SANGRE DEL DRAGON ( Aemond Targaryen )

12

Daella corrió en busca de los dragones y se sorprendió al ver a Vhagar sobrevolar el castillo.

Caraxes , Syrax, Sunfire , Dreamfire , Arrax y Vermax estaban frente a ella y rápidamente abrazo a su padre con mucha fuerza.

—Los extrañe muchísimo — murmuro.

Vhagar aterrizo y Daemon rodo los ojos.

—Los demás estarán aquí en unas horas —Rhaenyra le dedico una mirada asesina cuando vio a Aemond acercarse.

—Bien —tomó la mano de su padre —Vengan conmigo.

Les dio un pequeño recorrido a la familia y después pasaron al salón para la cena. De vez en cuando intercambiaba miradas con Aemond y esta le sonreía.

Todos se levantaron cuando anunciaron al rey y la felicidad se fue en picada cuando vio a la pelinegra que venía con ellos.

—Elarys — murmuro la princesa.

—Mi princesa — hizo una reverencia y se sento junto a ella.

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Daella cepillaba su cabello mientras se miraba al espejo. La puerta de su habitación se abrió y esta no le tomó importancia. Se dirigio a cerrarla, pero un hombre mucho más alto que ella se abalanzó sobre ella tomandola por el cuello. Daella chilló del miedo, pero no suficiente para que la escucharan.

El hombre se dirigio con ella a la cama listo para violarla. Daella le dio una patada en la entrepierna y corrió hacia la salida, pero este la tomó de los tobillos.

— ¡ Ayuda ! — grito con desesperación.

El hombre la tiro en la cama y se subió sobre ella.

De la nada una espada atravesó su pecho y el hombre cayó sobre ella sin vida.

Aemond estaba ahí con su espada. Daella se saco al hombre de encima y lo abrazo soltando las lágrimas.

—No llores, esta bien , estas a salvo.

—El iba a violarme....... — sollozo bajo contra su pecho.

Rhaenyra entró a la habitación y supo que su plan había salido a la perfección. Daella se encamino a la habitación de Cregan y abrió la puerta de un golpe.

—¿ Estas bien ? — pregunto el hombre.

— ¿¡ Bien !? — le grito — ¡ Un hombre intento violarme y matarme en tu propio castillo y tu me preguntas semejante estupidez !

—Debe haber una equivocacion, yo......

—No hay ninguna equivocacion —Aemond se acerco a ellos —Uno de tus hombres intento violar a mi prima y de no ser por mi. Ella estaría muerta.

—Me disculpo — murmuro el hombre.

—Sácame de este lugar , Aemond — murmuro la princesa y este asintió.

—Daella.......

—Ya la escuchaste — advirtió Aemond.

El pelinegro acepto resignado y dejo que se fueran.

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Horas más tarde la princesa decidió ir a la habitación de su primo, pero lo que se encontró la partió en mil pedazos. Aemond estaba teniendo sexo con Elarys cuando ella los vio.

Daella salió de aquella habitación tragandose las lágrimas y la decepción. Ella había hecho un plan para huir y casarse con él y este le pagaba de una manera horrible. Corrió a la habitación de Aegon y lo encontró bebiendo vino.