"Descarado"

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Lunes, martes, miércoles, jueves, viernes, sábado, domingo (una semana)
Lunes, martes, miércoles, jueves, viernes, los siete días de la semana
Cada hora, cada minuto, cada segundo, sabes que, noche tras noche
Te voy a coger duro los siete días de la semana

Te encanta cuando me meto de lleno
Te ofrezco todo de mí
Te mostraré qué es la devoción
Más profunda que el océano



Sentí como la tela de mi camisa fue rodando hasta caer por mi hombro izquierdo dejándolo al descubierto, mi rostro se sentía caliente porque la manera de besar de Jeon estaba siendo tan desordenada que parecía querer ahogarme, el oxígeno estaba comenzando a faltar así que jadeé en sus labios, un gemido escapó de mi boca cuando su fuerte mano apretó mis muslos.

Fruncí mis cejas, mordiendo su labio logrando que finalmente me soltara, me enfoque en respirar mientras lo miraba molesto.

En ocasiones Tae había dicho que mi mirada era lo suficientemente fuerte y penetrante como para lograr que cualquier alfa se intimidara.

Pero los ojos profundos de Jeon quemando mi piel de manera hambrienta me superaron por creces, su traje ahora estaba arrugado, la corbata había sido deshecha y su camisa estaba removida un poco hacia arriba, el flequillo sobre su frente caía de manera despeinada y sus labios estaban levemente rosas por los besos que habíamos compartidos.

- Jeon.

Sus feromonas estaban totalmente adueñadas de cada espacio de mi piel, solo con sentir su toque picante sobre mí causaba que mi cuerpo entero comenzará a prepararse para recibirlo.

- El gatito mordió mi labio- el alfa llevó su mano a su boca allí había un fino hilo de sangre, al darse cuenta que sangraba sonrió- debes tener más cuidado con los colmillos- sus manos cayeron a cada lado de mi cintura adueñándose de ella.

- ahg- otro gemido escapó de mi boca al sentir su dureza contra mis glúteos, la polla dura y gruesa estaba allí transmitiendo calor- N-no es tu celo...entonces porque estás..tú- cerré mis ojos y los volví a abrir luchando por no cederle mi dominio a mi omega.

- Ustedes los humanos son tan difíciles, él quería inclinarte desde esta mañana en la mesa del comedor y joderte hasta saciarse- su mirada perdiéndose en mi cuerpo, su lengua acarició su colmillo y luego sonrió de lado- Estaba muy de acuerdo en todo aquello, estar dentro de ti gatito es la razón por la que no mato a todos, eres tan bueno y sabes tan bien- se acercó más mi y hundió su rostro en mi clavícula su lengua encantada por la piel alrededor, luego se alejó, una mirada seria en sus ojos de nuevo- pero tenía tantas cosas por hacer, documentos, reuniones, eso puedo esperar siempre.

-no, alfa, no- su mano libre se escabullo entre mis nalgas, la punta de sus dedos presionando en mi entrada para probar cuán mojado estaba- no hagas...- mi entrada se contrajo al sentir allí su mano, las paredes abrriendose y cerrándose alrededor de la punta de sus dedos.

- ¿Estás preocupado por el tiempo, gatito? No deberías, seré puntual para que no estés enojado con el humano- un beso fue dejado en mis labios, un gruñido salió de ellos cuando mi omega estaba comenzando a desesperarse por la excitación- ahora déjame hundir mi cara en ti y probarte.

Saliva goteaba de la comisura de mis labios, mis ojos estaban llorosos y mis uñas dejarían marcas en el asiento del auto, mi cabeza estaba presionada hacia abajo intentando acallar los sollozos de placer porque estaba siendo sobreestimulado en mi parte baja, mi cabello estaba desordenado y desparramado ocultando mi rostro rojo y jadeante.

El Gatito del señor Jeon.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora