Fin del juego [Completa] +18

♟️01: Última semana de vacaciones ♟️

Isabella Victoria Morgan

-Mami, mira la torre que hice - dice Sarah señalando la torre que había hecho de arena

-Es preciosa, mi amor.

Han pasado tres semanas desde que nos fuimos de Boston. Por cuestiones diferentes decidimos quedarnos una semana más aquí. Los niños adoraron el lugar y yo también ya que nunca había venido aquí, si vine fue una sola vez para ver cómo seguía la construcción del hotel, pero eso fue hace mucho tiempo. Está era la última semana que nos quedaba y tenía bastante planes para hoy, una de ellas era viajar en bote. A los niños le hacían mucha ilusión y a mí claro que también.

En estás semanas decidí que no tenía que seguir sufriendo, que quería vivir mi vida y no podía seguir así de mal. Más allá de dolor que iba desapareciendo de apoco, no lo dejaba de amar aun así ya no podíamos estar juntos y yo no quería acercarme a él.

-Oye mami ¿cuando andaremos en bote? - pregunta Demon acercándose agarrar una galletita que había traído del lugar en dónde nos quedamos

-A la tarde, después de comer iremos

Apenas eran las diez de la mañana, esperábamos con ansiedad que sea la hora para viajar por encima del agua.

Miro mi celular y podía ver el nombre de mi madre en la pantalla atendí con una gran sonrisa.

-Hola mamá - los niños me miran al escucharme y vienen corriendo hacia mi

-¡Abuela! - gritan contentos por verla

-Hola preciosos, y hola hija - hago una mueca cuando saluda a ellos primero - ¿Cómo están?

-Bien, hoy iremos en bote

-Wow, eso será grandioso - dice mi madre al escuchar a Demon

-¿Cómo está todo por allá mamá? - pregunto con algo de curiosidad

-Bien. La otra vez vino a casa, me contó todo. Y quiere que yo le cuente de.... - se calla de golpe

-Mamá... - susurro - niños me dejan hablar con la abuela, vayan a jugar con la arena ¿Quieren?

-Si, mami - se van quedando a un lugar que los pueda ver

-Mira, yo solo estoy enojada con el por hacerse pasar por otro y hacerme sufrir tanto estos cuatro años - le digo, ella me mira expectante - cuentale como sucedió todo sobre... Ellos - los miro de reojo como jugaban y se reían de las cosas que hacía con la arena - cuéntale si eso quiere, pero se quedará solo con las anécdotas que les contaras tú, porque no se va a acercar a mis hijos hasta que yo quiera y no creo que acepte que los vea, ni hoy, ni nunca

-Hija, no puedes...

-Ya se, pero si ellos saben que él está vivo lo van a querer ver - le digo tratando de defenderme - ¿Cómo les digo que todo fue una mentira, mamá?

-Son niños, no van a entender

-Si, si lo hacen - asiento con la cabeza - madre, te dejo, tenemos que ir al hotel para prepararnos para ir hacia el bote. Y cuéntale si eso quiere

-Bien, los amo hija - dice antes de cortar

Suelto un suspiro cansador por todo este drama que se estaba armando, no tengo drama que sepa de ellos, es el padre. Lo que me molesta es que haya desaparecido los malditos cuatro años y después venga hacerse pasar por un hombre para acercarse a mi para después ir a la casa y encontrar la maldita carta de mis hijos y saber que Sombra, no era Sombra. Que era Alexander Collins