only ; 𝘀𝗮𝘁𝘇𝘂

think of children

— ¿Has pensado en tener hijos? —, dejo la toalla en la cama y la miro extrañada, es la primera vez que hace este tipo de preguntas y me extraña, no es como que no piense en un futuro con ella pero no es alguien que hable de ello y la verdad es que yo tampoco, tiendo a ser muy reservada con estos temas ya que no quiero ilusionarme antes de tiempo, luego todo lo que llegue a planear se derrumbaría y la verdad es que no aguanto otra desilusión.

En anteriores relaciones también pensé en ello y si estaba demasiado joven, incluso más que ahora, pero lo pensé y es lo que vale, esta vez me prometí que iría un poco más lento de lo que alguna vez fui en cualquier relación pero ahora estamos mirándonos directamente a los ojos, con dos meses de relación y toda una vida juntas por delante, debatiendome si tengo que decirle la verdad o mentirle, porque si, he estado pensando, de vez en cuando, en tener uno o dos bebés con ella pero aquí sería bastante difícil, vivimos en Corea aquí las cosas son más difíciles.

Deja el teléfono en la cama y se sienta apoyando la espalda en el espaldar de esta, con las manos apoyadas en sus muslos como si quisiera que me sentara sobre ellos pero es que no puedo ni mover un músculo, sigo debatiendome en si decirle o no, hay que dejar bastante claro que toda mi vida he pensado en tener un hijo, es algo que siempre me ha hecho mucha ilusión solo que me da bastante miedo.

— lo digo porque entré sin querer a tu teléfono y estabas viendo ropa de bebé —, suelto un suspiro de alivio y me acuesto a su lado, sonrío instantáneamente cuando rodea mi cintura con su brazos y me acerca a su cuerpo.

— Una prima tuvo a una pequeña y hermosa bebé, quería regalarle algo —, asiente e inmediatamente depositá un suave beso en mis labios, me asusta un poco que esté tan relajada así que me armo de valor para preguntarle,— pero...y sí lo quisiera, ¿que dirías? —, en su mirada se nota que está teniendo un debate mental en el que no sabe muy bien que decirme, yo también lo tuve así que esperaré que se sienta cómoda con la decisión que va a tomar.

— quiero todo contigo por más que sea una máquina de gastos, llanto y...ya sabes —, me cruzo de brazos y elevo una ceja, que mala imagen tiene de los bebés que bueno básicamente para las personas que no han estado en contacto con uno piensan y creen que son así, que tampoco es que mientan, pero son mucho más que eso.

— hey —, me mira atenta,— los bebés son más que eso, mira...cuando nacen y los tienes entre tus brazos, cuando toman tu dedito con esas manitas suaves y gorditas te das cuenta de lo maravillosa que es la vida —, explico,— cuando sonríen al dormir y su mirada tan pura al despertarse, la forma en la que frunce las cejitas al estar enojados y lo tierno que se ven cuando comen, cada cosa hace que los bebés sean lo más lindo que existe en el mundo —, sus cejas se frunce y me derrito,— si, así frunce las cejas —, deja de hacerlo y se sonroja, antes de que diga algo la abrazo y la lleno de besos, creo que ya tengo una bebé Tzuyu como para estar pensando tanto en otros bebés.

— veo que si quieres ser mamá —, asiento y sigo dejando besos en sus mejillas regordetas, es la chica más dulce que existe en el mundo, es que la amo tanto, arrastro la nariz por su mejilla y me escondo en cu cuello haciendo leves masajes con esta,— te verías muy bien con el vientre hinchadito con nuestro bebé —, y lo que alguna vez vi como la cosa más adorable del mundo, ya no lo es, mi sonrisa se borra por completo y aprieto los labios antes de hacer un sonido de desaprobación.

— ¿quién dijo que yo seré la embarazada? —, pregunto en un tono de voz calmado pero a la vez elevado para que pueda escucharme.

— yo lo digo y certifico —, ruedo los ojos antes de que me acomode mejor, me recuesto en su pecho y la jalo para que me pueda abrazar más fuerte, me gusta estar entre sus brazos, cerrar los ojos y quedarme dormida es la mejor sensación del mundo, me estiro mejor y bostezo, tal vez el bañarme a esta hora hizo que me diera sueño pero no puedo dormir, tengo que hacer algunas cosas antes de pensar en hacerlo, estoy algo ocupada con el trabajo y que estoy a punto de comenzar la universidad,— amor, tienes que dormir estás cansada —, pellizco un costado de su abdomen y se queja.

