Mas alla del Jardin

Capítulo 26: "Los juegos del Alfa" parte 1.

- Aun eres bastante lenta – me dijo Garrett – necesitas mejorar. . . ¿te siente bien?

Mi corazón latía velozmente y mi respiración estaba acelerada casi al punto de hiperventilarme, mi estómago dolía y lo sentía revuelto de pronto sentí como si las fuerzas abandonaran mi cuerpo y me desplome en el piso cayendo sobre mi trasero, algo estaba mal conmigo y hasta hace unos momentos estaba bien ¡¿Qué está pasando?! – no lo sé. . . yo estaba bien - respondí agitada.

Garrett corrió hacia mí y me ayudo a levantarme poco a poco, realmente me estaba sintiendo enferma, ambos caminábamos paso a paso hasta llegar de nuevo a su casa pues habíamos salido al jardín a entrenar, me senté en uno de los taburetes de las cocina sintiéndome mareada, Garrett me acerco de nuevo ese frasquito blanco que olía demasiado dulce, el sabor demasiado empalagoso pero aun así tuve que tomarlo a regañadientes porque de alguna razón esa cosa me hacía sentir bien.

- ¿Qué es esto?- pregunte poniendo mi cabeza sobre el mármol de la isla.

- Se llama elixir de lirio blanco es una especie de medicina natural que nos ayuda a lobos a recuperar energía y también no hace regenerarnos rápido- explico- solo lo utilizamos en caso de emergencia cuando no podemos recuperarnos por si solos.

Alce mis cejas sorprendida creí que los lobos eran seres completamente invencibles pero al parecer si tenían su debilidad otra duda acerca de eso surgió - ¿Cuál es la debilidad de un lobo? – pregunte levantando mi rostro.

- Pues es simple la plata-

- La. . . ¿plata?- incline mi rostro sin entender.

- Cualquier objeto de que este hecho de plata ya sea un cuchillo, una espada, navajas o balas cualquier cosa que contenga este mineral será capaz de herirnos en gran manera hasta matarnos- continuo explicando mientras me servía un poco de agua - pero alguien descubrió que el elixir del lirio blanco cura ese tipo de heridas si se administrado debidamente

Tome mi vaso de agua tranquilamente hasta que escuché la animada voz de Maverick desde la entrada se suponía que estaba buscando a Daya para así poder reunirnos y comenzar a hacer estrategias para el juego de los alfas, seguía sintiéndome algo mareada pero ya estaba mejor me sentía emocionada de poder sacar todo mi lado competitivo.

- ¡Ya estamos en casa!- anuncio triunfal Maverick, sus ojos brillaban llenos de emoción.

- ¿podrías dejar de hacer tanto escándalo?- le refuto Daya- oh hola madi ¿estás bien?

Salude a Daya agitando mi mano levemente y sonriendo de medio lado – digamos que el entrenamiento me de OUT – le respondí.

Mi amiga inclino su cabeza hacia un lado sin poder entender y yo solo le devolví una mirada cargada de cansancio en plan "si yo tampoco sé que me pasa" a lo que Daya respondió – deberíamos llevarte con Simon. . .-

- Ella está bien- refuto Garrett desde el otro lado de la isla de la cocina – solo debe descansar- afirmo y se fue a paso tranquilo quizás a encerrarse en su oficina, aunque. . . no sin antes darle una mirada seria y llena de muchas a Advertencias a Daya.

- Claaaro Tío Garrett- le respondió irónicamente entornando los ojos como diciendo "más tarde hablaremos de esto".

Maverick se situó a mi lado y ambos nos quedamos en silencio procesando la situación que se había tornado algo tensa por la forma en que esos dos se habían tratado ¿acaso Garrett ocultaba algo? Eso lo descubriría luego, los dos hermanos me afirmaron que lo mejor para comenzar hacer las estrategias era observar el terreno por lo cual los tres nos trasladamos a pie hasta un valle que se encontraba varios kilómetros lejos del jardín, donde se realizarían los juegos. Estando allí nos encontramos con Amberly y Jack quien resultó ser un chiquillo de catorce años muy adorable y también malhumorado, este pelirrojo de ojos verdes y piel algo bronceada realmente estaba dispuesto hacer lo que fuera para no ser tratado como un niño. Maverick hizo que jugáramos una especie de partido Futbol americano mientras explicaba alguna de sus posibles estrategias para el juego, solo que en medio de una de las jugadas escuchamos una voz masculina algo ronca demasiado sinuosa y burlona para mi gusto. Todos buscamos la fuente de esa voz que era nada más y nada menos que Axel. . .