Con amor, S.S [Shinwaka]

♡ 20 ♡

—¿Que haces despierto tan temprano?

Una voz femenina interrumpió el silencio que tanto disfrutaba. Apoyó su mandíbula sobre la palma de su mano, bebiendo su tasa de café que preparó aunque solo para poder despertarse del todo. No se molestó en darle otra mirada y regresó la vista hasta su dibujo, movió su lápiz rellenando los espacios que debía.

—No quiero llegar tarde hoy.—respondió.

—Con razón sentía una vibra extraña desde que me desperté —comentó la mujer. —¿Retomaste el dibujo?

—Graciosa —murmuró Wakasa, dándole una mirada irritada.—Y no, es para la clase de arte.

—Oh, bien. Entonces...cenaré afuera hoy, no me esperes.

—¿Con quien irás?

—¿Alguna vez te he preguntado con quien sales, cielo? —regresó ella con ese tonito que le daba a entender que era mejor quedarse callado —No ¿cierto?

Soltó una pequeña risa, y asintió sin querer realmente saber más.

—Vale, como quieras.

—Hablando de eso —mencionó ella tomando su abrigo para ponérselo —Evita distraerte con ese tipo de cosas ¿si?

Wakasa alzó una ceja, divertido que justamente le pida eso, ta era demasiado tarde para eso. Estaba jodido, desde hace rato. Aunque su madre no tenía porqué saberlo.

—Claro.

—Abrígate bien antes de salir, hasta en la noche —se despidió ella antes de tomar su bolso y salir de la casa.

Wakasa jugó con el borde de la tasa, todavía era bastante temprano, pero se despertó en la madrugada y no pudo volver a dormir. Así que por primera vez, en un lunes, llegaría temprano. Terminó de arreglarse y salió de su casa, con el clima siendo un desastre.

La temperatura había bajado considerablemente en los últimos días y amaba eso. Prefería llevar varias prendas encima que sufrir bajo los estúpidos rayos del sol. Se acomodó su abrigo y bajó de un salto los escalones de su casa.

Había dos razones, por las cuales debía llegar temprano. La primera era porque tendría tiempo para terminar la tarea de biología, y dos, habia más posibilidad de ver a Shinichiro. Quizás con lo último sonara como un desesperado, pero no lo era. Y si sentía algo por el azabache en ese momento era una profunda molestia, y unas horribles ganas de decirle nuevamente que se fuera a la mierda.

Pero no lo haría, porque era una persona pacífica.

¿Desde cuando? Hace unas semanas se propuso no hacer ningún otro escándalo, quería por lo menos graduarse sin problemas.

Después de esa pequeña "discusión", en la mañana siguiente que se vieron ninguno mencionó nada, y solo una horrible incomodidad llenó la instancia. Shinichiro los saludó como lo hacía habitualmente pero no le dirigió ni una palabra más, para luego excusarse diciendo que tenía algo que hacer. Agradeció que sus amigos no lo notarán, y si lo hicieron, no mencionaron nada. Cuando las clases terminaron tampoco lo vio, así que supuso que andaría por ahí con sus amigos.

Entonces llegó el fin de semana, el sábado se dedicó a dormir todo el día, pero inconscientemente revisaba su teléfono esperando un mensaje suyo. El domingo decidió dejarlo pasar porque era insoportable estar con la sensación de que tenía que arreglar algo con él. No sabía si seguía molesto, pero odiaba que lo ignorara. ¿Qué se creía?

—¿Esa es mi bufanda? —preguntó apenas vio a unos de sus mejores amigos.

Takeomi bostezó, tenía un expresión de cansancio y eso era bastante extraño. Generalmente era él quien solía aparentar querer desaparecer del universo.