Tony se sentía bastante emocionado, al fin Steve saldría con él a una fiesta en la que si iban a estar sus amigos.
Poniéndose ropa cómoda, pans holgados y una sencilla playera, salió del cuarto y vio a Steve sentado en el sillón esperándolo.En cuanto Steve lo vió, hizo una mueca irritada.
–Vamos, rápido. Terminemos con esto cuanto antes.
Tony se sintió mal al oírle decir eso de una forma tan fastidiada.
–Es broma tontito, es broma. –dijo Steve cambiando su ceño enojado a una sonrisa graciosa.
Pero Tony no lo sintió como una broma, y aún así, no dijo nada. No quería arruinar la noche. Sin embargo, durante todo el camino notó que Steve estaba tenso, ¿estaría preocupado por al fin presentarse a sus amigos?
–Oye –llamó Tony tratando de tomar su mano–, todo saldrá bien...
Pero Steve sólo atinó a alejar bruscamente su mano de él mientras gritaba–. ¡Lo se!, no me repitas eso, carajo.
Y Tony guardo silencio.
Al llegar, antes de entrar, Steve suspiró cansado y lo detuvo.
–Lo siento mucho, no quería reaccionar así –se disculpó mirando con ojos culpables a Tony–, solo que estoy nervioso. Porque en verdad eres muy especial para mi y no quiero arruinarlo.
Tony asintió. Y lo perdonó.
Ignorando esa sensación de malestar que iba surgiendo en su pecho conforme avanzaban al local.
–Vamos a hacerlo –susurro Steve a nada de entrar mientras le daba un apretón a su mano–. Y no lo olvides, en verdad te amo Tony.
Tony volvió a asentir y no reprochó nada al recibir un beso de su novio.
Al entrar al lugar, un mar de gente bailando los recibió, la música sonaba a todo volumen y el típico aroma a alcohol inundo las fosas nasales de Tony, quien tomando la mano de Steve se encaminó a buscar a sus amigos. Ellos ya los esperaban en una mesa, donde cada uno ya tenía una bebida mientras disfrutaban y reían.
–¡Chicos! –gritó Tony emocionado, lanzándose a ellos para darles un abrazo.
–¡Tony! –Pepper sonreía en grande–. ¡Viniste!
Rhodey a su lado cruzó su brazo sobre sus hombros y lo atrajo a él en un gesto cariñoso–. ¿Dónde andabas amigo?, te nos habías desaparecido.
–Bueno –Tony les sonrió aún más cuando, jalando de la mano a Steve lo puso frente a ellos–, estaba pasando tiempo con Steve.
Él rubio levantó la mano a modo de saludo mientras les daba una sonrisa amable.
–Hola, mucho gusto.
Uno a uno se fueron presentando, a excepción de Pepper quien ya había tenido un encuentro con él. Steve los saludaba a todos con una gran sonrisa. Y Tony no podía sentirse más que feliz, su corazón latía con emoción al ver a Steve sonriendo y charlando agradablemente con todos sus amigos.
Siendo ese chico atento y amable del que se enamoró.
Tony no podía imaginarse una vida sin él, simplemente no.
–¡Tony!, ¡vamos a bailar!, como en los viejos tiempos. –gritó su amiga pelirroja a través del ruido.
El castaño asintió con un brillo travieso en los ojos al recordar viejos momentos.
A su lado, Steve lo jaló discretamente de la mano–. Tony...
–Steve, ¡vamos!, baila conmigo. –dijo Tony muy contento.
–No me gusta bailar –contestó Steve viéndolo seriamente–, me quedare aquí, y creo que tú deberías hacer lo mismo.
Sin embargo, Tony ya no logró escucharlo del todo debido a que ya había sido arrastrado por su amiga al centro de la pista. Rhodey, quien había puesto atención a la reacción de Steve, tenía el ceño fruncido, y ante esto, el rubio sonrió lo más dulcemente posible.
Mientras tanto, en la pista Tony se sentía feliz moviéndose, bailó y bailó, contoneando las caderas al ritmo de la música, cantando a todo pulmón y saltando hasta no sentir los pies.
Se sintió feliz, muy feliz.
Un chico de cerca, con intensiones divertidas se fue acercando y Tony empezó a bailar y saltar junto a él la canción que sonaba de fondo, Pepper los acompañaba cantando y bailando también.
Todo estaba bien.
Hasta que sintió un apretón en su hombro.
–Ya vámonos. –dijo Steve en voz alta al oído del castaño.
–¿Qué? –Tony no entendía por qué Steve le pedía eso–. Pero si llegamos hace poco y yo...
–Dije, vámonos. –le repitió Steve apretándolo más.
Tony no entendía, parecía que Steve estaba teniendo una buena charla con sus amigos y él se la estaba pasando muy bien, ¿por qué ahora quería irse?
Tony volvió a replicar–. Pero...
Steve lo hizo callar dándole un apretón más fuerte que le hizo cerrar los ojos debido al dolor.
El rubio lo miraba seriamente.–No me hagas repetirlo, Tony.
Él castaño asintió rápidamente y bajó la mirada, le hizo señas a Pepper y la jaló con sus otros amigos para despedirse.
–Nosotros... debemos irnos ya.
Happy, confundido preguntó–. ¿Tan pronto?
–Si, es que...
–Nos surgió algo. –interrumpió Steve con prisa–. Lo siento mucho, en serio. Pero déjenme decirles que ustedes son grandes amigos y fue un verdadero gusto conocerlos.
–Si, igualmente... –respondió Pepper sintiendo otra vez el misma sentimiento de alerta.
Algo no estaba bien y Steve no le daba buena espina.
Pero sin decir nada más, ella y los demás se despidieron de Tony, para luego ver como éste se marchaba con ese rubio que no les causó ninguna confianza.
Fue en el camino, cuando Tony, bastante confundido por la actitud de su novio, se preguntó internamente:
¿Qué hice mal?
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Te Amo Tony
FanfictionPara Tony, Steve es ese príncipe azul con el que tanto había soñado. Pero Tony lo ama con tanta locura que termina ignorando lo que en realidad sucede a su alrededor. Ignora quien en verdad es Steve... Y la forma tan tóxica en la que se va desenvol...