Capítulo 02: Soy la primera que la desafía

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Khum Sam me miró intensamente, sus ojos eran tan penetrantes que me ericé. Si fuera por mi condición de omega, ya me habría rendido a ella, no obstante, miraba al resto de mis compañeros, todos demasiado temerosos para oponerse a ella. ¿Realmente hay alfas en este lugar? Porque ninguno de los presentes podía desafiarla. ¿Por qué no había omegas en este lugar? Era una pregunta constante en mi cabeza que no tenía respuesta, especialmente debido a que en muchas empresas hay, claro, en secciones diferentes para que no haya problemas con los alfas que los reclamen en el celo, pero aquí no había tal cosa. Deseaba preguntar, pero yo también estaba un poco asustada de ella, pues no era la Khum Sam que solía conocer, aquella que acarició mi cabeza y me sonrió amablemente. Temía a la desconocida que esperaba mis atrevidas palabras.


- Lady Boss, creo que todos pensarían mejor si los dejara descansar. -Dije buscando valor y ella bufó, para mirarme nuevamente. No estaba segura si su expresión era sorpresa o indignación, de hecho, parecía un poco molesta, pero también había curiosidad. Todos decían que tenía la peor de las sonrisas, ya que significaba desastre, y que su rostro serio era enigmático. Los alfas suelen ser muy activos con sus emociones, Khum Sam no, pareciendo esperar a ver si debía atacar. -Todos están cansados.


- ¿Tú que eres, pequeña cosa? ¿Una beta?


-Sí. -Dije agachando un poco mi cabeza, no creyéndome capaz de sostenerle por mucho más tiempo la mirada.


- ¿Y una beta me quiere decir qué hacer?


-No es eso, Lady Boss, es que ya pasa de la hora y hay personas que necesitan comer, o no trabajaremos bien.


-Tú nombre. -Demandó, no como un grito, sino como algo más, creo que curiosidad, podía estar apenas un sesenta por ciento segura.


-Kornkamon, Lady Boss.


-Ven a mi oficina, los demás se pueden retirar.


- ¡Loca y valiente, Mon! -Chillaron mis amigos y volví a sentarme para tratar de recuperar el aliento.


- ¿Creen que la despida?


- ¡Idiota! Mon ha estado dos meses aquí y es una de las mejores. -Reprendió Yha a Chim y colocó su mano en mi hombro. - ¿Estás bien?


-Sí, pero creo que es la segunda vez que la hago enfadar. -Respondí al levantarme tras sentirme mejor. -Mejor iré o me despedirá en verdad.


Mis amigos me dieron ánimos y tras llegar a su oficina ella señaló resueltamente la silla frente a su enorme escritorio. Tragué dolorosamente, especialmente al ella mirarme desde una esquina, donde sirvió un vaso de agua para ella, lo bebió y sirvió otro, dándomelo. Me dio un poco de vergüenza, pero ella movió la cabeza en una orden y bebí casi ahogándome y limpiando el agua residual con el brazo desnudo.


-Nadie me desafía, tienes suerte de ser pequeña y verte delicada.


-No era mi intención desafiar, pero me pareció cruel lo que hacía... No se estaba preocupando por sus empleados.


-Y sigues hablando... No te di permiso de hacerlo.


-Me estoy explicando.


-Y crees que soy cruel.


-Lo creo... Usted no prestó atención a los que evidentemente se sentían mal.


- ¿Y debería? Si no pueden con el trabajo, que se vayan. -Dijo rodeándome, casi acechándome. - Soy la jefa, después de todo.


-Yo sé eso... Pero no debe ser mala, ellos trabajan duro.


-Sigues con ese olor fuerte... No me gusta. -Frunció las cejas y los labios, se acercó a mí y respiró profundamente. -No me gusta ese perfume batato tuyo, ya te había dicho que lo cambiaras.

Fanfic de GAP THE SERIE: Mordida de posesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora