Capítulo 13

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La hora se aproximaba y la princesa estaba bastante nerviosa. Miró su reflejo en el espejo mientras una dama ajustaba su hermoso vestido rojo con detalles en dorado. Su pelo se encontraba suelto con dos trenzas en la parte superior. Sus cabellos ondulados caían como cascada por sobre su vestido. Lo tenía bastante largo, tanto así que sobrepasaba su cintura. En sus manos y cuello traía una brillante joyería dorada. Nunca había visto esas piedras preciosas y las admiraba por su brillo y belleza. Incluso sus pies estaban bien decorados con hermosos zapatos haciendo juego con el resto. Sonrió ante esa imagen. Se sentía... linda.

- Ya está princesa- dijo la sirvienta para posicionarse delante de ella- Se encuentra adorable- dijo.

El resto de las damas se unió al cumplido y todas elogiaron a la princesa haciendo que ella se sonrojara.

Rhaenyra apareció a la escena y miró con brillos en sus ojos ante la luz que la princesa irradiaba.

- Estás hermosa, Anneliesse.

- Gracias, Rhaenyra.

- ¿Estás lista?

- Eso creo.

- Todo saldrá bien. Ya verás- le tendió la mano a lo que ella le correspondió.

La princesa caminaba todavía con un poco de dificultad por los pasillos.

- ¿Puedes?

- Sí. Sólo que me molesta un poco.

- Ya curará. Caminemos despacio, entonces.

Del otro lado, la familia Velaryon se encontraba reunida esperando la llegada de la princesa.

- Así que has estado cuidando de la niña todo este tiempo- pronuncio Rhaenys mientras veía con seriedad hacia Daemon que se encontraba junto a sus hijas.

- Sí, lo he hecho. De vez en cuando iba hacia Kingslanding para visitarla.

- Con razón Laena mencionó que te ibas seguido de viaje- pronunció y Daemon pudo sentir con qué intenciones lo decía.

- Lo hice bajo las órdenes de mi hermano.

- Aún así la pequeña pensó que eras su padre- le dijo Corlys y las gemelas se voltearon a verlo.

- Así es. Yo era la única persona que conocía y me tomó como su padre.

- Me pregunto qué pensará ahora- volvió a decir Rhaenys haciendo que el príncipe cerrara sus puños para contenerse.

Los hermanos Velaryon esperaban junto a su padre, inquietos a su madre que traería a una misteriosa niña al lugar. Un nuevo familiar. Su supuesta tía estaría ahí en unos minutos.

Rhaenyra llegó con la princesa y se detuvieron detrás de la puerta donde se encontraban dos guardias.

Anneliesse comenzó a agitarse y sus manos temblaron. La mayor lo notó y se inclinó para calmarla.

- Escúchame, Anneliesse. Las personas que estás por ver son tu familia. Debes presentarte como la hija de Viserys como lo ensayamos.

- No puedo. No estoy lista.

Rhaenyra tomó las manos de la pequeña acariciándolas.

- Sí que lo estás. Eres una niña muy valiente y lo has demostrado al llegar aquí. Estas son sólo cordialidades, después todo será más fácil cuando los conozcas bien.

- ¿Y si no me aceptan?

- Lo harán. No sabes lo entusiasmado que estaban para conocer a la hermosa princesa que vino volando en un enorme y viejo dragón. Además, están conmovidos con tu historia y quieren enseñarte varias cosas nuevas que jamás habías conocido.

La Princesa de Pozo Dragón- Temporada 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora