Estaba bailando con Yha, sorprendentemente me divertía, sin embargo, no sé si era por la cantidad de cuerpos a mi alrededor, pero me estaba sintiendo asfixiada y mi vientre y huesos dolían. El efecto de las pastillas estaba desapareciendo. Me disculpé con mi compañera de trabajo y me dirigí al baño para tomar mis pastillas, y antes de que pudiera tomar alguna, una mano me sujetó del hombro, impactándome contra el muro, mis pastillas cayeron y levanté el rostro para ver a dos mujeres alfa intimidándome, no era la primera vez, seguramente no sería la última, pero estaba aterrada. Intenté decirles que no estaba interesada, pero no me hicieron caso. Mi cuerpo se calentaba y me sentía cada vez más mareada. Puede que sea absurdo, un estúpido deseo que no podría pasar, pero deseé que fuera como antes, que Khum Sam viniera y me rescatara, mostrándome una encantadora sonrisa y diciéndome que estaría bien, que cuidaría de mí. Quise reír a mi arrogancia, ya Khum Sam tenía buenos pretendientes, el señor Kirk, por ejemplo, era una buena persona, además de que era atractivo y con dinero, una persona como ella. ¿Qué era yo? Una niña que la admira y hasta la ama, pero ella no es la Khum Sam que a mi tanto me gustaba, era alguien amarga que amenazaba con despedirme a la menor oportunidad. Intenté sujetarme del lavabo, fue entonces que escuché su voz llamándome, siendo como un sueño. Khum Sam me miraba con angustia y luego se fijó en las mujeres, luego de eso todo fue borroso para mí. Un cuerpo cálido me alzaba y quise restregarme en ella, que me diera el tan deseado alivio, algo que todo omega deseaba en estos casos, especialmente al no ser consciente de sus actos. Por alguna razón resultaba reconfortante ser sostenida.
— ¡Mon, si no te pones bien te bajo el sueldo! —Escuché vagamente la amenaza que ahora era absurda, estando en el asiento del coche, imaginé que el techo estaba levantado, porque la brisa me hacía sentir livianamente mejor. — ¡Mon! ¡¿Qué hago?! ¡¿Te llevo a tu casa?!
—No, no lo hagas... Mis padres no deben saber... —Murmuré en mi estado debilitado y ella me miró brevemente, pasándose la mano por el cabello por la frustración. ¿Ella era Khum Sam o un sueño?
—Maldición, Mon... Más te vale no morirte.
No sé cuánto tiempo había pasado desde que me quedé inconsciente, cuando me desperté estaba acostada en una cama que no era la mía, además de que estaba prácticamente desnuda, únicamente con mi ropa interior y un paño húmedo en la cabeza. Al girarme allí estaba Khum Sam, abrí los ojos de la impresión y todo apareció de repente en mi cabeza. Ella cargándome, desnudándome, dándome agua y una pastilla, para luego recostarme. Me sentí abochornada y quise escapar, hasta que una mano me sujetó de la muñeca apenas puse un pie en el suelo.
— ¿A dónde crees que vas? —Inquirió con el ceño fruncido, sentándose, por lo que instantáneamente me tapé con la manta. — ¿Sabes en todos los problemas que me metiste?
—Lo siento, Lady Boss.
— ¡Ni siquiera me dijiste que irías al baño sola! ¡¿Acaso estás loca?!
—Perdóname. —Comencé a llorar y ella farfulló, otra vez pasándose la mano por el cabello.
—Para de llorar, a este paso todos van a creer que me gusta hacerte llorar. ¡No quiero ser la mala! ¡¿Entiendes?! ¡Yo no hice nada malo!
—Lo siento mucho, Khum Sam. —Dije una y otra vez limpiando mis lágrimas con las manos.
—Mon, para de llorar, por favor.
—Tenía mucho miedo. —Confesé y me eché en su regazó, ella estaba sorprendida e incómodamente me acarició la cabeza.
¿Se puede estar más abochornado en esta vida? ¡Si se puede! Por qué me quedé dormida de tanto llorar, al despertar Khum Sam no estaba a mi lado. Me levanté torpemente y la vi salir del baño. No había reparado en que ella también tenía una bata puesta, una negra. Por alguna razón me miraba de forma sospechosa. ¡Estaba sonriendo! Pero no era una sonrisa linda, esta daba miedo, era como si fuera un pequeño diablo.
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Fanfic de GAP THE SERIE: Mordida de posesión
FanfictionMon ha admirado a Khum Sam desde hace años, ya que una vez fue rescatada por ella, por lo que miente de que es beta para entrar en la empresa de su amada, pues no aceptan omegas. Mon descubre que Khum Sam no es como la recordaba y que la millonaria...