Si usted siente que hay engaño en mis palabras,
Hágamelo saber,
Que yo intentaré darle motivos y demostrarle que no es mi deseo engañarla.
Si, tal vez, percibe que no estoy siendo honesto,
La invito para que camine conmigo por una jornada,
Se dará cuenta que aunque mis quehaceres cotidianos me impiden verla a diario, no encuentro más placer en otro sitio que no sea a su lado.
Hábleme, por favor, cuénteme lo que siente.
Expréseme su disgusto, manifiésteme sus sentimientos,
Que yo estoy acá para resolver sus dudas, no para generarle tristezas y desasosiegos.
Y comprenderá que los miedos que siente fácilmente pueden ser borrados,
Que es un regalo del universo el que usted y yo estemos enamorados.