22

20.9K 1.6K 180
                                    

-¡Amor ya es tarde date prisa!

-¡¿Puedes subir ayudarme a poner mis sandalias por favor?!

Era lo que se escuchaba en aquella casa, las semanas habían pasado bastante rápido y los Jeon tenían nuevamente la cita para ver a su brujita.

Taehyung había iniciado unas clases en las que Jungkook trataba de sacar tiempo y acompañarlo ya que debían ir en pareja.

El cumpleaños de Jungkook había pasado y con ello una celebración ya que también celebraban que había ocupado por fin el puesto como sucesor de su padre en la gran empresa Jeon.

Jungkook trataba de sacar tiempo pues el trabajo, las clases con Tae lo tenían muy agotado, sobre todo porqué no quería perderse ni un momento sobre el embarazo de su esposo.

Jungkook subió hasta la habitación que compartía con Tae para ayudarlo a terminar de vestirse, la pancita estaba bastante grande y se le dificultaba, sin mencionar que el primer semestre de la universidad ya había culminado y ahora el embarazado tenía que estudiar desde casa.

-¿En qué te ayudo mi amor? - Jungkook entraba a la habitación.

-No puedo alcanzar mis piecitos - Hizó un puchero.

-Ya te ayudo mi vida - Se acercó a la cama.

-¿Quiéres qué te coloque un poco de crema amor? /¿Me puedes colocar un poco de crema Gukie? - Hablaron los dos a la vez.

-Conozco tan bien a mi esposo - Le dió un beso en la frente - Ya voy por la crema y vuelvo.

-Esta bien Gukie - Sonrió.

Jungkook sonrió y empezó a caminar hasta el mueble en dónde estaba la crrma que últimamente le colocaba mucho a su esposo en sus pies.

Una vez la tuvo en sus manos volvió hasta la cama en donde vió y escuchó a su esposo tararear una canción mientras movía sus piecitos algo hinchados.

-A ver mi amor - Se arrodillo- ¿Duelen?

-Chi un poquito - Le hizó un tierno puchero.

Jungkook levantó un poco los pies de su esposo hasta sus labios para dejar varios y pequeños besitos en el lugar.

-Te está costando mucho aquélla noche que recordamos viejos tiempos - Ambos empezaron a reír.

-Estoy seguro que todo valdrá la pena cuando tengamos a la pequeña Somin en nuestros brazos - Asintió.

-Ni que lo menciones cielo, ya quiero tenerla en mis brazos, cantarle, mimarla, darle muchos cariñitos, desvelarme porqué no pueda dormir - Jeon le daba masajes a Tae en sus pies.

-Sin duda estás emocionado - Tae se sentía feliz - Serás un buen papá, Gukie.

-Espero ser un buen papá y esposo - Ahora le colocaba las sandalias a Tae - ¿Amor en dónde está tu anillo de matrimonio?

-Es que mis dedos se están hinchando y me aprieta un poco- Sus ojos se llenaron de lágrimas -¿Estás molesto por eso?

-No mi amor para nada - Jeon trato calmarlo para que no llorara- Solo pregunte, no llores leoncito que no me gusta.

-Es-Está bien Gukie - asintió.

-Vámonos amor, se nos hace un poco tarde, también quiero ir a comprar ropa para ti y para mi brujita - Lo ayudo a levantarse - Eres hermoso, mi esposo es muy hermoso.

-¿No estoy muy panzón?

- No mi cielo, eres hermoso, a veces te veo y me pregunto ¿Qué tan bueno fuí en mi vida pasada? - Jeon comenzó a reír al ver las mejillas rojas de su esposo - Amo despertar a tu lado todos los días, acariciar tu vientre, ver tu cuerpo, amo todo de ti.

Aquélla Noche          KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora