XXXVI: Ajuste de cuentas

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Tema recomendado para escuchar, de manera simultánea, con el capítulo:

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Los habitantes de Bhurmortí se aterrizaron cuando oyeron la noticia del asesinato de Sasha Ferrum. Ella se había convertido en la prueba de que los creepypastas eran reales, y demostró que se les podía hacer frente. Las personas tenían miedo, pero confiaban en que las autoridades harían algo para detener a estos asesinos. Sin embargo, no hubo nuevas noticias, no se dijo nada nuevo, y no se presentaron nuevos casos de homicidios. Por lo que el asesinato de Sasha, fue la peor forma de regresar a la realidad a los habitantes de Bhurmortí. Jane y Jack escaparon a tiempo del lugar antes de que llegaran los oficiales de policía. Los vecinos llamaron por los gritos, los golpes y el disparo que se oyó. Sin embargo, el ADN de la pelinegra quedó allí, dejándola como una de las principales sospechas de lo ocurrido. Más encima, su desaparición y nulos datos de su vida como ciudadana, hicieron que los rumores y opiniones sociales sin sustento, tacharan a Jane de homicida.

Jack llevó a Jane a su cabaña, el edificio donde ella se hospedaba ya no era un lugar seguro. Antes pasaron por este y buscaron lo que consideraron necesario, y luego partieron en dirección al bosque. El fantasma rogó en su mente durante todo el camino, para que Jeff no estuviera en la cabaña. Y al llegar, no encontró una sola señal de él. El fantasma curó a la pelinegra, para suerte de ella, la puñalada no dañó ninguna arteria ni vena importante. El momento fue incómodo para ambos, no se dijeron nada concreto, y no hubo una conversación real entre ambos. Solo algunos comentarios que el fantasma soltaba de vez en cuando, y cortantes respuestas por parte de la pelinegra. Para Jack era más que suficiente, sabía que las cosas no volverían a ser como antes, y dudaba en si ella realmente lo perdonaría.

Cuando llegó la noche, Jane durmió en la habitación de Jack, y este en el sofá. Aunque en verdad no durmió nada, los pensamientos no dejaron descansar su cerebro, y el miedo a que Jeff apareciera durante la noche lo mantuvieron despierto. A pesar de la desconfianza del sonámbulo fantasma, Jeff the killer no se presentó.

Pasaron unos días en los que ambos convivieron en aquella cabaña, como el primer día que Jane llegó hasta allí. Como viejos desconocidos. La idea era esperar a que Jane fuese capaz de caminar para poder batallar contra Jeff. Pasó más de una semana, en las que las calles de Bhurmortí fueron vigiladas por las autoridades, y sorprendentemente ningún criminal se atrevió a romper la ley. Para aquel momento, la herida de Jane no era lo suficientemente grave como para impedir que ella caminara. Cuando ella lo dijo, se prepararon para buscar a Jeff.

Los dos pensaron que sería más fácil, pero no existía rastro del psicópata de sonrisa tallada en la ciudad. Jack y Jane recorrieron las calles durante la noche, al resguardo de la oscuridad. Tenían la esperanza de oír sobre algún asesinato en su búsqueda, y de esa forma cazarlo. Pero no ocurrió. En aquél punto, ambos llegaron a pensar que quizás Jeff había huido de la ciudad. Siendo Jane quien principalmente defendía esto, argumentando que era algo que solía hacer cuando las cosas se ponían peligrosas. Mientras que Jack creía que Jeff no huiría tan fácil después de todo lo ocurrido, al contrario, al estar enfadado se quedaría en la ciudad hasta vengarse.

Entre la venganza - [Eyeless Jack y Jane the killer]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora