━ 𝐆𝐄𝐍𝐒𝐇𝐈𝐍 𝐒𝐂𝐄𝐍𝐀𝐑𝐈𝐎𝐒 /𝐆𝐄𝐍𝐒𝐇𝐈𝐍 𝐈𝐌𝐏𝐀𝐂𝐓

━222 𝗖𝗔𝗥 𝗦𝗘𝗫

Follando en el auto.

𝗔𝗟-𝗛𝗔𝗜𝗧𝗛𝗔𝗠 !

tus dedos se entrelazaron mientras al-haitham te sentaba en su regazo. Aunque el coche no era el más pequeño, al principio era incómodo, ya que necesitabas algo de tiempo para adaptarte y encontrar un lugar que fuera agradable para los dos. Sus ojos eran suplicantes, llenos de lujuria, apenas capaz de quitarte las manos de encima mientras te ayudaba a deshacerte de la camisa, tirando de la falda hasta la cintura.

al-haitham reajustó su asiento para que prácticamente pudieras acostarte encima de él mientras tus dedos recorrían su cuerpo, desabrochando su cinturón para liberar su pene semi erecto. Sentiste sus músculos tensarse mientras deslizabas los dedos en silencio por su caja torácica, los mechones de su cabello ocultaban su rostro cuando usabas la otra mano para apartarlos.

─Acércate. ─la voz de al-haitham era ronca, observándote a través de sus ojos entrecerrados mientras lo complacías, colocando un beso en sus labios. Profundizó el beso, su lengua trazó la tuya mientras te levantaba ligeramente, apretando perezosamente su polla con el puño antes de ayudarte a sentarte. Al-haitham se permitió un breve suspiro de alivio, echando la cabeza hacia atrás mientras movías tus caderas hacia él, gimiendo de placer. Tus dedos se apretaron en el asiento del auto mientras usabas la fuerza acumulada para embutirte más rápido en él, adorando nada más que ver a tu novio convertirse en un pequeño desastre quejumbroso.

𝗛𝗘𝗜𝗭𝗢𝗨 !

heizou buscó a tientas su cinturón con anticipación, luchando por esperar más mientras te deshacías de tu ropa también, arrojándola hacia el asiento trasero. ─¿Estás seguro de que quieres hacerlo aquí, hay más espacio en la parte de atrás?─ Preguntó con curiosidad, frotando sus manos sobre sus hombros expuestos. ─Te necesito ahora. ─heizou te instó, colocando su agarre en la carne de tu trasero para apretar la piel que se derramó entre sus dedos.

no eras capaz de resistir sus ojos que siempre lograban halagarte, las mejillas alzándose de calor. Heizou atacó tu cuello a continuación, el volante empujó ligeramente tu espalda mientras te recostabas en su abrazo para que el incómodo empujón desapareciera. ─¿mejor? ─Heizou preguntó descaradamente, sabiendo bien la respuesta ya mientras frotabas tus pliegues húmedos en su eje, cubriéndolo completamente. Captaste un gemido en tu garganta cuando te empujó hacia abajo, agregando más presión a tu molienda.

heizou echó la cabeza hacia atrás con un empujón particularmente fuerte, su nuez de Adán a la vista mientras tragaba, riéndose. ─Joder, siéntate en mi polla bebé. ─realmente no podía soportar más el dolor en la ingle, apenas podía pasar un minuto más sin sentir que tus paredes se apretaban contra su cintura. Te levantaste ligeramente, solo un poco para no golpearte la cabeza mientras lo deslizabas, tu coño se abrió y lo tomó por completo. ─Mierda. ─tus paredes se contrajeron cuando sus venas rozaron tus sensibles paredes gomosas, hundiéndose más hasta que finalmente estuvo completamente envuelto en ti.

𝗗𝗜𝗟𝗨𝗖 !

Te subiste al asiento trasero mientras Diluc te seguía justo detrás de ti, hurgando en su cinturón y bajando la cremallera. Procediste a empujar sus pantalones y calzoncillos hasta las rodillas, subiendo a su regazo para montarlo a horcajadas. ─No puedo creer que estemos haciendo esto. ─la lujuria en su voz era evidente, eclipsando la leve preocupación de que alguien los viera a ambos en el auto.

apenas podías percibir nada cuando Diluc de repente enlazó sus brazos alrededor de tu cintura para acostarte, él ahora flotando sobre ti. Era difícil moverse así, sus cuerpos presionados juntos mientras envolvían sus piernas alrededor de su cuerpo, clavando su talón en su espalda para mantenerlo allí. Diluc siseó al hundirse en tu apretado coño, una de sus manos sobre tu cabeza para que no te lastimaras.

Hacía calor en el auto, los mechones de cabello de Diluc comenzaron a pegarse en su frente mientras su maquillaje estaba ligeramente corrido, pero a ninguno de ustedes parecía importarle, amamantando y plegándose entre sí sin un solo cuidado en el mundo. Los hombros tensos de Diluc se relajaron bajo tus firmes toques, su respiración se transformó en jadeos apretados mientras aceleraba su velocidad, los ruidos pecaminosos de tu juego llenando el auto. ─te sientes increíble.─ exhaló, abriendo los ojos para encontrarse con los tuyos antes de besarte con hambre.

𝗫𝗜𝗔𝗢 !

xiao abrió la puerta del asiento trasero, indicándote que te acercaras a él mientras te acostabas, solo tus piernas estaban fuera del auto. Se inclinó hacia tu cuerpo para acercarte más, lamiendo sus labios, ─xiao. ─estabas ansioso con una expresión preocupada, preocupado de que ojos no deseados los vieran a ambos, ─¿y si alguien nos ve? ─tu pregunta estaba justificada, pero xiao la descartó. ─entonces no grites mi nombre.

sus manos cayeron sobre tu falda, volteándola sobre tu estómago mientras te arrancaba las bragas, dejándolas colgar sobre tu tobillo. Antes de zambullirse para saborearte, te observó atentamente, la forma en que tu respiración se aceleró o cuán particularmente dulce lo mirabas a través de tus pestañas. Tu coño estaba babeando con tu resbaladizo, sus dedos arrastraban tu esencia sobre tus pliegues antes de agacharse, comenzando a besar tu clítoris.

colocó sus dedos en tus pliegues antes de abrirlos, lamiendo entre ellos mientras tu pegajosa capa cubría su músculo húmedo. Xiao tarareó ante el sabor, eras tan dulce, con la amargura natural que lo acompañaba. ─Mierda. ─gemiste, ocultando tus sonidos pecaminosos con el dorso de tu mano antes de que xiao decidiera chupar tus pliegues. Tu corazón comenzó a latir con tanta fuerza en tu pecho, que prácticamente podías oírlo en tus oídos cuando su lengua aceleró gradualmente su ritmo, su mano libre acariciando tu pecho mientras tratabas desesperadamente de mantenerte callado.