CAPÍTULO VEINTIOCHO

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—esta es la parte que menos me gusta, ver como te pones tu ropa para irte —yo reí acomodando mi falda y sentandome en la orilla de la cama para mirar como estaba con sus manos detrás de su cabeza recargado en el respaldo mirandome.

—deberías hacer lo mismo antes de que te vea JiHo —le dije golpeándolo levemente en su pierna bajo la cobija.

—mejor así, para que vea a quien amas es a mí —se colocó detrás con sus piernas a cada lado de mí abrazándome.

—¿cómo? —pregunté confundida.

—¿no sabes que le gustas?

—¿yo?, ¿le gusto a JiHo? —lo miré sorprendida y él solo sonrió para darme un beso en la mejilla.

—sí, me dijo que te vio por primera vez en un parque y que ahí le gustaste.

JiHo entró a la habitación sonriendo lo que se le hizo raro a JoonHwi.

—¿por qué sonríes? —le preguntó volteando su silla hacia el chico.

—me encontré con alguien hace un momento, no pensé que fuera tan hermosa en persona —se le notó una media sonrisa mientras dejaba sus libros en el escritorio y se sentaba en la cama para ver a JoonHwi que no sabia a que se refería.

—¿hermosa?, ¿quien? —el chico también sonreía por culpa de su amigo.

—Kim ___ —cuando escuchó ese nombre la cara de JoonHwi cambió por completo.

—¿dices que viste a ___ cuando venías para acá?

—sí, choqué con ella por accidente haciendo que tirara sus cosas y ella también cayó...

—¿ella está bien? —preguntó preocupado.

—sí, me comentó que su hermanito va a entrar aquí también.

—¿hermanito?

—sí, no sabía que tenía hermanos.

—¿kkamdunge? —susurró para él mismo.

—¿ah?

—no nada, ¿creí que no te gustaba ella?

—pues no soy de escuchar ese tipo de música como acostumbran Sol A y tú, pero cuando la vi de cerca me...gustó.

—no digas eso —habló serio, pero JiHo no se dio cuenta.

—sé que nunca había hablado de estás cosas, pero tenía tiempo que no me sentía así por alguien. Además, seguro la veré seguido si es que su hermano entra.

—ella es idol y mayor que tú, no te puede gustar —trató de ocultar sus celos, pero era una tarea difícil.

—¿y? También me dijiste que te gustaba alguien mayor que tú —informó al chico que no se veía contento, así que cambió su rostro a uno más relajado.

—tienes razón, discúlpame y me alegra que sientas algo por alguien.

salí de la habitación después de eso —explicó.

—aww, te pusiste celoso —dije levantándome para darme la vuelta y mirarlo.

—¿cómo querías que me pusiera después de escucharlo decir eso? —se recargo en sus manos poniéndolas  en la cama.

—zorrito, igual no hubiera estado con él, así lo hubiera visto todos los días mis ojos siempre han estado y estarán en ti —tomé su rostro con ambas manos para que me entendiera mejor —. Lo que dijiste antes, ¿lo dijiste en serio?

—¿sobre que?

—ser inmortal —puso sus ojos en blanco, creo que lo estoy hartando con esta conversación, pero para mí es importante —. Olvídalo, si no quieres hablar de eso esta bien.

—no, amor...perdón, si quieres hablar adelante te escucho y contestaré lo que quieras —se notaba que no quería hacerme enojar, creo que esa era su intención.

—solo quiero saber, ¿hay alguna forma de hacer que pase? —veía mi insistencia en el tema y no tuvo de otra.

—para ser inmortal hay algunas maneras a diferencia de ser mortal que es más complicado conseguirlo y más para los Gumiho —explicó.

—¿qué maneras?

—¿tanto quieres que sea inmortal? —me separé y me senté en la cama de JiHo.

—unos días después de que discutimos por lo mismo en tu casa fui a ver a la señora Tuluipa.

—¿qué? ¿Por qué?

—para encontrar una manera de volver a ser mortal.

no puedes volver a ser mortal, entiendelo —gritó Tuluipa.

—por favor, tiene que haber una forma, algo que pueda...

—la única manera de que un Gwishin sea mortal, es volviendo a nacer ¿quieres tomar ese riesgo querida?

—usted solo...

—¡Basta!, te recomiendo que te vayas.

se que quieres otra respuesta, pero ella tiene razón, ninguna criatura a logrado ser mortal —me vio triste e intentó  animarme —. Los Gwishim pueden hacer inmortales a los demás, fue lo que te pasó a ti ¿no? Con una mordida.

—yo no puedo hacer inmortal a nadie, al no ser completamente Gwishim una mordida mía solo provocaría dolor y sangrado excesivo. Lo intenté con un tipo desconocido y casi muere, lo observé  unos días hasta que me harté y tomé  un cuchillo para comprobar de una vez por todas.

—¿lo mataste?

—no, no, solo corté su brazo y no sanó al instante ni después —me levanté —. Yuri iba conmigo y le borro la memoria, después lo llevamos al hospital para que lo ayudaran.

—bueno, podemos encontrar la forma no te preocupes.

—¿estás dispuesto a ser inmortal si llego a encontrar la forma? —me acerqué a él y no esperaba que me tirara a la cama con él de nuevo colocándose casi encima mío.

—por ti, estoy dispuesto a lo que sea—terminó acercándose para besarme, pero algo nos interrumpió, el sonido de la puerta.
No logramos besarnos y a pocos centímetros solo reímos, aunque él se quejó por la interrupción.

—es JiHo.

—¿cómo lo sabes?

—tengo buenos sentidos ¿recuerdas?

—no sé que dirá si te ve aquí ja, ja.

—lo mismo digo —inclinó su cabeza sin entender —. ¿Jiho suele verte desnudo? —se dio un vistazo acordándose de como se encontraba.

—aish, ¿dónde está mi ropa? —JiHo volvió a tocar —. Voy, dame un segundo.

—olvidé a lo que venía, por culpa de tu calentura —me quejé y solo lo escuché reír mientras buscaba su ropa.

—no te negaste cuando lo hicimos ja, ja —tomó su pantalón.

—¿ah sí? —me levanté con velocidad, no se dio cuenta cuando lo hice; le quité el pantalón y recogí su ropa para detenerme en la puerta.

—___ no lo hagas—me ordenó a lo que hice caso omiso.

—debo hablar contigo de algo importante, te veo en la cafetería mi amor —le di un guiño acompañado de un besito en el aire, tomé mis zapatos y me escondí detrás de la puerta para abrir esta misma dejando entrar a JiHo a la mitad de la habitación.

—¿por qué tardaste en... ¿qué haces desnudo? —con una sonrisa lancé su ropa haciendo voltear al chico de lentes, aunque no lo logró pues salí a velocidad del cuarto.

BARRERAS DEL DESTINO (Segunda Temporada) 💫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora