecía nada de lo que yo le hice, nadie merece algo tan asqueroso como una infidelidad.

Nunca llegue a besar a Jennie pero aún así, mi corazón le pertenece, a nadie más que no sea a ella y me duele el hecho de no poder amar a Joy, porque es quien lo merece, es quién en verdad necesita que la ame y me siento culpable de la forma en la que se enteró, porque no pude más y lo solté sin anestesia, sin pensar en cómo se sentiría, pero es que no pude más, miento si digo que fue la culpa, solo diré que sentí que era lo correcto solo que todo fue demasiado tarde, el daño ya estaba hecho.

No ser hasta que punto lograré aguantar este dolor, quise hablar con Mina pero la verdad es que ahora mismo no tengo cabeza ni corazón para aguantar todos los insultos que me va a decir, cada uno de ellos me los merezco pero siento que ahora no, tengo que reflexionar porque castigarme no hará nada más que empeorar las cosas, solo necesito enmendar mis errores y cuando todo esté correcto, darle fin a lo que sea que llegue a construir con ellas dos, que a la final no fue nada más que algo a base de engaños, ninguna de las dos se merecía eso.

Definitivamente no soy buena para estar en una relación, no merezco que nadie me ame porque mi amor es confuso, un día estoy bien y al otro destruyo al ser más preciado que tengo, quisiera morir pero siento que no sería justo para mi familia, porque la verdad es que yo merezco todo lo que me está pasando e incluso más, creí que tenía todo bajo control que las cosas irían bien pero fue todo lo contrario, acabe en el suelo, literalmente, tengo que admitir que este lugar es bastante limpio, no sé en donde estoy pero aquí me encuentro.

Lo único que sé es que tengo una hermosa vista desde aquí, una gran avenida en la que pasan muchos autos, hay varios restaurantes, acabo de salir del de comida japonesa, sentí que así tal vez me sentiría mejor pero empecé a llorar con la boca llena de arroz y parece que a nadie le hizo mucha gracia ver cómo masticaba mientras sollozaba, así que preferí venir hasta aquí, no es porque me hayan echado como si fuera una perra, que es lo que soy, alguien que no merece nada más que eso, cierro los ojos y suspiro.

Es una hermosa noche, mis ojos se vuelven a llenar de lágrimas estamos bastante cerca del verano, momento en el que cumplía dos años con Sooyoung, iba a ser un fabuloso día, lastima que eso nunca va a pasar, aprieto los labios y tomo un poco más de soju, frunzo las cejas, amo cuando el alcohol quema mi garganta, es la sensación más exquisita que puede existir, limpio mis labios con la manga del suéter blanco y entre cierro los ojos cuando veo que algo está tapándome la hermosa luz que brinda mi amigo el poste, es bastante alto.

— ¿qué haces aquí? —. La miro confundida, ésta chica no la conozco de seguro me está confundiendo con alguien que no se quién es.

— me estás confundiendo —. Murmuro y muevo un poco las manos para que siga su camino, a veces las personas son tan raras que me confunden con quién sea incluso si no se parece en nada a mi, siempre dicen que es por mi personalidad, de seguro es bastante común, incluso más de lo que pensé que era, es una lastima ser tan ordinaria, en algún momento me vieron como algo especial, ahora no soy más que escoria.

— ¿eres la chica que comía arroz con la boca abierta mientras sollozaba? —. Vuelvo a subir la mirada y cierro un ojo gracias al resplandor de los autos a mi izquierda, soy esa misma persona que está diciendo pero no debería ayudarme, ni siquiera sé quién es como para confiar en ella.— cada que masticabas decías un nombre raro, Siyeong o algo por el estilo —. Tiene una sonrisa dibujada en sus labios, no entiendo que es lo gracioso.

— Sooyoung —. Corrijo sin pensar, no debería estar hablando de nadie con una desconocida, suspiro y me levanto con cuidado.— vete de aquí, no entiendo que haces con tu vida —. Muerdo mi labio inferior y con cuidado me enderezo, acomodando mis dos manos frente a mí para no tropezarme con nada, ¿que se cree esa chica?, llegó de nada y ya quería sacarme información personal, como si fuera tan tonta como para decirle absolutamente todo, además de que aunque necesito ayuda y desahogarme no lo haré con cualquiera.

Sigo caminando pero unos pasos a mi lado me preocupan, miro de reojo y pego un brinco cuando veo que es ella, lo sé porque su chaqueta es bastante grande, nadie debería vestirse así, es como un pecado para la sociedad coreana, lamentablemente es más común de lo que debería.

Me detengo antes de que siga a mi lado y me cruzo de brazos, debería gritar pero tampoco quiero hacer un escándalo.— ¿por qué me sigues? —. Se encoge de hombros y sonríe, ¿que mierda tiene su sonrisa que me atrapa de ésta manera?, puede que sea conocida, no tengo que enrollarme tanto con esto.

— hoy me desperté con ganas de brindarle mi apoyo a quien lo necesitará y parece que tú lo necesitas —. Acabo de toparme con una chica que tiene complejo de Jesucristo, lo que me faltaba.— me veo en la obligación como buena ciudadana de ayudarla a usted a ir a su bella morada, no me gustaría que alguien se aproveche de su situación —. No sé si habla así porque es normal para ella o porque me quiere insultar de alguna rara manera.

Entre cierto los ojos.— ¿qué me certifica a mi que no harás lo que dices? —. Se queda pensando por unos instantes, sus labios se frunce al igual que su ceño, parece estar bastante concentrada en explicarme el por qué quiere acompañarme a mi casa, no entiendo que me pasa al mundo, me gustaría agradecerle pero sinceramente lo que me está diciendo no ayuda de nada, además de que si en caso tal es una buena chica no la necesito ni merezco.

Si me llega a pasar algo es porque me lo he buscado, yo fui quién decidió comer tan lejos de su casa, tal vez para que me pasará algo malo pero como soy tonta no vine en taxi, preferí caminar para despejar la mente y fue lo único que no hizo, porque hasta bailar y sentirme como un musical hice, todo menos mi verdadero y único objetivo.

— no tengo nada —. Resoplo y paso a su lado, por un momento pensé que diría algo lindo.— pero puedes elegir confiar en mí, eso no sería tan mala idea —. La miro por encima del hombro, si es una asesina sería matar dos pájaros de un tiro, lamentablemente más literal de lo que parece, y como necesito desahogarme, de seguro me escuchará, no parece una mala chica.— ¿entonces? —.

— si me asesinas me harías un favor —. Susurro sin dejar de verla.— así que si eres una asesina que ama como suplican por su vida pues...conmigo no te irá bien —. Niega con la cabeza.

¿Por qué no confiar en una completa desconocida?.