Adrenalina • Pablo Gavi

Capítulo 12- Perdóname

Tras estar durante media hora contándoles todo lo que me había pasado con Pablo a mis amigas, lo único que se dignaron a decir fue:

-Que- exclamaron al unísono.

¿En serio? Suspiré.

-¿Qué de qué?- necesitaba que me dijesen qué pensaban. Sabía que me estaban juzgando en sus mentes pero prefería que me lo dijesen a la cara.

-A ver a ver, recapitulemos- empezó Iria- o sea, ¿habíais quedado para ir a compraros ropa juntos, pero él te ha ayudado a estudiar mates?

-Sí.

Obviamente había omitido TODO lo que implicara el contacto físico, como los abrazos, los besos...

-¿Te llevas bien con él ahora?- me preguntó mi otra amiga.

-¿Has visto mi cara al llegar a mi habitación después de pasar dos horas y media con él?- pregunté retóricamente, a lo que ellas asintieron- pues esa cara de mierda es suficiente respuesta a tu pregunta.

-¿Entonces no te llevas bien con él?- insistió. Sabía cómo eran, querían que lo dijese.

-Obviamente no, ¿acaso lo dudabais?- pregunté. A lo que ellas se intercambiaron una mirada cómplice. Claro que lo dudaban. Hasta yo misma lo dudaba. Tócate el coñ...

Levanté una ceja, mirándolas seriamente.

-A ver- intentó justificarse Iria- no es que pensemos que os lleváis bien, pero es que cuando ha ido a tu cuarto, lo hemos visto... ¿cómo te digo? Diferente.

-Claro, y hemos escuchado como te saludaba y como tú le devolvías el saludo llamándole feo, como si estuvieras bromeando con él, ¿me entiendes?- dijo Sonia- y conociéndote, que le hagas una broma es muy raro, le odiabas a muerte, tanto como ni para dirigirle la palabra.

¿Por qué me tenían que conocer tanto? Me iban a pillar bastante rápido.

-No sé a qué os referís- intenté hacerme la tonta.

-A ver- intentó explicarme Iria- que no pensamos que os lleváis genial o que estéis liados ni nada de eso- tragué saliva. Si ellas supieran...- pero que sentimos que os estáis empezando a llevar bien, aunque tú lo niegues.

-También te digo- continuó Sonia- todo el mundo dice que Gavi es majísimo, menos tú. Es decir, es muy raro todo, porque tú has sido la única persona con la que se ha portado como el culo y la única persona a la que ha intentado hacerle la vida imposible. Bueno, a Iria y a mí es que ni nos ha dirigido la palabra, pero ya sabes por qué, porque estamos de tu parte.

-Lo sé, Gavi me tiene la cruz echada- admití.

-No me refiero a eso, tonta- se rio Sonia- me refiero a que capaz está intentando portarse bien contigo porque está arrepentido de todo lo que te ha hecho pasar.

Pues podía ser.

-Exacto- sonrió Iria- oye, pues como Gavi te haga aprobar el examen de mates de ecuaciones que tan mal llevabas... al final me va a caer un poquito mejor. No mucho, pero un poquito.

Me hicieron reír.

La culpa me invadió al no contarles lo del beso y el abrazo (ambos con finales trágicos). Les estaba contando una verdad a medias y cuando saliese a la luz el resto de la verdad no iba a acabar bien.