Esa noche su corazón se fue a casa llorando, triste, nueve años habían pasado, y jamás dio indicios de enamorarse, verla interactuar con la Kasy esa, la hizo ver que después de tantos años, al fin su corazón había sanado.En la mañana debía ir a la oficina, así que se vistió y caminó hasta allá, debía despejar malos pensamientos, así que caminar sería estupendo.
-Dígame señor, por que me hace venir hasta acá, si todo me lo puede decir por teléfono. - Reclamó la dama de cabello plateado aun.
-Tengo dos temas que hablar contigo en persona. El primero es, tu nueva ayudante, y el segundo los D'Angelo.
-Te dije que mientras sea una persona capacitada y trabajadora, no me importa quien sea. Y que hay con los D'Angelo...
-La chica esta en la sala de juntas, quiero que le hagas una pequeña entrevista. Si vas a trabajar con ella, quiero que estés segura, porque desde la semana entrante le enseñaras lo que sabes y estará viajando contigo.
-Esta bien iré ahora mismo - Dijo un poco enfadada Daisy...
Camino hasta la sala de juntas, por un momento pasó por su cabeza algo sumamente imposible, abrió la puerta y ahí sentada viendo su teléfono, miró lo imposible la Kasy que le quería robar el amor de alguien que ni en el mundo la hacía, estaba ahí esperando para hablar con ella. Así que sentir celos era o debía ser poco probable.
La chica era hermosa de pies a cabeza, unos ojos tristes y personalidad extrovertida la hacían lucir divina.
-Soy Daisy - le dijo - no me digas señora, ni jefa ni ningún otro calificativo. Daisy esta bien para mí.
-Yo soy Kasy, también me gusta mi nombre, sin problemas dime Kasy.
Le quedó muy claro que era Kasy su nombre. Pero se reprendió mentalmente por el sarcasmo con el que lo pensó.
-Entonces Kasy, he visto tu curriculum, así que se que eres capaz para este trabajo, tu serás mi compañera a partir de hoy, así que si tienes algo que decir que deba saber, sería un buen momento para hacerlo.
-¿Algo como que debería decir? - preguntó la chica dudosa
-No lo sé, algún problema médico, algún problema legal, o algún marido superceloso del que debamos cuidarnos...
-Mmmm bueno, hasta ahora no tengo ningún problema médico, tampoco uno legal y soy soltera, no tengo novio, así que nadie que nos persiga. - contestó la chica.
-Y alguna novia posesiva - ahí está, lo escupió, tenía que saberlo
-No tampoco - dijo la pequeña dama apenada.
-Podremos continuar con eso. Si te pediré que seas sincera si algo sucede, y no es por que quiero saber el chisme, es por que viajamos demasiado y tenemos estar tranquilas - si claro, ni ella se lo creyó- no dudes en platicar conmigo si algo sucede, es para poder apoyarnos en lo que sea.
-Si gracias lo haré, entonces ¿puedo retirarme ahora? Debo terminar todo lo pendiente en mi actual empleo, y salir por la noche a encontrarme con el amor de mi vida...
-Vaya vaya, parece que alguien está enamorada por aquí. Y quien es el, - Daisy mostró genuino interés, pero sabía perfectamente de quien se trataba.
-Cúando se concrete algo te diré, no creo que tenga mucha oportunidad, pero trataré. - le dijo Kasy entusiasmada...
-Esta bien, mucha suerte. Y aquí nos vemos el lunes a primera hora - ambas salieron de ahí, Kasy salió de prisa del edificio y Daisy con Smith.
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PEQUEÑA
RomanceEntre la gente y el bullicio de la gran ciudad, una pequeña de mirada triste, soñadora, como todas las pequeñas del mundo que sueñan y se preguntan ¿que sera el amor?