Madison West es hasta donde ella sabe una chica normal quizas demasiado obstinada y orgullosa que esta acostumbra a vivir una vida completamente normal con problemas y situaciones que a cualquiera se le puede presentar, una chica acostumbrada a supe...
Termine en el consultorio de la doctora York a la diez de la mañana porque tanto Robert como mi tía estaban completamente convencidos de que uno de los dos tenía razón, por un lado Robert decía que todo había sido un "virus de un día" y por otro lado mi tía aseguraba que algo estaba mal conmigo así que Robert hizo su magia y termine siendo atendida en hospital donde él trabaja (si Robert es un "guapo" doctor). Tome asiento en medio de los dos mientras trataba de concentrarme en algo interesante. . . pero no había nada todo en el lugar era igual a lo que verías en cualquier consultorio.
La doctora York entro en la habitación aun mirando el papel que tenía en la mano, los tres la observamos tomar asiento tan despreocupadamente mientras que nosotros moriríamos por escuchar lo que tenía que decir.
- Ok. . . he mirado lo resultados de tus exámenes por más de quince minutos pero. . .- hizo una pausa increíblemente dramática que hizo que quisiera gritarle un "¡habla de una vez idiota!- ¡nada! Absolutamente nada, de hecho, Maddi querida debo decir que gozas de una increíble salud- término mientras acomodaba sus papeles sobre el escritorio de roble oscuro.
- Entonces ¿todo está bien? ¿ningún indicio de nada?- pregunto mi tía aún muy ansiosa
- ¡correcto Amelia! Tu preciosa sobrina está sana por lo que – la doctora señalo a Robert- él tiene razón solo fue un virus de un día-
Robert sonrió satisfecho y a las vez aliviado mientras que mi tía solo asintió muy pensativa al respecto, ¿yo? bueno estaba feliz porque no tenía ningún problema ni tenía que tomar ningún medicamento y eso ya era una razón para celebrar.
- Lo vez cariño no hay nada de qué preocuparse este tipo de cosas suele suceder- dijo Robert tratando de calmar a mi tía quien aun permanecía preocupada.
- Si hasta a los más fuertes- dije mientras hacía comillas con mis dedos- les puede dar un resfriado tía- zanje mientras los tres salíamos del consultorio con los resultados de mi examen.
Amelia suspiro derrotada y sonrió, mientras que seguía hablando con Robert, casualmente gire mi rostro y note que un hombre vestido de negro había entrado en el consultorio de la doctora York, esa persona se me hacía extrañamente sospechosa como si algo dentro de mi tuviera un mal presentimiento, esa corazonada me hacía sentir demasiado incomoda y con deseos de ir y descubrir que era lo que ese tipo quería. Sin embargo deseche la idea porque sinceramente es algo completamente estúpido, luego de unos minutos mi tía y yo nos fuimos del hospital pues ella debía trabajar y dado a que ya era muy tarde hoy tendría que faltar a clase, note que aun había tiempo para ir a la práctica de futbol pero mi tía se negó rotundamente a llevarme pues según ella yo debía descansar.
- Cariño sé que tú y Robert están convencidos de que no pasa nada malo, pero yo quiero que al menos hoy descanses ¿sí?- dijo mientras su vista permanecía fija en el camino.
Cinco meses después de que naciera mama había enfermado, de la noche a la mañana ella se había descompensado tanto que casi no podía mantenerse de pie, pero según lo cuenta mi tía, se negó a tomarse los descansos que el doctor le había indicado y al poco tiempo murió. Yo no tuve la oportunidad de conocer a mi madre y todo lo que se de ella es porque mi tía me lo ha contado por lo que entiendo perfectamente su preocupación.
- Está bien me quedare en casa tía- dije sin más mientras veía por la ventana del auto.
Hoy era martes, el dichoso día de la cita de Peter y Lea y yo me había quedado todo el día en casa, incluso mi tía se había encargado de avisar a mi jefa que no iría a trabajar porque estaba supuestamente enferma , pero estaba demasiado aburrida por lo que cerca de las cuatros decidí dar un paseo, saliendo del apartamento me encontré con la mama de Peter quien también se dirigía hacia el parque al igual que yo así que fuimos juntas, por todo el camino me hablo acerca de lo emocionado y nervioso que había estado Peter y de cuanto había planeado la tan esperada cita. Algo no andaba bien y no solo era el hecho de que literalmente estaba molesta por lo de la "dichosa cita" aunado a eso volví a tener el presentimiento de que alguien me vigilaba, no sé realmente como pero sentía que todos mis sentidos estaban completamente alerta, algo en mi interior me gritaba "¡peligro!" me hacía estar como al asecho, creí estar paranoica, que quizás la fiebre me había no lo sé ¿quemado una neurona? Así que mientras me estiraba para comenzar a trotar tome una respiración profunda y decidí que por un momento le iba hacer caso a estos extraños instintos que por alguna razón se habían ¿despertado? Quién sabe. . .
Cerré mis ojos y me deje llevar, entonces tuve una sensación de deja vu como si ya lo hubiera hecho esto antes, cuando abrí mis ojos mire directamente hacia la izquierda y a lo lejos pude notar una sombra detrás de un árbol, fije mi objetivo y corrí disimuladamente en dirección hacia esa persona.
Estaba dispuesta a luchar si era necesario contra quien se había atrevido a fastidiarme y hacerme sentir tan extraña, por supuesto, también quería desahogarme de la frustración que sentía hacia lo de Peter (aunque está más que claro que la culpable de eso soy yo por ser una cobarde y nunca hablarle de mis sentimiento. . .) ¡concentrarte West! Apartando esos patéticos pensamientos me centre en buscar a la persona pero mágicamente había desaparecido mire a mi alrededor de nuevo disimulando porque habían personas demasiado cerca y no quería llamar mucho la atención, volví a tomar una respiración profunda y fue cuando un extraño y peculiar aroma llego a mi nariz era como una mezcla de pinos y. . . ¿tierra mojada? Básicamente era como un rastro, me deje guiar por el aroma hasta que encontré escondido entre las sombras al mismo tipo que había entrado en el consultorio solo que estaba vez supe perfectamente quien era.
Era el mismo tipo que se había quedado boquiabierto cuando me vio en el restaurant la última vez.
Extrañamente estaba de espaldas, agachado ocultándose detrás de unos arbustos mirando de un lado a otro como si tratara de encontrar algo o este caso a alguien, por lo que puse mi mano sobre su hombre y dije - ¡te atrape!- sonriendo triunfal.
El hombre se sobre salto y perdió el equilibrio cayendo hacia atrás golpeándose el trasero contra el suelo fue entonces cuando alzo su rostro y me miro completamente aterrorizado de que yo estuviera a sus espaldas, yo me incline un poco y fruncí el ceño.
- ¿Quién demonios eres? Y ¿Por qué me estas persiguiendo?- pregunte molesta.
- ¿Cómo tú. . .?-
Antes de siquiera dejarlo hablar tape su boca con mi mano y negué con la cabeza – ah no, no, no amigo quien hace las preguntas aquí – con la otra mano señale mi rostro – soy yo.
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Jo- Hola soy ladyhartz te apuesto una entrada epica que hoy es ¡Lunes! (disculpen tuve un fin de semana de maraton de hola soy german jijiji) eeen fin ¡Feliz Lunes! y les traje un nuevo cap, dama y caballeros. . . o. . . mejor señores disfrutenlo no se olviden de votar y compartir esta linda historias lo quiero. . .
les mando un abrazo psicologico y le deso muuuuchaa suerte en su incio de semana ¡Bye!
