El Gatito del señor Jeon.

"¿Estas listo omega?"

Camionetas blindadas negras se aparcaban en la entrada de la casona de los Jeon, los neumáticos rechinaron al detenerse en seco, Hyuna la alfa vestida con un traje rojo no desvío la vista de la Tablet en su mano llevando su mano izquierda al auricular en su oído y cortando la llamada en la que antes estaba, los alfas Jeon bajaron de los vehículos dando pasos largos para llegar más rápido a su destino:

 - Jeons- hizo una reverencia a ambos alfas con respeto- Los omegas se encuentran en el jardín, han decidido esperarlos ahí- jungkook fue el primero en volver a retomar sus pasos mientras hoseok terminaba de pasar por segunda vez un paño húmedo por su rostro, al estar completamente satisfecho le tendió los dos pañuelos a la alfa, uno más ensangrentado que el otro.

 - Gracias hyuna- dijo con una sonrisa juguetona, la alfa sostenía los dos pañuelos con la punta de sus dedos mientras veía a los Jeons desaparecer.

El jardín era muy tranquilo, miles de arbustos rodeaban el espacio, dos fuentes de agua hacían que el lugar ser viera más majestuoso, yoongi achicó los ojos tratando de ver más allá, los arbustos llenos de flores conducían a pasillos, caminitos de piedritas blancas que se perdían por el exuberante lugar, el Omega mayor pensó que la vez pasada no había admirado tal belleza al estar enfocados en escapar y luego más allá la naturaleza seguía creciendo, los espacios estaban claramente separados pero de una manera tan natural que apenas podía notarse, habían tenido que alejarse demasiado la vez que hyuna les advirtió que volvieran, sus pensamientos se vieron interrumpidos por el Omega que estaba frente a él con una gran bandeja entre sus manos, el chico mostró su respeto inclinando su cabeza:

-¿Qué es eso?- preguntó el Omega curioso, el chico tembló en su lugar ante la pregunta volviéndose nervioso, yoongi quiso golpearse al dejar que su voz sonara tan monótona y fría, él realmente no quería asustar a nadie, quería llevarse bien con cada persona en la mansión.

 - Señor son pudines de amapola cubiertos con chantillin y…

 -¿los has probado antes?- preguntó el Omega curioso, el Omega frente a él negó apresuradamente mientras sus mejillas se teñían de rojo.

 -N-no señor- yoongi miró la pulcra bandeja con aquellos postres que serían demasiados para él y su hermano ¿su hermano? El puma giro su rostro hacia ambos lados buscando la presencia del cachorro y ubicándolo frente a una fuente, el cachorro menor de los Min jugaba con el agua con una de sus manos, remojando solo sus dedos y mostrando una sonrisa cuadrada deslumbrante, habían dos personas más cerca de él pero solo era un beta y una Omega que eran parte de la servidumbre y lo acompañaban.

 -Mientras espero al alfa Jeon ¿podrías acompañarme?- el Omega se quedo congelado en su lugar ante la extraña orden, los Jeons no eran temidos de manera tenebrosa por ellos, su gente tenía un sentimiento hacia ellos de demasiado respeto, los Jeons eran buenos y justos, estrictos con algunas ordenes pero siempre velaban por cada persona bajo su protección, eso había logrado que el sentimiento de lealtad en sus hombres se reforzará mucho más.

 - Y-yo n-no c-creo que- el Omega se atropelló con sus propias palabras tragando el nudo en su garganta, Un Min,un Min de un linaje tan alto como eran ellos eran considerados intocables, un rango tan puro frente a un rango tan bajo como lo era él ¿Cómo podía siquiera considerar sentarse frente al puma?- S-seria irrespetuoso de mi parte señor- Min yoongi sintió a su puma comenzar a agitarse en su interior con suma ternura ante el Omega hámster frente a él, tal vez el chico estaba siguiendo sus más puros instintos y le temía al ser un depredador o tal vez solo se debía a su apellido.

 - Tonterias- hizo un vago gesto con su mano- y si..- esta vez se vio interrumpido el mismo al ver al alfa acercándose hacia ellos, el Omega tembló levemente en su lugar olvidándose de las palabras que iba a decir, sus mejillas se volvieron rojas, Jeon jungkook, el alfa de mirada oscura, venía vestido de manera casual, su cerebro hizo corto circuito al verlo por primera vez con ropa que no fuera un traje de negocios, unos pantalones cómodos y una musculosa blanca dejando libre sus fuertes y musculosos brazos, su cabello estaba mojada por lo que al parecer sería una reciente ducha y en sus pies tenía unas botas normales negras, su rostro serio no dejaba de ser sumamente atractivo aunque no tuviera ninguna expresión, pero sus ojos opacos brillaron al mirar a su Omega.

 - Buenos días Ángel- el apodo hizo que yoongi se volviera aún más rojo mientras sentía el tacto del alfa en una de sus manos y el delicado roce de los belfos ajenos en el dorso de su mano, un gesto tan íntimo que ocasionó que el corazón del Omega se acelerará en su pecho.

 - Buenos días alfa- el hombre de casi dos metros de altura sonrió para él, una sonrisa que movió todos los músculos de su cara haciéndolo lucir más joven de lo que era, el Omega dejó finalmente la bandeja en la mesa y antes de irse con pasos apresurados dio una reverencia que no fue vista por ninguno de los protagonistas que estaban perdidos en su mundo.

- ¿Cómo te encuentras hoy?- jungkook movió su silla hasta que casi no hubo espacio entre ellos y el Omega no pudo estar más alegre aunque trataba de no sonreír como un tonto.

 - Realmente muy inquieto- jungkook frunció su ceño preocupado- mi omega ha estado muy ansioso y tiene demasiada energía el día de hoy.

 -El doctor dijo que sería algo normal en estos días, si te incomoda algo o te sientes mal puedo pasar la cita del doctor para hoy mismo- jungkook llevó una mano a su bolsillo sacando su celular pero antes de teclear algo algo en la pantalla el Omega lo detuvo, la suave y pálida mano del menor sostuvo con delicadeza su muñeca, el alfa volvió a concentrar sus ojos en la mirada dulce y platinada del chico con feromonas sumamente embriagantes que estaban consumiéndolo poco a poco.

 - No debes preocuparte, solo necesito hacer alguna actividad hoy, quemar las energías acumuladas- el Omega dejó ir la muñeca del alfa poco a poco pero antes de alejarse por completo el alfa enredo sus dedos, los pequeños y rosaditos dedos de yoonie entre sus grandes dedos toscos.

 - Si eso eso es lo que deseas, estará bien ángel- yoongi asintió los mechones de cabello ocultando un poco su rostro, así que con su mano libre lo acomodo un poco- Lo que me has comentado en la llamada

 - S-si yo- el Omega comenzó a ruborizarse tímido- escuche entre los omegas que esta era una época muy fructífera así que quisiera poder tener la experiencia de recoger fresas por esta vez, nunca he recogido fresas antes y- el Omega se detuvo congelándose un momento en su lugar- estoy tan emocionado así que lamento si hablo demasiado- se encogió en su sitio, su padre había sido claro con él, los omegas eran los que debían escuchar atentamente a sus alfas, los omegas debían felicitarlos por sus logros pero sobretodo debían ser cortos en sus palabras, un Omega que hablaba de un lado hacia el otro siendo parlanchín perdía su toque y se volvía insípido.

 Jungkook fue consciente de manera inmediata del cambio de humor en su chico de ojos platinados, la duda y inseguridad plasmada en sus ojos, como si alguien le hubiera recordado que estaba mal decir abiertamente sus pensamientos o emociones queriendo reprimirlos para el mismo y callar las dulces palabras que salían de su boca, le recordó a cuando en el comedor yoongi había esperado que lo golpeara, el Omega se había encogido cerrando sus ojos esperando lo peor, él lo sabía, en la asquerosa sociedad en la que vivían los omegas eran reprimidos de maneras poco gratas moldeando sus cerebros a la definición de lo que clásicamente “era un Omega perfecto”

 Los nervios de su puma negro se alertaron de manera vengativa pensando en las formas más desagradables de hacer sufrir al padre de su Omega, no dudaba que algo o todo podía venir de parte de ese tipo.

 - Angel- el simplemente no podía dejar de llamarlo de aquella manera- Me encanta escuchar tu voz y adoraría que compartieras tus pensamientos conmigo- los ojos de yoongi se cristalizaron al escuchar las dulces palabras de su alfa, él realmente tenía miedo de que todo fuera un sueño, los dedos calientes de su alfa seguían jugando con los suyos- ahora, tenemos que recolectar algunas fresas ¿estas listo Omega?- la sonrisa de yoongi fue totalmente genuina no pudo contenerla más, sus pequeños dientes blancos y encía rosada formando una sonrisa de gominola brillante y adorable hizo que el alfa se quedara cautivado una vez más.

 - Por favor si, alfa.

Lamento mucho demorar en actualizar realmente tenía listo un 2/2 pero no hice copia de los capítulos así que se perdieron, me frustre demasiado así que espero actualizar lo más pronto posible, adoro que les esté gustando la historia y amo aun más sus comentarios, gracias por tomarse su tiempo en dejar pequeñas palabras que me incentivan a seguir escribiendo ♡♡♡