Ella fue la que no me dejó dormir por estar encima de mi tocándome, es una completa bestia, es que no me cansaré de decirlo, tiene la capacidad de estar demasiado tiempo haciéndolo sin parar y le da igual todo, es que creo que hasta me desmayé y cuando volví a estar consciente lo primero que sentí fueron sus dedos entrando y saliendo, agradezco que ahora no me duela tanto el cuerpo porque cuando me desperté sentía que me había pasado un camión por encima unas ochocientas veces por segundo.

Gruño por lo bajo debido a sus dedos clavándose con suavidad pero a la vez firmeza en mi espalda baja para acercarme, aún más, a su cuerpo, suspira sobre mis labios y antes de que me bese me separo,— no haremos nada por favor —, asiente y se queja, sé que es alguien insaciable y que yo también lo soy pero aquel límite en el que nadie me había llevado en toda mi vida ella ha hecho que lo experimente y no se siente tan bien como pensé, siento que mis muslos de la nada se van a incendiar,— creo que me voy a desmayar y tal vez morir si tan solo acercas los dedos —, niega con la cabeza y lame mi cuello.

Sabe muy bien que es sensible así que dejaré que haga con el todo lo que quiera porque me relaja, puede que eso me ayude a dormir por lo menos unos treinta minutos antes de que tenga que prácticamente correr a la casa de Mina para que me informe lo que sea que me iba a informar.

— no haré nada que tú no quieras que haga —, estoy agradecida por eso, hay personas que les da igual y ella sabe muy bien cuando digo en serio que no quiero que haga nada.

— solo quiero cariñitos y tal vez que me ayudes a ir a la cocina a buscar agua porque siento la garganta seca —, me muerdo el labio al sentir como acaricia toda mi espalda, se siente demasiado bien.

— ¿Por qué tú garganta está seca? —, sé que ella quiere que le diga pero no lo haré seré más fuerte,— uy, puede que sea porque te tuve chupando el dildo más de lo que debí —, mis ojos se abren de la impresión y vergüenza que me causó lo que acaba de decir, suelto un chillido flojo porque de verdad me duele e intento cubrirme lo más que pueda mi rostro para que no note que estoy roja,— pero es que verte haciéndolo, creo que necesitaremos una habitación en otro lugar para que nuestros hijos no te escuchen —, el escuchar "nuestros" hace que mi corazón se acelere y una extraña sensación invada mi cuerpo.

No sé si así se siente la felicidad o es la simple imagen de un bebé en medio de nosotras durmiendo y nosostras solo observando las caras adorables que hace al dormir, algo en mi cambio y no entiendo muy bien que eso, solo que se siente bien y que lo quiero seguir sintiendo con ella, porque es con quién quiero estar, al fin y al cabo es mi novia la chica que he elegido que este conmigo, y espero que des para toda la vida o por lo menos hasta que podamos estar.

— también te pueden escuchar a ti —, vacilo y la escucho reír, al tener mi oído legado a su pecho su risa se hace aún más graciosa de lo que es así que solo basta un par de carcajadas de su parte para que yo también este riendome por las tonterías que dice,— no te burles —, digo entre risas,— puedo ser incluso más activa que tú si me lo propongo —.

— ¿Ah sí? —, asiento muy segura de mi misma, ella cree que nunca fui activa cuando la primera experiencia sexual que tuve yo era quien tenía el absoluto control de todo.

— ¿Quieres que te recuerde las veces que te he hecho gemir, Chou Tzuyu? —, sus ojos brillan.

— si, quiero que hagas que lo recuerde ahora —, me vuelvo a acurrucar y niego con la cabeza antes de suspirar.

— cariño, voy a tener que grabarte para enseñarte cuando te lo haga, que raro que no recuerdas cómo mordías la almohada para no gemir —, su risa, ¿por qué ahora siento que es incluso más atractiva que antes?,— cuando esté realmente bien vas a tenerme arriba de ti dándote los mejores putos orgasmos que vas a tener en toda la vida —, escupo sin tapujos y la escucho reírse por lo bajo, muerdo mi labio inferior y sonrío.

Nunca en la vida pensé que el mundo me cruzaría con una mujer tan perfecta como lo es Tzuyu, con simples cosas me hace reír y de verdad que quiero estar con ella para toda la vida, es que ni siquiera el para siempre siento que sea suficiente para demostrarnos lo mucho que nos amamos.

El estar aquí con ella y que todo se haga cada vez más real, me llena el corazón de cientos de emociones y sensacion que quiero sentir por el resto de mi existencia e incluso más, porque ella lo vale, es todo en esta vida.