El recuerdo de Sofía (Edson Alvarez y TN)

Capítulo 30

Había veces que me daban ganas de golpear a Edson, estaba segura que tenía problemas de personalidad y carácter, había veces que me hacía sentir que me odiaba pero algunas veces como hoy me hacía sentir que en verdad me quería, pues justo en este momento estábamos en su auto mientras escuchábamos una canción, el silencio en este momento era un poco incómodo para mi pero tal parecía que para Edson era todo lo contrario, pues una leve sonrisa estaba en sus labios mientras con sus dedos golpeaba levemente el volante al ritmo de la canción, movía un poco la cabeza al ritmo de la música y parecía que se contenía de tararear, yo lo miraba con una expresión de seriedad en mi rostro, de pronto el volteo a verme y esperaba incomodarlo con mi mirada de molestia pero es solo me sonrío ampliamente y con su mano libre pasó sus dedos por mi mejilla.

-quita esa cara-dijo el con un tono divertido-o me vas a obligas a orillarme en este mismo momento a obligarte a que sonrías-yo fruncí el ceño pero por más que me contuve una leve sonrisa de asomo por mis labios-ves? Te ves mucho más linda cuando sonríes.
-pues tú estás igual de feo cuando sonríes y cuando te enojas-dije queriendo hacerlo enojar pero para mi sorpresa él soltó una risa.
-mentirosa-dijo mientras no despegaba la vista del camino, estábamos a solo un par de calles de mi casa-se que te encanta como me veo de ambos modos.
-Edson, eres muy raro-le dije mirando por la ventanilla-te lo han dicho?.
-si, me lo has repetido varías veces-me contesto doblando la esquina a mi casa-pero no tienes que comprenderme al 100% para saber que te amo-yo me quede callada sin despegar la mirada de la ventanilla mientras el se estacionaba fuera de mi casa-y tampoco yo tengo que comprenderte al 100% para saber que tú sientes lo mismo que yo.
-Edson, de verdad-iba a pedirle que no insistiera más pero su voz me interrumpió.
-ya llegamos-dijo el ignorando por completo lo que iba a decirle.
-bien, gracias por traerme-dije bajándome de su coche pero el imito mi acción-no necesito que me acompañes hasta la puerta Edson, yo se llegar sola.
-olvídalo-dijo tomando mi mano para que siguiera caminando hasta mi casa-tu mamá prometió que si te encontraba me invitaría a comer-dijo el sonriendo descaradamente-y por ningún motivo pienso perderme esas ricas albóndigas.
-tengo alguna opción?-pregunté mientras el tocaba el timbre de la casa.
-no, me temo por ti que no tienes ninguna opción-dijo el mientras ambos esperábamos a que nos abrieran la puerta, a los pocos minutos la puerta se abrió y dejó ver a Christi que lucia un vestido muy lindo y un peinado que combinaba muy bien con su atuendo, yo la miré con el ceño fruncido y ella abrió paso para que entráramos.
-donde la encontraste?-le preguntó mi hermana a Edson.
-con Sofi-contestó el mientas jalaba mi mano hacia la sala.
-que estaba haciendo ella con Sofía?-preguntó mi hermana y yo traté de soltar la mano de Edson pero este no me dejó.
-no lo se-le contestó el y sujeto con firmeza mis dedos ya que yo intentaba soltarme de su agarre.
-pueden dejar de hacer de cuenta que no estoy aquí?-dije molesta pero ambos seguían ignorándome por completo.
-todos están ya esperando en la sala-dijo mi hermana a Edson.
-quienes están aquí?-pregunté yo.
-si vinieron todos?-preguntó Edson a mi hermana con una ceja levantada.
-parezco estupida hablando sola-dije molesta pero Edson y Christi me volvieron a ignorar-esto es ridículo-dije safandome por fin del agarre de Edson y caminé molesta a mi cuarto pero cuando entre a la sala miré sorprendida toda la sala llena de decoraciones de cumpleaños, ahí estaban Gerardo, Sebas, Alexis y Cesar discutiendo en voz baja de alguna tontería, de eso estaba segura, del otro lado estaban Diego, Linda y Jorge, ambos grupos permanecían separados a una distancia prudente tomando en cuenta que no se soportaban.
-espera-dijo Edson alcanzándome pero yo ya había visto todo-arruinaste mi sorpresa-dijo el soltando un bufido.
-que es todo esto?-dije sin saber que más decir, me sentía muy confundida, mirar a mis amigos ahí junto a los amigos de mi hermana que alguna vez también fueron míos me causó mucha sorpresa pues era más que obvio que ellos no se caían nada bien.
-Feliz cumpleaños-dijo finalmente Gerardo después de un par de segundo en los cuales hubo un silencio un tanto incómodo, el se acercó a mi con una bolsa de regalo demasiado grande para entregármela, yo la tome entre mis dedos aun sorprendida de verlos a todos juntos-te extrañe mucho-dijo el a mi oído mientras me daba un abrazo muy fuerte que casi me deja sin aire, yo le correspondí el abrazo con la misma intensidad mientras cerraba los ojos.
-yo también te e echado mucho de menos-le dije al igual que el en un susurro-bueno, a todos-dije aún abrazándolo mientras veía a el resto de los chicos y les regalaba una enorme sonrisa, el se separó de mi y enseguida se acercaron mis otros amigos a abrazarme, Sebas fue el ultimo y mientras nos abrazábamos el me susurro muy bajito al oído.
-supongo que nuestro trato de ser novio se a terminado-yo solté una pequeña risa y solo asentí-supongo que lo puedo soportar-dijo el separándose de mi y sonriéndome.
-a quien se le ocurrió esta locuela?-les pregunté a los chicos y ellos apuntaron a mi espalda, volteé y ahí estaba Edson mirándome con una sonrisa encantadora al igual que el resto de los chicos.
-nos convenció de hacer una tregua hoy sólo por ti-escuché a Gerardo decir pero yo aún seguía con mi vista pegada a Edson.
-gracias-le dije sinceramente y después de mucho tiempo me permití dejar salir de nuevo mi verdadera personalidad y me acerqué a abrazarlo, supongo que el no se lo esperaba ya que pasaron un par de segundos para que me correspondiera el abrazo-de verdad muchas gracias por esto Edson-dije sin despegarme de él mientras sentía como acariciaba mi espalda y yo trataba de no dejar escapar ninguna lagrima frente a todos.