40

29 1 0
                                    

La mujer se llevó a Maggie para que se uniera a un grupo de mujeres y les tomaran fotos, Kurt la siguió con la caja de cupcakes, alguien la tomó para ponerla con los regalos y le dijo que era tacaño por dar un regalo así, él miró feo al chico que le dijo eso, pero se dibujó una sonrisa al ver a Maggie divertirse en las fotos con las mujeres de la boda.

Luego lo llevó a tomarse fotos con todas ellas, lo jaló y lo puso en medio. Al terminar los llevaron a todos a la playa, de hecho, a las mesas que tenían montadas ahí para la recepción, cenaron (de nuevo) y de pronto mientras charlaban, Maggie extendió su mano izquierda para tomar su copa y beber, pero en lugar de eso, le pegó al vidrio con el anillo que le dio Kurt y todos le pegaron a sus copas creyendo que era para hacer un brindis, Kurt rio, lo estaba tratando de ocultar con su mano derecha.

Maggie no tuvo más remedio que ponerse de pie, nerviosa y ante las risas de Kurt, le pegó con el pie en la espinilla para que nadie se diera cuenta, él de inmediato dejó de reír, tomó su copa y sonrió con nervios:

-Maggie: (tose) Hola, hola a todos, quiero proponer un brindis por los novios, Susan y Cameron.

-Kurt: (la corrige en voz baja, para que solo ella escuche) ¡Caleb!

-Maggie: Por Susan y Caleb, que sus vidas sigan siendo tan maravillosas como lo han sido para este punto. Disfruten cada momento que estén separados, porque eso los hará apreciar aun más los momentos que pasen juntos. Ámense el uno al otro como sino hubiera un mañana, como si su vida dependiera de ello, sean tan felices que puedan llegar a las estrellas, por Susan y Caleb.

-Todos: (alzan sus copas) ¡Por Susan y Caleb!

Se sentó y momentos más tarde Kurt le aplaudió cuando se sentó:

-Kurt: Lindas palabras, adecuadas para un brindis en una boda en la que no fuiste invitada.

-Maggie: Cállate que tú tampoco fuiste invitado (se sienta de nuevo). No puedo creer que sean tan jóvenes ¡dios! Velos, no deben tener más de ¿qué? ¿20 años?

-Kurt: 30 y nosotros éramos más jóvenes que ellos para el viaje a Las Vegas.

-Maggie: ¿Qué? No lo creo, no es... ¡Oh rayos! ¿tan viejo eres? (ríen). Es solo que creo que no saben en qué se han metido, un compromiso tan... grande.

-Kurt: (para romper su preocupación) ¿Tan divertido, como cenas gratis fingiendo ser esposos (ríen)?

-Maggie: Al menos ellos no tendrán que fingir ser esposos, ¿el amor? Eso es otra cosa, tal vez fuiste más convincente que ellos.

-Kurt: Les doy un año y tres meses.

-Maggie: 2 años.

De pronto se escuchó Rocketman de Elton John para el primer baile de los novios, Kurt y Maggie se miraron el uno al otro, rieron y al mismo tiempo dijeron:

-Maggie y Kurt: ¡6 meses!

Aun sentados, Kurt se para y le extiende la mano a Maggie para llevarla a bailar:

-Maggie: ¿En serio? No creo que... ¡qué más da!

Se levanta, van a bailar, se abrazan, están un poco pegados, Kurt lo nota y dice:

-Kurt: ¿Acaso hay algo que quieras decir? (sarcasmo).

-Maggie: (ríe, aún abrazada a él) ¡Cielos! ¡Cállate! Jajaja, es solo que... tiene mucho tiempo que no escuchaba la canción, menos bailarla y contigo...

-Kurt: Desde nuestra boda ¿no es así?

-Maggie: Eso creo, qué más da jajaja. Es momento de que le pasemos la estafeta a alguien más.

-Kurt: ¿Qué?

-Maggie: (ríen) ¡Olvídalo! Jajaja, solo baila conmigo Kurty Kurt, ¿recuerdas esos días?

-Kurt: ¿Cómo olvidarlos?

-Maggie: Eres... eras Rocketman, cada vez que debías irte a preparar o cuando regresabas y... siempre ame de ti que no importaba quién se burlaba de tu sueño, nunca dejaste de luchar por él y desde el espacio callaste bocas (ríen).

-Kurt: Gracias a ti Maggie May.

Termina la canción, se dejan de abrazar y sigue algo más movido que bailan con emoción.

Guerra de papás 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora