Guerra de papás 3

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Vuelven al hotel, Maggie se acuesta, Dusty y Kurt se sientan en la sala:

-Dusty: Vete, vigilaré a mamá.

-Kurt: ¿Qué? ¡No! Yo la cuidaré, debes ir con los niños.

-Dusty: ¡Ja! ¿Y dejar que se queden a solas en la habitación? No dormiré si es necesario abuelo.

-Kurt: Entonces espero que aguantes todo un día sin dormir muchacho malcriado.

Se miran desafiantes. Llega la mañana, Maggie se levanta, va a su cocina para prepararse un café, pasa junto a Kurt y Dusty que roncan mucho:

-Maggie: ¡Buenos días ángeles! ¡Buenos días Charlie!

Los despierta, les lleva dos tazas de café:

-Maggie: Espero que hayan descansado tan bien como yo escuchando sus ronquidos (sonríe enojada) y estén listos. Ahora, tú (señala a Kurt), ve a bañarte y vestirte, tú (ahora señala a Dusty) ve a hacer lo mismo y a preparar a los niños.

-Dusty: ¿Qué? ¿para qué?

-Maggie: Mmm... lo olvidaron, no me sorprende, de tal padre tal hijo. Iremos todos en familia a un viaje en bote y al acuario, ahora largo de mi sofá.

Dusty se va, Kurt se talla la cara con ambas manos:

-Kurt: Buen café por cierto.

-Maggie: ¿En serio? Hay que agradecerle a la compañía que los hace jajaja. Ya vete Kurt.

Él asiente, se para, quedan con el sillón entre los dos, pero de frente, ambos se ponen sobre el sofá para besarse (ella trae un camisón y bata, él aún trae el traje), se abrazan y besan con pasión, la carga para llevarla a la habitación:

-Kurt: ¡Maggie!

Ella reacciona, todo fue su imaginación, está sorprendida:

-Maggie: ¿Qu... qué? ¿qué decías?

-Kurt: Te veré en un rato.

-Maggie: Claro, claro, largo ya (sonrisa nerviosa).

Lo acompaña a la puerta, intercambian miradas de "¿ok?".