Capitulo 17: Te odio

355 10 2
                                    

— Bien

— No entiendes... — bajó su mirada — No voy a volver, nunca. Vine a despedirme.

Esto no lo esperaba. Ni siquiera me había pasado por la mente. ¿QUE DEMONIOS LE PASABA? Es decir, ya me ha dejado antes pero, ¿Irse para siempre? Mi corazón comenzó a latir fuerte y mi respiración se quería descontrolar. De nuevo me estaba abandonando.

— ¿Que? — no me salían las palabras.

— Me iré a Alemania. Intentaré ponerme en contacto, lo prometo y te enviaré dinero, ¿de acuerdo?

QUE MIERDA! MALDITA ESTUPIDA ¿CÓMO SE ATREVE?
No entiende una mierda de la vida ni de ser madre. Mis ojos intentaban humedecerse pero, sabía que tenía que controlar cualquier emoción, debía soportarlo.

— Claro — dije sarcástica— Sabes, en realidad no necesito nada de esto. De verdad te agradecería que levantes tu maldito trasero y te largues ahora. — estaba furiosa pero mantuve mi tono neutro. Ella me miraba y sabía que no estaba bromeando.

— T/N, por favor...

— Que te largues mierda.

Se levantó y tomó su bolso para salir por la puerta.
En cuanto se retiró, mi cuerpo no pudo soportarlo más, todo lo que había reprimido por años salió descontrolado y sin cesar. Mis manos sacudían mi cabello mientras las lágrimas caían por mis mejillas, gemía y se me dificultaba respirar, por más que intentara parar, mi cuerpo simplemente ignoraba mis deseos, necesitaba eliminar todo ese dolor y resentimiento que tenía por dentro.
Sentía los ojos hinchados y me dolía la cabeza como si fuera a explotar, hasta que quedé totalmente seca, ya no tenía nada más que sacar.
Realmente no quería hablar sobre eso con nadie, era algo personal, quizás Han me lo preguntará y sé que con él puedo expresar todo, pero, en ese momento, sabía que a él también le pasaba algo y no quería simplemente sobreponer mis asuntos a los suyos.
Se acercaba la hora del trabajo y aunque no tenía ganas de ir, era mi deber, me cambié la ropa y tomé mis cosas para irme al restaurante.
Me dirigía hacia el ascensor, esperando a que llegara al tercer piso, cuando las puertas se abrieron quedé congelada en el pasillo. Hanna estaba frente a mi, pero, era evidente que no estaba bien. Se veía alterada y nerviosa, aún ebria de la fiesta, jugueteaba con sus manos y me miraba preocupada.

— Oye, ¿qué haces aquí? ¿está todo bien? — le pregunté acercándola hacia mi antes de que el ascensor cerrara nuevamente las puertas.

No respondía, temblaba. Pasé mi brazo por encima de sus hombros y la llevé por el pasillo, pero ella se detuvo justo antes de llegar a mi apartamento.

— T/N. — dijo seriamente — Por favor, mantén la calma, ¿si?

Sabemos que eso significa que evidentemente no me voy a calmar.

— ¿Qué está pasando Hanna? Me estas asustando. — dije alejándome un poco quedando justo frente a ella. Estaba cabizbaja.

— Quiero que primero entiendas que no fue mi intención, ¿de acuerdo? Sabes que consciente jamás te haría algo así, fue un error debido al alcohol...

— Ya dilo. — la miré directamente, sabía a lo que se estaba refiriendo.

— Han y yo...

— ¿HAN Y TU QUÉ? MIERDA, HABLA YA! — mi corazón se detuvo, sentía que me caería al suelo.

— Nos besamos, pero fue un error, ambos lo sabemos. T/N por favor entien....

— Ya cállate. Es suficiente, vete a casa.

— T/N...

Pasé a su lado sin mirarla — Vete Hanna.

Bajé por las escaleras del edificio rápidamente y salí a la calle. En ese estado no podía presentarme a trabajar, aunque me rebajara el salario, no me importaba. Llamé a mi jefe y le avisé que no llegaría, no se como se las iba a arreglar, puesto que Jeongin tampoco iría.
Comencé a caminar por el vecindario, no sabía siquiera a donde iba, solo dejaba que mi cuerpo me guiara.
Nunca había tenido un día tan mierda como hoy, de repente, entraban llamadas a mi teléfono y aunque no miraba la pantalla, sabía que era él, eso me molestaba más.
Llegué al parque y me senté en el columpio, no podía asimilar lo que estaba pasando, mi mejor amiga... y a quien le estaba dando lo mejor de mi...No era posible, respiraba profundo, dejaba que el aire fresco inundara mis pulmones. Ahí me quedé, mirando el cielo oscuro, por horas.

Vuelve A Mi (Han Jisung & T/N) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora