No control

CAPÍTULO 3: Improvisando

"Church" de T-pain y Teddy Verseti sonaba en la bocina de Sunoo mientras los chicos buscaban qué prendas vestir esa noche. Niki estaba perreando mientras Jungwon simulaba darle nalgadas.

— Ya dejen sus marranadas —se quejó Sunoo viendo a sus amigos al fondo a través del espejo de cuerpo completo pegado a la pared.

— No aguanta el estilo Neutrón —se burló Jungwon sentándose en la cama.

— ¿Prefieres algo así? —preguntó Niki mientras se paraba de manos. Aunque no controló el impulso y por el peso de sus piernas cayó de espaldas.

— Todo pendejo —se carcajeó Jungwon. Pero Niki reaccionó rápido y abrazó sus piernas para empezar a girar sobre su espalda.

— Epaaa la salvaste, hermano —lo chuleo Jungwon mientras aplaudía orgulloso de la payasada de su amigo. Hasta que Niki chocó y se pegó la cabeza con el escritorio de Sunoo tirando unos cuantos lápices. Jungwon se carcajeó aún más fuerte tumbandose entre las almohadas y golpeando la cama con la mano, Sunoo soltó una risita. Niki igual reía, pero se notaba en su cara la expresión de dolor al sobarse el sitio afectado.

— A ver si muy muy —dijo Niki sentándose en la cama y nalgueando a Jungwon para que intentara hacer un paso de baile. Este se levantó, ya un poco menos risueño, y sonrió de lado mientras miraba a sus amigos.

— Sin miedo al éxito, papi —dijo a la vez que tomaba impulso para brincar hacia atrás y hacer un mortal, pero tampoco calculó bien y las plantas de sus pies en vez de acabar en el suelo, acabaron verticalmente en el armario del fondo. Esto hizo que en cuestión de segundos se impulsará hacia en frente a la vez que caía, y terminó en el piso de rodillas con su cara estrellándose en el colchón de la cama de Sunoo.

— ¡Joder! ¿estás bien? —preguntó Niki intentando contener la risa.

— Claro que sí, estaba planeado, soy el puto amo, bebé —se levantó Jungwon sobándose un poco las rodillas, pero no se veía alguna expresión de dolor y sus amigos se relajaron. Sunoo procedió a reírse luego de tremendo susto.

— No mames, parecías un pinche torpedo cuando te estrellaste —exclamó entre risas Niki haciendo carcajear a sus dos amigos.

Los tres chicos, ahora ya calmados por sus tonterías, agarraban prendas de ropa al azar y buscaban combinarlas para turnarse a ver a quién le quedaban mejor. Convenientemente eran de tallas similares y no batallaron mucho para buscar algo cómodo. Además de que seguido iban a la casa del otro y de vez en cuando mezclaban su propia ropa. Se conocían desde pequeños y se tenían mucha confianza actualmente, por lo que se vestían y desvestían los tres ahí mismo en la habitación.

La playlist siguió en reproducción automática. Pasaron alrededor de 20 canciones y aún no se decidían por un outfit. Hasta que Jungwon por fin se decidió y se puso unos pantalones negros con lineas rojas y dos cierres a los costados, una playera de cuello alto de lineas negras y blancas debajo de otra negra fajada con estampado de una banda de rock, y finalmente una chaqueta negra de botones junto con unos botines militares con cordones del mismo color.

Niki tomó un pantalón negro con un cinturón de doble hebilla. En la parte de arriba se puso una playera holgada blanca, que igual se fajo, y encima una camisa de cuadros de color azul, la cual dejó con los botones desabrochados. Por último, sus cómodos tenis grand court blancos de adidas.

Mientras que Sunoo optó por algo más extravagante. Llevaba unos pantalones negros de cuero junto a una playera fajada negra con estampado de colores variados en el centro, encima una chaqueta de cuero roja.Y al igual que Jungwon, unos botines militares, pero de color veige.