Solo faltas tu (Sasusaku)

12. La madrina

Sasuke estaba sentado en su sala de estar, escuchando a Suigetsu enumerar algunos folios mientras Karin los iba colocando con cuidado en las cajas respectivas. Shikamaru llevaba media hora conversando por el teléfono con Kakashi, cerca de la cocina de su apartamento para tener privacidad.

– Creo que estamos yendo en círculos– comentó Suigetsu blanqueando los ojos. – Hemos revisado bastantes casos sin resolver y casi no coinciden con los cuatro del mismo loco.

– Es verdad– corroboró Karin, quitándose un mechón de la mejilla. – Hay cuerpos con incisiones de autopsia, pero conservan las uñas o hay cuerpos sin uñas, pero no están mutilados.

– Lo sé... Me está hartando esto– se quejó Sasuke estirando los brazos.

Suigetsu y Karin terminaron de organizar los últimos archivos cuando Shikamaru soltó un grito. Se volvió con violencia y señaló la televisión. Tenía un gesto de desgracia en el rostro.

– Prende la televisión, Uchiha– urgió. – ¡Préndela!

– A ver.

– Canal cinco, canal cinco...– dijo Shikamaru.

Sasuke se puso de pie y con rapidez encendió el televisor para ver con horror el descubrimiento. Un granjero había encontrado una bolsa de basura que emitía un olor extraño, como criaba cerdos no le prestó atención hasta que un perro rompió la bolsa y descubrió cabello humano.

– El hallazgo aún no ha sido confirmado por las autoridades como una víctima más del Descuartizador de Modelos. – rezó la mujer que presentaba las noticias en una edición especial. Se veían imágenes distorsionadas del hallazgo para no impactar a los televidentes, además que le habían puesto un filtro en blanco y negro, probablemente por la sangre. – El granjero, el cual mantendrá su identidad en secreto, llamó a la policía quienes asistieron, seguidos de un centenar de agentes del CIN. La presencia de los agentes genera suspicacias de que efectivamente podría ser el mismo asesino quien hasta el momento ha cobrado la vida de cuatro mujeres. Intentamos conversar con uno de los agentes, sin embargo... 

– ¿Es o no es, Hatake? – preguntó Shikamaru imperativamente.

Sasuke puso la televisión en mudo, viendo a Naruto en la pantalla, moviendo la cabeza a los lados mientras intentaban ponerle el micrófono en la cara. Era mejor que no diga nada. Escuchó a Shikamaru advertirle a Hatake de que lo pondría en altavoz. 

– Es un hallazgo muy particular– comentó la voz apagada de Kakashi. – Pero sí es el mismo asesino serial. No lo hemos develado al público todavía porque este es diferente.

– ¿En qué es diferente? – preguntó Sasuke, sentándose y acercando el rostro a la mesa de centro, donde Shikamaru había dejado el teléfono.

– No es un cuerpo completo al que le falta una extremidad como en los casos anteriores– dijo Kakashi y chasqueó la lengua. – El granjero no abrió la bolsa para su buena suerte porque hubiera encontrado pedazos. Lo que se llevó de este cuerpo esta vez es la pelvis.

– ¡¿Qué?! – soltaron Karin y Suigetsu al unísono.

– ¿Cómo saben que es el mismo asesino? – preguntó de inmediato Sasuke.

– Sin uñas, mismos cortes de autopsia y la mujer comparte las mismas características corporales de las otras víctimas– recitó Kakashi y suspiró. – Cuando llegaron los peritos encontraron el pecho de la mujer intacto, pero los brazos rotos para que quepan en la bolsa. Las piernas rotas también, pero cercenadas, no hay pelvis. Hyuga menciona un corte limpio horizontal debajo del ombligo. Esto cambia todo el rumbo de la investigación porque los necesito mañana, olvídense de los archivos que estaban leyendo, van a pasar al grupo principal.