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Rodrigo

Compramos burritos y los comemos en el lago. Después de eso, vamos por un helado en uno de los muchos lugares en la calle principal. Iván quiere hablar sobre el entrenamiento, al parecer. Así que lo hacemos.

—Muchos de estos niños todavía no entienden lo que es el "primer toque". —

Teorizó—. Si hubiera una cosa que pudiesen llevarse a casa, sería eso. En un juego de alto nivel, sólo tienes una oportunidad con el disco. Si pierden el tiempo reposicionándose, se acabó.

—A-ja. —Pero cada vez que dice "primer toque" mi mente está en un tipo de toque completamente diferente. Él está hablando mucho con sus manos, y estoy hipnotizado con sus bíceps, y el pelo rubio en sus brazos, que ahora sé que es muy suave al tacto. Pienso ensacarle esa camiseta y besar su pecho, y mi pene comienza a crecer pesado.

¿Usar pantalones cortos deportivos de nylon? No fue inteligente. Y la calentura ni siquiera es mi único problema.

Ayer por la noche le pregunté a Iván si se estaba volviendo loco. Divertido, ahora hepasado un día entero haciendo precisamente eso.

El chico está jodiendo con mi mente. En primer lugar actúa como si nada pasó. Luego me hecha para que él pueda tomar una "siesta". Pero de ninguna manera estuvo haciendo eso. Es decir, no nací ayer. Cuando llegué a la habitación y lo vi de pie allí con aire de culpabilidad, era obvio lo que había estado haciendo. El hijo de puta se había estado masturbando.

Hubiera estado feliz ayudándolo con eso, pero claramente prefirió hacerlo solo antes de dejar que lo tocara de nuevo.

Excepto... que él me había estado observando. Una vez más, no había nacido ayer.

Noté la forma en que me estaba mirando antes de salir.

Jesús. Qué bueno que él no sea un policía de tráfico, porque está enviando suficientes señales mezcladas para causar un choque de diez autos.

He jugado al buen amigo, pero por dentro soy un desastre. Porque una vez no fue suficiente, y sin embargo no tengo ni idea de qué está pensando Iván.

Ninguna pista.

Empujando lo último de mi cono de helado en mi boca, lo único que quiero esarrastrarlo de nuevo a nuestra guarida y hacer cosas muy sucias con él. ¿Pero eso incluso estáen las cartas? Sé dos cosas hasta ahora. En primer lugar, Iván Buhajeruk se excitó por mí. Lovi anoche. Y en segundo lugar, no está horrorizado por lo que hicimos.

Eso es increíble, y siento como que debería pellizcarme porque incluso tuve una noche impresionante con el amor de mi vida. Pero eso no me garantiza una puta cosa. Él no me debe nada. Él podría cansarse de este pequeño experimento. Probable que ya lo ha hecho.

Es aterrador. Porque quiero probarlo de nuevo. Infiernos, quiero atragantarme con él.

Soy un glotón por Iván Buhajeruk.

—¿Rodrigo?

—¿Qué? —Oh, mierda. He estado mirándolo, y no tengo idea sobre qué estamos hablando.

—Te pregunté si querías nadar. Todavía hace calor.

—Uh. —Realmente sólo quiero ir a casa y estar muy, muy desnudo—. No estoy usando un traje de baño.

Sus ojos se estrechan.

—¿Quién eres tú?

Claro. Cuando te pasas la vida dando cero mierda sobre la vestimenta apropiada, la gente lo nota.

—Está bien —concedo—. Vamos a nadar.

El teléfono de Iván suena.

—Oh. ¿Aguantas dos minutos? Si no contesto, van a seguir llamando. —Él desliza la pantalla, pero mantiene el teléfono lejos de su cuerpo—. ¡Hola chicos!

him; rodrivanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora