La música retumbaba a todo volumen dentro de una casa que estaba rodeada de hermosos jardines, específicamente en la habitación de una joven que cantaba desentonadamente "If you want it you got it" junto con su escandalosa prima quien había hecho una entrada dramática bailando exageradamente, mientras simulaba que su mano era un micrófono.
—Ok, definitivamente apestamos para esto. —declaró la mayor, bajando el volumen de la música una vez que la canción terminó.
—Habla por ti Astrid, yo creo que podría ser famosa. —expresó la otra alegre joven. —Pero tú sigue con lo tuyo, zapatero a sus zapatos, o más bien fotógrafa a su cámara.
—Sí, ajá lo que digas... ¿qué se te ofrece Storm? —preguntó la aludida mientras guardaba unas cosas en una maleta.
La chica que se había tirado perezosamente en la cama se levantó rápidamente.
—¡Ah! Vine a preguntar si necesitabas ayuda con tu equipaje.
Astrid miró lo que recién había guardado en la maleta y pensó un poco antes de responder.
—No, en realidad no, pero si tuvieras un calmante... —expresó con una sonrisita nerviosa.
—Tú tranquila. —sonrió Storm al verla. —No puedo creer que ya sea mañana. ¡Te vas a casar! —expresó emocionada. —¿Qué se siente?
La rubia suspiró, mientras guardaba otra prenda en la maleta.
—Ay, pues... ¿qué quieres que te diga? Estoy emocionada, nerviosa como puedes apreciar...—se señaló.
—¿Dudas? —insinuó la menor sonriente.
—¡No! Claro que no, amo a Hendrick y mucho, y sí, sé que es muy raro que yo me exprese así de alguien, pero realmente estoy feliz, jamás pensé que podría llegar a sentir algo así por alguien, ya sabes, esas cosas cursis de las que antes me quejaba.
—Aww... eso es muy lindo, aunque... ¿Por qué no se aparecido el susodicho? Lleva días sin venir a la casa.
—Bueno, acordamos no vernos hasta el día de la boda, ya sabes por las tradiciones y todas esas cosas. además de que él se está ocupando de unas cosas y yo de otras.
—Sí, claro... no vaya a andar por ahí de infiel. —bromeó Storm, ganándose que Astrid le diera un almohadazo
—No digas tonterías, como te dije está ultimando algunas cosas para la boda, yo, por cierto ya terminé con lo mío, lo único que falta es terminar de hacer mi equipaje para la... —se sonrojó. —La luna de miel. —musitó en voz baja.
—Ajá...— se burló Storm, viéndola con picardía. —Tu esperada luna de miel y ¡¿En serio te vas a llevar estos calzones?! ¡Son mata pasiones! —exclamó mientras sacaba una de las prendas de la maleta.
Astrid se la arrebató y le asestó otro golpe en la cabeza con la prenda.
—Ya... déjame, son mis gustos. —reprendió gruñona.
—Sí, como sea. Da igual, al final va a terminar quitándotela.
Astrid se enrojeció como un farolito navideño ante semejante comentario.
—¡Que penosa y puritana eres Astrid! —Se revolcó Storm de la risa, dando rodadas en la cama.
—Bueno a diferencia de ti, querida prima, que ya lo experimentaste yo... bueno yo...—las mejillas de Astrid nuevamente se encendieron.
—Si ya lo sé... eres la última novia virgen. —expresó la aludida rodando los ojos.
—No tiene nada de malo. Siempre quise que la primera persona que me tocara fuera mi marido.
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VOLVER A EMPEZAR
FanfictionDespués de sufrir una gran humillación, Astrid tratará de comenzar de nuevo retomando su profesión de fotógrafa... aceptando una invitación así como un nuevo trabajo. AU Moderno. Dragones Humanos. Drama, Humor, Romance. (NUEVA EDICIÓN)