Te cansas. Sí.
Simplemente te cansas.Miras afuera y no encuentras algo que te pueda interesar.
Es eso... ¡Pierdes todo interés!Caminas.
Escudriñas las marañas que se entrelazan en los círculos sociales.
Sientes que perteneces pero, al final, algo muy dentro te hace recapacitar, "¿en verdad soy de aquí?"Buscas en lo profundo de tu zona segura esa respuesta, esa contestación tan necesaria pero tan esquiva a la pregunta retórica que te planteas en medio de esa chispa de raciocínio obcecado.
¡Sabes la respuesta pero te niegas a aceptar que todo al final es simple!
Tan simple como que te cansas... Sí.
Simplemente te cansas.