Tu Turrito [Hyunlix]

8- Respeto

Él y su grupo revisaban la puerta de entrada, quien entraba y quien salía. Haria eso hasta que encuentre a alguien que capte toda su atención.

—Me jodes—La boca de Changbin se abrió de par en par con el vaso de alcohol en la mano.

Por la puerta cruzaba Felix con su característico cabello negro suelto y una remera cara.

—¿Porque tiene una chomba de Ferrari?—Seungmin se retractó al instante de sus palabras—Nada, nada seguro es la remera más barata que tiene.

—¿Vos lo invistaste Hyun?

—Si—Sus ojos no se despegaban de las tímidas acciones del pelinegro al entrar a la fiesta—Pero igual no creí que iba a venir, mucho menos solo...Que audaz.

Ahora la noche por fin había arrancado para Hyunjin, se levantó de la pared con la intención de buscar al pecoso.

—Ahora esto si que se puso divertido...

Camino haciéndose lugar entre la gente hasta estar al lado del menor.

—Hola...—Hablo al Raz de su oído, eso hizo que el contrario se sobresaltara.

—¡La puta! Me asustaste boludo...

—¿Miedo?

—Digamos que no es exactamente mi ambiente...

—Lo supuse...Che—Llamó su atención—Estas fachero hoy...—Lo miró de reojo esperando alguna reacción.

—Me encantaría poder decir lo mismo de vos...

—Que hijo de puta...—Suspiró y arrastró a Felix con él hasta la cocina donde sobre la mesada había cualquier tipo de bebidas.

—¿Que haces?

—Tomemos algo—Agarró un "vaso" (botella de gaseosa partida al medio) y mezcló alcohol con CocaCola

—Mmm...Tiene pinta de que es un asco...

—Te va a gustar, te juro—El rubio le dio un sorbo y después le ofreció al pecoso quien a el primer tacto con la bebida sintió las invasoras ganas de vomitar.

—Es un asco—Agarró otro vaso sirviéndose una bebida alcohólica según él más agradable.

—Bue...Como sea—Vamos a Bailar pequitas.

—Pero—Las acciones del mayor lo interrumpieron.

Agarró con su mano libre el brazo del contrario y lo llevó a donde todo el mundo meneaba las caderas entre sí.

No, la música no era de su agrado, pero estaba seguro que había algo en la manera en la que Hyunjin se sacudía al escucharla o en el alcohol que lo hacía soportarla.
Y, seguramente también a causa del alcohol, se fue acercando al rubio en pasos precavidos terminando con los cuerpos pegados uno al otro, restregándose entre sí al compás de la música.

Así fue durante un largo rato hasta que alguien pasó, haciendo caer parte de su bebida sobre la chomba de Felix.

—Uy, perdón—Rió y se fue.

—Hijo de puta.

—Tranquilo Pequitas—El rubio lo miró con una sonrisa—Seungmin seguro tiene algo que te quede bien.