Capitulo 25. Ruptura II

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Emily se dirigió a su camioneta, subió a esta, intentó encenderla pero no funcionaba. Después de un par de intentos se dio por vencida.

—Lo que me faltaba— dijo mientras sacaba una linterna y abría el cofre de la camioneta tratando de buscar algo fuera de lo normal.

No sabia que pasaba por lo que opto por encender una fogata y quedarse cerca de la carretera, se sentó cerca del fuego con su arma a la mano y finalmente se quebró.

"Todo lo que no había llorado por sus padres, por Reg y por todos los que había perdido estaba saliendo de apoco y ella ya no tenia el control sobre eso"

Abrazo sus piernas mientras trataba de tomar aire, sin embargo noto un sonido extraño proveniente justo de frente a ella.

—Sal, ahora— dijo Emily mientras apuntaba con su arma

Del bosque salió ni más ni menos que Daryl

—¿Qué haces aquí?— pregunto Emily aun con lagrimas en los ojos y bajando el arma

—Yo solo...

—Ya no importa— dijo la castaña mientras se sentaba nuevamente sin poder dejar de llorar

Daryl se acerco a ella, se sentó cerca solo en silencio esperando el momento para decir algo. Su cabeza daba vueltas buscando que decir para hacerla sentir mejor, odiaba verla así y al mismo tiempo era tan extraño.

—Supongo que deben estar hablando mucho de como me fui de Alexandria así como así— dijo la castaña

—No te preocupes por eso

—Lo de preocuparme es algo que no puedo evitar

Estuvieron así por casi una hora, hasta que Emily decidió hablar.

—¿Recuerdas que una vez te dije que te contaría la razón por la que odio las motos?

El hombre solo la miro y asintió

—Ya que me viste en este estado y vivimos prácticamente juntos supongo que puedo contarte...

Emily solo miraba el fuego fijamente mientras sus lagrimas recorrían sus mejillas y se secaban con el aire frio de la noche.

—Tuve un amigo, mi mejor amigo... el era como mi alma gemela, eso que solo se encuentra una vez en la vida. 

—El...— soltó un poco de aire tratando de encontrar las palabras

—El amaba las motos, la que estaba en la casa seria para el, cuando éramos jóvenes fantaseaba con una como esa. Pero la vida es muy traicionera, una noche antes de que todo esto pasara recibí una llamada del hospital...

—Había tenido un accidente y bueno... el resto es historia, desde entonces odio con todo mi ser esas cosas. La verdad lo pensé antes de dártela, lo que menos quiero es que te hagas daño yo... no soportaría que se repita la historia

Emily comenzó a llorar más fuerte, escondiendo su cabeza mientras abrazaba con fuerza sus piernas.

—Oye— dijo Daryl llamando la atención de la castaña, quien elevo su mirada. —No permitir que vuelvas a pasar por eso

La castaña sonrió un poco y se acerco al hombre, quien abrió sus brazos y la reconforto con un abrazo que la chica correspondió.

Estuvieron en esa posición por un tiempo, continuaron hablando de todo lo que había pasado y finalmente Emily se pudo tranquilizar de poco a poco.

—Lamento meterte en esto—dijo la castaña captando la atención de hombre

—¿De qué hablas?

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