Serkan le ha puesto los postres mas exquisitos de Estambul pero ella no puede ni probarlos.
Le parece mentira verlo bien y fuera de la cárcel... siente que le está engañando pero él le da su tiempo... Él sabe que algo pasa...
Están solos en la sala de juntas, con todos esos postres, y él le mira de esa forma que a ella le hace brincar el corazón.
Tiene muy buena pinta— sonrie ella triste
También me lo parece.— dice Serkan
Ella mira de nuevo la mesa.
Y aun asi no los has probado....— acaba Serkan
Porque me estoy conteniendo— dice ella, y él sabe que no habla de dulces.
No tienes porque..... se que te encantan— le sonríe él que suspira.— la de fresa tiene buena pinta... tanta que hasta yo me comería un trozo...— le susurra el.
Acabarías en el hospital— le dice ella.
Si tu me acompañaras me daría igual.— le contesta él.
¿Estas seguro?— dice ella pinchando una fresa de esa tarta mientras siente que una lágrima se escapa de su ojo.
Él la mira y le sonríe, no sabe como decirle que son un equipo... que ha aprendido de su fuerza...necesita que ella se sincere con lo que les está separando...
No puedo hacerlo— dice ella secando esa lágrima traicionera.
Serkan la mira — me ayudó mucho que vinieras a verme a la comisaria— le dice.
Estaba muy preocupada— dice ella desviando la vista de sus ojos, la lee tan fácil...
Yo también estoy preocupado..... ¡Eda !¿Hay algún problema?¿querías decirme algo?— le pregunta él.
Si, así es.— dice ella pensando en que lo mejor es hablar.
¿Pues hazlo!— dice Serkan.
Cuando ella va a hablar aparece Balca que además hace un despliegue de seducción que no pasa inadvertido ni para Eda ni para Serkan.
Mientras la relaciones publicas gime con la tarta y se sienta al lado de una Eda alucinada y un Serkan impertérrito y les dice
Supongo que estará hambriento, a usted no le gustan los dulces.... No ha probado el desayuno que le he preparado esta mañana...— le dice.
Eda mira interrogante a Serkan, él se da cuenta de lo que Balca pretende....
Asi es.... — dice mirándola a los ojos — no he tocado nada.....— y mira a Eda.— estoy siguiendo una dieta especial.
Eda le sonrie, no puede seguir escondiéndole lo que puede hacer su abuela.
Le entiendo, los dulces son mi debilidad... ya lo ha visto con la tarta de queso.— dice ella con la voz insinuante.
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Lo que proponéis...
RomanceEn este hilo irán las historias que se proponen a partir de un momento o un episodio.